ST. PETESBURG, Florida-- Conforme se apaga su carrera, Albert Pujols sigue encontrando combustible para mantener encendida la llama de la pasión por jugar al béisbol.
Pujols, un futuro miembro del Salón de la Fama, sigue dejando atrás a los más grandes de todos los tiempos en los principales lideratos ofensivos de las Grandes Ligas, mientras enfrenta la terrible realidad de que su carrera se marchita lentamente.
A los 38 años de edad y en su temporada #18 el astro quisqueyano de los Los Angeles Angels batea .256 con 17 jonrones y 55 carreras impulsadas en 96 partidos, 55 de ellos en la primera base.
"En verdad, la pelota es difícil, no importa si eres un joven o eres veterano", dijo Pujols a ESPN Digital durante una serie esta semana contra los Tampa Bay Rays en el Tropicana Field.
"Lo importante para mi es encontrar una rutina en donde sé que estaré preparado para tener buenos resultados. Son los ajustes que tienes hacer. Nadie hará esos ajustes por ti. Tienes que hacerlo y saber cuales son las claves principales que debes trabajar para que te ayuden en el terreno", dijo.
"Es lo que he hecho hasta ahora, a través de las lesiones y todo lo que he pasado estos últimos años", agregó Pujols, quien batea .311 con cinco jonrones y cinco dobles en sus últimos 15 partidos.
Pujols, el #23 de la lista de todos los tiempos con 3,068 hits, recientemente pasó a Ken Griffey Junior en el sexto puesto entre los líderes de cuadrangulares (631) y con 1,973 carreras impulsadas ocupa el lugar #6, de acuerdo a la estadísticas oficiales de la liga. El quisqueyano es uno de cuatro peloteros con 3,000 hits y 600 jonrones (los otros son Hank Aaron, Willie Mays y el dominiconorteamericano Alex Rodríguez) y solamente necesita 27 impulsadas para unirse a Aaron y A-Rod en el club de los que tienen 3,000 hits, 600 jonrones y 2,000 remolques.
"Ken Griffey Junior siempre ha sido una leyenda en el béisbol y nosotros, los dominicanos, desde niño lo admirábamos. Era el swing más bonito que había en las Grandes Ligas. "Tener la oportunidad de jugar en las Grandes Ligas, conocerlo y jugar en su contra, y tener la oportunidad de pasarle en la lista de jonrones ha sido una bendición y un honor", dijo Pujols.
El triple ganador del premio Jugador Más Valioso y 10 veces miembro del equipo Todos Estrellas de su liga, sabe, sin embargo, que una asombrosa cantidad de personas, entre aficionados y medios de comunicación, se enfocan más estos días en su natural declive que en su ascenso entre los principales lideratos históricos de las ligas mayores. Pujols bateó sobre .300 en cada uno de sus primeros 10 años, pero solamente por encima de .270 en uno de los últimos cinco.
Desde que firmó su gigantesco contrato de $240 millones de dólares por 10 temporadas, Pujols batea .261 con 186 jonrones en seis y media temporadas con Los Angeles, tras hacerlo para .328 con 445 vuelacercas en 11 campañas con los St. Louis Cardinals. Y aún tiene pendiente tres años y $87 millones de dólares en su pacto.
"¿A quién no le encantaría tener 30 jonrones y 100 carreras remolcadas al final del año? La gente no lo ve así, solo se concentran en que Pujols ha bajado sus promedios de bateo, de alcanzar bases o Slugging o lo que sea, pero yo sigo produciendo y trato de hacer lo mejor que pueda para ayudar a mi equipo a ganar", dijo Pujols, quien promedia 38 cuadrangulares y 120 carreras producidas por cada 162 partidos durante su grandiosa carrera.
"Y lo más importante es que me puedo mirar en el espejo y sé que cuando vengo aquí, si estoy en en un 75% le saco un 100% al 75% y le doy todo lo que yo pueda a mi equipo para jugar ese día y no tengo que mirar atrás o a los lados, si hay gente hablando o mirando como juego la pelota. Es algo a lo que no doy mente", apuntó.
En esta etapa de su carrera, Pujols se siente orgulloso por estar pasando la antorcha dignamente a una nueva generación.
"Todavía tengo el hambre, quiero ganar, me gusta ayudar a los muchachos en el equipo. Así como mi compadre Plácido Polanco, Edgar Rentería, Jim Edmonds, Mark McGwire, todos esos veteranos que tuve en mi primer año en San Luis, que me aconsejaron, me abrazaron como su hermano, me dieron la mano y me enseñaron de como jugar la pelota", dijo.
"Eso es lo que he visto en mi carrera. Que lo que me enseñaron, lo estoy haciendo con otros 18 años después. Haciéndolo con estos muchachos jóvenes, tratando de que mejoren, que vean la pelota desde el punto de vista de pueden hacer mucho dinero, sino que traten de respetarla y jugarla como se debe jugar. Fue lo que me enseñaron desde el primer día que tuve en Grandes Ligas y es lo que estoy enseñando".
"Esa es la pasión que tengo y creo que cuando esa pasión se vaya, será el tiempo en que Albert Pujols deebe retirarse e irse a casa. Pero tengo esa pasión todos los días cada vez que me levanto, esté bateando o no esté bateando. Trato de todos los días venir aquí y ayudar a mis compañeros y disfrutar un día más que Dios me ha dado en esta tierra para hacer lo que me gusta hacer que es jugar a la pelota", dijo Pujols.