Apenas se desarrollaron 25 minutos de las siete horas pactadas para el primer día de actividad de la quinta fecha, cuando la lluvia obligó a cancelar todo.
Indianápolis amaneció con el cielo teñido de un gris plomizo, que generaba muy malos augurios. No hacía falta espiar ninguna aplicación del tiempo para entender que la lluvia era una amenaza latente en la primera jornada de las 500 Millas de Indianápolis. Y si alguno con exceso de positivismo andaba por ahí, el solo mirar las imágenes de radar le transformaba su ilusión de disfrutar de los autos de IndyCar a casi 400 km/h en una mueca de desagrado. Y se cumplió nomás: apenas habían transcurrido 25 minutos de las siete horas de prácticas de la quinta cita del 2024 cuando comenzaron a caer las primeras gotas. Hasta ese momento, Agustín Canapino apenas había completado siete giros. Ni siquiera había terminado de calentar las muñecas.
El chispeo inicial, que obligó a desplegar las banderas amarillas y que llevó a todos los pilotos de vuelta a boxes, se convirtió en una lluvia más intensa. Pasadas las dos horas de la primera práctica, quedaba una de parón hasta el arranque de la segunda. El radar daba malas noticias. El cielo le daba la razón al radar. No había cruz de sal en el piso que pudiera evitar lo que se venía. Y llegó nomás. Cuando debería haber comenzado la sesión de la tarde, diluvió. La pista se empapó y todo siguió frenado. Para los desprevenidos vale aclarar que en óvalos no se gira con pista mojada. Se esperó un rato. Pasaron 66 minutos del horario de inicio de la tanda e IndyCar anunció oficialmente la cancelación de la jornada.
En los registros, que no tendrán ninguna relevancia y serán recordados, quedó que Scott Dixon se quedó con el mejor tiempo y Canapino fue 20°. El Titán deberá esperar hasta este miércoles para girar con el Titán. No hay errores de tipeo, ni juegos de palabras. Es que así bautizó el argentino al Dallara-Chevrolet del equipo Juncos Hollinger Racing con el que disputará las 500 Millas. La actividad seguirá con pruebas hasta el viernes. Sábado y domingo se desarrollará la clasificación. El primer gran objetivo de Canapino, y de todos los inscriptos, será meterse en el grupo de 33 que disputarán la carrera. Es que hay 34 inscriptos y uno la verá desde la tribuna.