Terry Francona quiere sangre y no precisamente la que emanaba del dedo de su lanzador Trevor Bauer.
Francona busca desplumar de una buena vez a los Azulejos de Toronto y para ello enviará a la lomita del Rogers Centre a su principal carta de triunfo, el derecho Corey Kluber, en busca de la barrida para los Indios de Cleveland.
Luego de la clase magistral que diera el manager de los Indios al manejar su cuerpo de pitcheo en el tercer juego de la serie de campeonato de la Liga Americana, ante la salida prematura de Bauer después de dos tercios de innings, ahora va con todo para completar la limpieza.
Kluber ha estado imbateable en la postemporada, pues en dos aperturas, una en la serie divisional ante los Medias Rojas de Boston, y otra ante los Azulejos, tiene efectividad de 0.00 en 13.1 innings.
El derecho de Cleveland dejó en blanco a Boston por siete entradas y repitió la dosis ante Toronto por espacio de seis y un tercio. En total ha permitido nueve hits, con 13 ponches y cinco boletos.
Sorprendió de alguna manera la decisión de Francona de enviar a la lomita a Kluber, en lugar del novato Mike Clevinger, anunciado inicialmente al comienzo de la serie como posible cuarto abridor de la rotación.
El mentor hizo el anuncio antes del juego del lunes, cuestionable ahora luego del excesivo trabajo al que debió someter al bullpen por la lesión de Bauer.
Con la ventaja cómoda de 3-0 en la serie puede verse como arriesgado mandar a Kluber con pocos días de descanso, cuando podría usarlo con el reposo adecuado mañana miércoles.
Si los bates dormidos de los Azulejos despiertan y consiguen descifrar los envíos de Kluber, ello obligaría entonces a Francona a forzar al resto de la rotación a trabajar con poco descanso también, pues entonces le tocaría a Josh Tomlin, con cuatro días de pausa solamente.
Por Toronto abrirá el derecho Aaron Sánchez, líder en efectividad de la Liga Americana, pero inefectivo en su primera salida en esta postemporada, cuando permitió seis limpias a los Vigilantes de Texas en la serie divisional.
En esa ocasión, Sánchez trabajó 5.2 innings y aunque solamente toleró tres hits, dos de ellos fueron jonrones y además regaló cuatro bases por bolas. Se fue sin decisión, aunque su equipo terminó llevándose la victoria 7-6.
Pero el problema del equipo canadiense no ha sido el pitcheo. De hecho, sus lanzadores han permitido ocho carreras en tres juegos, a 2.6 como promedio por partido.
El problema ha sido la ofensiva, capaz de generar tres anotaciones solamente.
De los cinco primeros bateadores de la alineación, solamente Josh Donaldson ha estado a la altura de las circunstancias.
Entre los dominicanos José Bautista y Edwin Encarnación, Troy Tulowitzki y Russell Martin batean de manera combinada cinco hits, cuatro de ellos sencillos, en 42 turnos (.119), sin ninguna carrera remolcada.
La clave será atacar temprano -si pueden- a Kluber, porque si los Indios llegan con ventaja a los innings finales, tendrán que fajarse con Andrew Miller, convertido en la versión zurda del legendario Mariano Rivera.
Miller parece de otro planeta. En cinco innings de relevo en esta serie ha sacado 13 de 15 outs por la vía del ponche y sumando la serie ante Boston, lleva 20 abanicados en 10.2 episodios.