Los Dodgers de Los Angeles hicieron su tarea, al llevarse al menos un triunfo en la capital del país y ahora reciben a los Nacionales de Washington en sus predios de Chávez Ravine para tratar de aprovechar al máximo su condición de locales.
Pero tal como hizo el conjunto angelino en Washington DC, los Nacionales buscarán golpear en el primero de los dos partidos, con lo que garantizarán, al menos, un regreso a la capital para un eventual choque decisivo.
El zurdo cubanoamericano Gio González tomará la lomita del Dodger Stadium por los visitantes, mientras que el debutante japonés Kenta Maeda lo hará por los anfitriones.
González (11-11, 4.57 de efectividad) viene de la peor de sus últimas siete temporadas y su experiencia previa en playoffs incluye tres aperturas, sin decisión en ninguna de ellas y promedio de limpias de 3.21 en 14 episodios.
Ante el zurdo de los Nacionales, el manager de los Dodgers, Dave Roberts, ensayará una alineación más derecha, que incluirá al cubano Yasiel Puig y a Howie Kendricks en los jardines y dejará en la banca a Josh Reddick y Andrew Toles.
Charlie Culberson podría también alinear en segunda base por el veterano Chase Utley.
Por su parte, Maeda viene de una muy buena primera temporada en Grandes Ligas, en las que consiguió 16 triunfos con 11 reveses y efectividad de 3.48.
En 32 aperturas trabajó 175.2 innings y propinó 179 ponches. Su promedio de hits o boletos permitidos por inning fue de 1.139.
La clave para el nipón será dominar a Daniel Murphy, quien desde su explosión ofensiva en la postemporada pasada se ha transformado en uno de los mejores bateadores de todo el béisbol.
O por lo menos, contener lo más que pueda al novato Trea Turner, a Bryce Harper y a Jayson Werth, los tres hombres que le van delante en la tanda, para impedir que Murphy llegue con muchos hombres en circulación y pueda causar un daño mayor.