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Alex Cora abre sorpresivamente con David Price el J5 de la Serie Mundial

LOS ÁNGELES - La sorprendente decisión del mánager Alex Cora de enviar a David Price al montículo en el Juego 5 de la Serie Mundial echó leña a las especulaciones de que las molestias de hombro de su as, Chris Sale, van mucho más allá de lo que ha sido reportado.

Este sábado será Price, que efectuó 88 lanzamientos a través de seis entradas en el segundo juego de la serie el miércoles, además de 13 lanzamientos saliendo del bullpen en el maratónico tercer partido, y no Sale, como había sido anunciado previamente, quien estará en lomita del Dodger Stadium para lo que podría ser el último partido de la Serie Mundial 2018 entre los Medias Rojas de Boston y Dodgers de Los Ángeles.

Cora alegó que Sale, quien lanzó el primer juego contra los Dodgers el pasado martes, se sentía bien físicamente y que era sólo una decisión basada en su sentido de la mejor opción para el equipo.

"Sentimos que David (Price) está bien para lanzar mañana", explicó Cora. "Lo hablamos antes del juego y este es un buen lugar para David, en un parque de la Liga Nacional, para abrir el juego. Obviamente ha estado lanzando bien. Creemos que, para el equipo, donde estamos en cuestión de lanzadores, es bueno irnos con David. Hablamos de eso todo el día y lo decidimos, y acabo de hablar con Chris y David, y eso es lo que vamos a hacer".

La decisión parece estar basada en darle más descanso a Sale y tenerlo disponible para un posible sexto partido en Fenway Park el martes, aunque Cora destacó que el zurdo podría estar disponible para trabajar una entrada de relevo el domingo.

También cabe destacar que Price fungió en un rol similar en su dominante victoria 4-1 sobre los Astros de Houston en el quinto juego de la Serie de Campeonato, con la cual Boston conquistó el banderín de la Liga Americana. Price blanqueó a los Astros a través de seis entradas, con nueve ponches, lanzando con sólo tres días de descanso y luego de calentar en la octava y novena entrada del cuarto partido de la serie la noche anterior, efectuando cerca de 25 lanzamientos.

Cora también ha requerido un alto uso de sus relevistas en los últimos partidos, y Price es una mejor opción en términos de darle una extensión más larga de entradas y así evitar recurrir al bullpen antes de lo deseado.

Sale a su vez recibió crédito de algunos de compañeros por sus apasionadas palabras el sábado, las cuales precedieron la impresionante remontada de los Medias Rojas, que anotaron ocho carreras entre la séptima y novena entradas para alzarse con la victoria 9-6 para asumir una cómoda ventaja de 3-1 en la Serie Mundial.

"¡Lo que tiene son dos lanzamientos!", les gritó Sale a sus compañeros en referencia al abridor de los Dodgers, Rich Hill, que blanqueó a los Medias Rojas después de seis entradas de dominio.

"Estaba en el túnel y escuché a alguien gritando", explicó el versátil jugador de cuadro Brock Holt, quien le preguntó a Mookie Betts quién era el que estaba vociferando. "Me dijo 'Sale'. Ay, Dios mío. Estaba muy enojado con nosotros. Creo que eso nos inspiró. No queríamos verlo enojado. Así que decidimos comenzar a hacer un poco de swing con los bates".

El coach de bateo Tim Hyers reconoció el liderazgo de Sale como algo inspirador para sus jugadores: "Comenzó a decirnos que teníamos que despertar, y los muchachos respondieron".

Mitch Moreland, quien admitió que no estaba consciente de las apasionadas palabras de Sale, inició el rally de los Medias Rojas con un cuadrangular de tres carreras como emergente contra el relevista Ryan Madson en el séptimo inning, antes de que un jonrón en solitario del primera base Steve Pearce contra el cerrador Kenley Jansen empatara el marcador en el octavo.

"Para ser honesto, no escuché nada", admitió Moreland. "Creo que estaba adentro, tal vez bateando o estirándome o preparándome o algo así, porque a esas alturas del juego, sabía que mi turno podría llegar pronto y estaba tratando de prepararme. No sé lo que dijo. Estoy seguro de que fue algo que nos despertó, y obviamente funcionó. Así que fue algo bueno para nosotros".

Ese cuadrangular de Moreland fue el segundo jonrón de postemporada para un bateador emergente de los Medias Rojas, luego del jonrón de Eduardo Núñez en el primer partido de la serie. Los Medias Rojas se convirtieron en el primer equipo en la historia de la Serie Mundial en registrar dos jonrones de bateadores emergentes en una sola serie.

Luego de que Pearce empató el partido con el jonrón en contra de Jansen, quien arruinó salvamentos en dos noches consecutivas de la misma manera, Holt conectó un doblete en la novena entrada y anotó la carrera de la ventaja mínima tras un sencillo de Rafael Devers.

El imparable de Devers, quien cumplió 22 años el miércoles, lo convirtió en el primer jugador menor de 23 años en registrar una carrera impulsada en una Serie Mundial en la novena entrada o más tarde.

Pearce luego conectó su segundo extrabases, un doble limpia bases en contra del relevista japonés Kenta Maeda, y otro sencillo de Xander Bogaerts sirvió para ampliar la ventaja a cinco carreras en la parte alta de la novena.

Los Medias Rojas necesitarían cada una de esas anotaciones, con el cerrador Craig Kimbrel teniendo otra pobre presentación esta postemporada, permitiendo dos carreras en la parte baja de la entrada que sellaron el marcador 9-6 al final.

"Sentíamos que no teníamos energía, en realidad no había ninguna. Esto tuvo que ver con Rich Hill, con la forma en que estaba lanzando. Pero algo característico de nuestro equipo, es que nunca nos damos por vencidos", destacó Cora. "A veces, en octubre, hablamos de mecánica y de cómo te sientes en el plato y todo eso, y otras veces todo tiene que ver con tener la voluntad. De inspirarte a ti mismo a hacer grandes cosas. Y todo comenzó muy simple. Con buenos turnos al bate y luego ese gran batazo, seguimos remontando y nunca nos detuvimos".

Esta es la quinta vez en la historia de los Medias Rojas en la que cuentan con una ventaja de 3-1 en la Serie Mundial. Boston se ha coronado campeón en las cuatro veces anteriores. Es también la quinta vez en la historia de los Dodgers que han tenido una desventaja de 1-3 en una Serie Mundial. En las cuatro veces anteriores, los Dodgers han perdido cada serie en cinco juegos.