<
>

Federer volvió a festejar

Roger Federer cortó una racha de 10 meses sin un título ATP Getty Images

HALLE -- Recuperó la sonrisa. Y le volvió el alma al cuerpo. ¿Para tanto? Sí, porque Roger Federer, el hombre récord del tenis, que sigue batiendo marcas y haciendo historia, cortó una de sus rachas adversas más extensas y festejó en Halle. El suizo, de 31 años, estuvo 10 meses sin ganar un torneo y en el césped alemán se impuso para igualar el tercer mejor registro, de 77 títulos, en poder del estadounidense John McEnroe. Por su nivel y esta renovada alegría, se ilusiona de cara a Wimbledon. Por eso, ESPNtenis.com lo eligió como La Figura de la Semana.

Con este triunfo, Federer igualó la tercera marca de títulos ATP de McEnroe, todavía lejos de los 94 que consiguió el checo-norteamericano Ivan Lendl y de los 109 del estadounidense Jimmy Connors. Así, el helvético amplió su récord de copas ganadas en el certamen de Halle, a seis, para ratificar que sigue siendo el mejor de todos los tiempos sobre césped. De hecho, Federer es el varón con más campeonatos obtenidos en esa veloz superficie, con 13, contando las seis en Halle y siete en Wimbledon.

Además, es el jugador en actividad con más victorias (121) en césped y una efectividad que es récord histórico, con casi el 88% en sus partidos en dicho piso. Está claro que le costó superar en semifinales al local Tommy Haas -se vengó de la derrota en la final de 2012- y luego al ruso Mikhail Youzhny en la final, pero en ambos casos, en los momentos decisivos, sacó a relucir su mentalidad ganadora e hizo la diferencia justa.

Para Federer se trató, también, del primer año, desde que se adjudicó en Milán 2001 su primer torneo oficial, que tardó tantos meses en ganar un título en una temporada. Recién lo hizo a mediados de junio, poniéndole fin a una sequía de 10 meses, desde que en agosto de 2012 se impuso en el Masters 1000 de Cincinnati.

Desde aquella victoria, el suizo había caído en las tres finales siguientes: cedió ante el argentino Juan Martín del Potro en Basilea, contra el serbio Novak Djokovic en la Copa Masters de Londres y este año frente al español Rafael Nadal en Roma. Como se ve, Federer perdió en las definiciones de sus dos últimos certámenes del año pasado y su siguiente final fue en mayo último, en el Abierto de Italia.

Con su éxito en Halle, Federer se ilusiona y contagia a sus fanáticos con la posibilidad de conquistar Wimbledon por octava vez. El año pasado, el suizo igualó los siete títulos en La Catedral del estadounidense Pete Sampras y ahora tratará de ostentar otro récord en soledad. De conseguirlo, estirará su marca tope, que ahora es de 17 coronas en los Grand Slam.

Cuatro veces en su carrera (2003, 2004, 2005 y 2006), el suizo hizo doblete en Halle y Wimbledon y ahora pretende hacerlo por quinta vez. Uno de sus grandes rivales será el escocés Andy Murray, quien lo antecede en el 2º lugar del ranking ATP y al que venció en la final de Londres de 2012.

Hace 10 años, Federer ganó su primer Grand Slam, justamente en La Catedral. Y ahora se lo consultó sobre si hay alguna semejanza con aquella victoria. "Es totalmente diferente a 2003, cuando llegué con mucha presión. En cuanto a la necesidad de probar mi nivel, yo era un legítimo aspirante a un Grand Slam y tenía una presión increíble. Ahora, 10 años más tarde, sé lo que tengo que hacer. Voy a entrar con presión porque estoy defendiendo mi título, pero es un privilegio jugar en Wimbledon y quiero hacerlo muy bien", explicó. El sueño de llegar al 18º "grande" se mantiene intacto.