Ver a los dos Mercedes en el Top 4 de la Práctica 2 del Gran Premio de Miami de Fórmula 1, hace pensar inmediatamente que este puede ser el inicio de una remontada, pero hacer un juicio por el resultado en una pista nueva puede ser engañoso.
George Russell se puso por delante del Ferrari de Charles Leclerc y el Red Bull de Sergio Pérez y tras ellos estuvo el otro Mercedes de Lewis Hamilton algo que luego del dominio alternado de esos equipos fue francamente sorpresivo.
La mejora de Mercedes no es producto de la casualidad. El alerón delantero del W13 llegó totalmente renovado a Miami y además se pudo reducir un poco el peso del monoplaza.
El punto principal fue que la escudería de Brackley logró conducir el flujo de aire de tal manera que el rebote o porpoising que afectaba tanto, fue menor.
Ahora, este es el primer día de prácticas en una pista totalmente nueva, donde el polvo la hace resbalosa; además, la falta de hule por el uso abona a esa circunstancia. Ningún equipo tenía información real de Miami, sólo pruebas en simulador, así que esas circunstancias pudieron igualar notablemente la diferencia entre los equipos.
En realidad, no será ni en la calificación ni en la carrera donde se podrá valorar en términos reales el avance de Mercedes. Tendremos que esperar al siguiente Gran Premio en Barcelona el 22 de mayo, pero lo visto hoy es sin lugar a dudas un avance.
Por otro lado, Red Bull vuelve a mostrar falta de confiabilidad y el tema vuelve a ser una alerta. Ahora fue un sobrecalentamiento por un problema hidráulico, que dejó a Max Verstappen fuera de la Práctica 2.
Es cierto que el calor y la humedad de Miami es algo que no se había vivido en la temporada, pero ya son muchas fallas en tan pocos Grandes Premios.
La buena noticia es que sucedió en la Práctica 2, no en la carrera, pero la mala es que Max Verstappen ha podido rodar muy poco y es una pista nueva. A pesar de que el neerlandés es competente hasta la genialidad, el escaso tiempo en pista puede ser de consecuencias en la calificación y eso repercutir en la carrera.
Afortunadamente para Red Bull, Checo Pérez pudo girar con algunos problemas en las frenadas por el estado resbaloso de la pista y la búsqueda de los límites, pero pudo marcar la tercera mejor vuelta del día. Ante todo, reunió información que puede compartir con el otro lado del pit del equipo, aunque el estilo de manejo del mexicano y del campeón sean muy diferentes.
Punto y aparte es la situación de Carlos Sainz, quien nuevamente chocó el Ferrari. El español está en un momento muy bajo con dos abandonos consecutivos, y además se le ha visto con muchos problemas para mantenerse dentro de casi todas las pistas y sesiones de lo que va de la temporada.
Eso contrasta con Charles Leclerc, quien fue el mejor de la Práctica 1 y el segundo de la Practica 2 en Miami. Tal vez la presión maquina un macabro juego en la cabeza de Sainz, quien definitivamente tiene una mala racha.
El jueves se golpeó la cabeza en una reja del pitwall y dijo que no había sido nada de gravedad, afortunadamente. Sin embargo, tal vez si requiere una sacudida mental para quitarse las telarañas que lo aquejan.
Así, la preocupación se pasea a sus anchas en Ferrari y Red Bull, mientras que en Mercedes la esperanza ha tomado su lugar en el pit y espera ansiosa el sábado para refrendar su ánimo en la calificación. Veremos.