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¡Es un retroceso!

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"Para mí lo de Ochoa es un retroceso" (2:00)

David Faitelson y la mesa de Futbol Picante debaten sobre la llegada del portero mexicano al América. (2:00)

No debe existir otra forma de verlo desde un ángulo meramente futbolístico. Regresar de Europa para jugar en el América es retroceder, es bajar de un nivel mayor del juego. Puedo entender el júbilo y la efervescencia del aficionado americanista, pero lo que ha hecho el América es truncar la carrera europea de uno de los mejores porteros mexicanos de la historia. Para mí, una lástima…

SAN DIEGO, California.- Es un retroceso. No hay otra forma de verlo a partir de un ángulo puramente futbolístico. Volver de Europa para jugar en el América cuando, sobre todo, tienes presente y futuro europeo, significa bajar de nivel de juego.

Y estoy seguro de que Guillermo Ochoa lo sabe. La necesidad y el dinero del América se han interpuesto en el camino de uno de los mejores porteros de la historia del futbol mexicano. El mismo personaje que hace ocho años se marchó de Coapa “a empujones”, entre insinuaciones y gritos abiertos de que cometía un error al dejar al famoso club mexicano para ir a un club inexistente en Europa y en Francia llamado Ajaccio. El mismo Ochoa que hace ocho años nos dejó con la boca abierta a todos buscando un mejor futuro futbolístico y desechando la 'zona de confort' que le proponía ser el portero y la figura del América. Ese mismo Ochoa que picó piedra en Córcega, que calentó la banca en Málaga, que tuvo que tragarse goles y un descenso en Granada y que había encontrado la felicidad o quizá la estabilidad en el Standard belga, el mismo Ochoa, cuyo nombre coqueteó casi siempre con las ligas de Inglaterra, Italia y Alemania, ha claudicado hoy a la aventura del primer portero mexicano que se atrevía a cruzar 'el charco' por una vida futbolística más honrosa y gloriosa. Ochoa ha vuelto. No veo nada que tengamos que festejar.

El América lo ha traído para 'tapar un hueco'. La salida de Marchesín, el dinero que se recaudó por el argentino y por el colombiano Mateus Uribe, ambos vendidos al Porto, ha dejado al América en la boyante posición de pagarle una 'miseria' al equipo de Bélgica y negociar con Ochoa uno de los contratos más altos que jamás se hayan registrado por un futbolista mexicano o extranjero en esta Liga.

La realidad es esa. El júbilo del aficionado americanista está justificado y es totalmente acertado, pero lo de Guillermo Ochoa es retroceder, abandonar el sueño y las ambiciones de un futbol de mayor nivel tentado y finalmente seducido por los dineros que, como lo que es, una figura, puede devengar en casa.

Si el mercado mexicano no pagara esas cifras en su industria futbolística, Guillermo Ochoa no volvería. Seguiría 'tragándose el polvo europeo'. Pero, luego se preguntan por qué nuestro futbol permanece anquilosado y sin dar el paso de calidad.

Yo lo veo como retroceso, pero quizá desde la óptica americanista exista una percepción muy distinta…

@Faitelson_ESPN