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¿Puede América "vivir" sin Peláez?

Yo diría que no, que sería un terrible y costoso error en el presente y el futuro del club. Pero el América depende de los caprichos, las traiciones y los "golpes bajos" que siempre son parte de las grandes empresas. Y los rumores indican que se aproximan los cambios. El regreso de Yon de Luisa abriría la puerta para un eventual regreso de Miguel Herrera. En medio de ellos, se asoma el nombre de Santiago Baños y la posibilidad de que Ricardo La Volpe pase a un puesto gerencial en el área de desarrollo de talentos. El América y su nuevo organigrama, una estructura que se supone tendría que sufrir cualquier cambio menos el de Ricardo Peláez.

LOS ANGELES, CA.- Es difícil adivinar si Ricardo Peláez la está pasando "bien" o "mal" dentro de la extraña actualidad del América. Su semblante es el mismo siempre, lo cual no permite descubrir si alrededor suyo empiezan a tejerse historias tenebrosas que suelen ser una condición casi normal en la vida de las grandes empresas.

Los rumores indican que Peláez sería removido de su puesto junto con José Romano, el actual presidente del club. Los nombres de Yon de Luisa y de Santiago Baños aparecen en el horizonte en un "paquete" que, además, incluiría el regreso de Miguel Herrera como entrenador. Al mismo tiempo, Ricardo La Volpe pasaría de ser entrenador del primer equipo a un gerente de fuerzas básicas y desarrollo de futbolistas. El nuevo organigrama del América no luce mal, pero sigue faltándole al respeto al personaje más importante del América en la última época.

Deportivamente hablando, el América cometería un error desprendiéndose de Peláez. Bien o mal, le ha dado certeza, orden y una imagen ganadora al club. El problema podría radicar en la compleja relación que suele tener Peláez con los entrenadores. Los ejemplos de Antonio Mohamed y de Gustavo Matosas pesan rotundamente en las partes negativas de su currículum.

En Tijuana, mientras tanto, la dirigencia de Xolos, líder general del campeonato, guarda silencio sobre la renovación de Herrera. "No tengo nada que comentar al respecto", me respondió Ignacio Palou, el director deportivo de la entidad fronteriza. La realidad es que Herrera debió extender su contrato desde hace algunas semanas, cuando en el receso de la Fecha FIFA, tuvo una plática con Jorgealberto Hank, el dueño del equipo. Eso no ocurrió. Herrera no ha negado su deseo de volver a Coapa.

Nadie duda del protagonismo que Peláez ha podido darle a este América desde que llegó al puesto de presidente operativo de futbol en el torneo Apertura 2011. Con sus altas y sus bajas, logró imprimirle al América un sello ganador, que incluyo dos campeonatos de Liga y dos más de Concacaf. El principal éxito de Peláez, de inicio, significó el arribo de Miguel Herrera como entrenador, situación que se descompuso -en deterioro del América y del propio Peláez- cuando surgió la urgente necesidad de la Selección Mexicana de futbol.

Los "vientos de cambio" soplan ya desde hace algunos meses sobre la empresa que es dueña del club América. El futbol es una unidad de negocio de la televisora como lo pueden ser las novelas, las series de entretenimiento y hasta los noticiarios, pero es una industria -la de futbol- que involucra pasión y que suele provocar diferencias y recelos. Las grandes empresas atraviesan casi siempre por un sendero caprichoso y voluble. Lo que hoy es una realidad, mañana no lo es tanto. Lo que ahora está seguro, en un abrir y cerrar de ojos, se transforma por completo.

¿Puede el América "vivir" sin Peláez? Yo diría que sí, pero que no debería hacerlo. Perdería algo que difícilmente se lo podría dar otro personaje.

@Faitelson_ESPN