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Nace una nueva leyenda para el Crimson Tide, y su nombre es Tua Tagovailoa

Don Hutson. Bart Starr. Joe Namath. Ken Stabler. Lee Roy Jordan. Ozzie Newsome. John Hannah. Cornelius Bennett. Derrick Thomas. Mark Ingram. Derrick Henry.

La lista de leyendas que hicieron historia para Alabama es larguísima. Hoy hay que sumar un nombre más.

Tua Tagovailoa.

El mariscal de campo de primer año hizo lo inimaginable al conducir a Alabama a su quinto título nacional en nueve años, escribiendo una historia que jamás será olvidada en Tuscaloosa.

Abajo por 13-0 al medio tiempo ante unos Georgia Bulldogs que se encontraban en control absoluto de la cuarta edición del Juego de Campeonato Nacional del College Football, el entrenador en jefe del Crimson Tide, Nick Saban, se vio obligado a hacer un cambio que no muchos se hubieran atrevido a hacer: Saban retiró a su quarterback titular, Jalen Hurts --quien en dos años al frente de la ofensiva recopiló una marca nada despreciable de 25-2-- para ingresar a Tagovailoa, un suplente que sólo había recibido minutos de juego en partidos ya decididos a lo largo de su primera campaña colegial.

Sin embargo, los reflectores del lujoso Mercedes-Benz Stadium de Atlanta le tenían reservado algo mejor.

Después de una serie de tres y fuera, Tagovailoa empezó a cambiarle la cara al ataque del Tide. El joven pasador completó 4 de 5 pases para 44 yardas antes de encontrar a Henry Ruggs III en pase de 6 yardas para quitar el cero de Alabama en el marcador.

Con ese touchdown, Alabama despertó y un partido que había sido mayormente gris a lo largo dela primera mitad empezó a adquirir color.

Jake Fromm, el otro quarterback freshman del encuentro, conectó un pase de touchdown de 80 yardas con Mecole Hardman --su segunda anotación del juego-- que volvió a estirar la ventaja para los Bulldogs y que, ante casi cualquier otro quarterback en esa situación, podría haber sellado el campeonato.

¿Y en la serie subsecuente de Alabama? Tagovailoa se dificultó todavía más el panorama lanzando una intercepción que le rompería el espíritu a cualquiera.

No al hawaiano.

Alabama respondió interceptando por segunda ocasión a Fromm en el encuentro --esta vez cortesía del liniero defensivo Raekwon Davis en un pase desviado en la línea de golpeo--, y a partir de allí, el partido se volcó decididamente en favor del Tide.

Tagovailoa armó series de 15 y 71 yardas entre el cambio de periodo entre el tercero y cuarto para acercar a Alabama a 20-13, aunque lo mejor estaba por venir.

Con ayuda de una defensiva que frenó a Georgia en tres y fueras en sus dos series finales del partido, Tagovailoa volvió a hacer caminar al Tide, culminando su penúltima serie del partido con un excepcional pase al estelar Calvin Ridley lanzado bajo intensa presión y a contrapié para empatar el juego a 20 puntos.

Lo mejor estaba todavía por venir.

Alabama recuperó el ovoide con poco menos de 3:00 en el tiempo regular para intentar el gol del triunfo, un yerro de Andy Pappanastos desde 36 yardas que mandaba el partido a la prórroga pero que, ya con el panorama completo del cuadro, sólo serviría a la postre para engrandecer lo que venía de Tagovailoa.

Georgia recibió la primera posesión del tiempo extra, y luego de una pérdida de 13 yardas en tercera y 6 desde la 21 de Alabama, Rodrigo Blankenship conectó gol de campo de 51 yardas que hizo levantar el rostro momentáneamente a los Bulldogs.

Entonces, llegó el momento de Tagovailoa.

Como sucedió con Fromm instantes antes, Tagovailoa fue incapaz de deshacerse del ovoide bajo presión, cediendo una captura que se tradujo en una pérdida de 16 yardas en primera oportunidad.

Nuevamente, se trató de un momento que hubiera acabado con casi cualquier otro mariscal de campo, y más tratándose de un freshman.

En segunda oportunidad y 26 por avanzar desde la yarda 41, Tagovailoa encontró descubierto al también freshman, DeVonta Smith, para un inverosímil touchdown de la victoria que deja el nombre del joven quarterback a la altura de los más grandes en la historia del Tide.

Y como la vida posee un irónico toque de humor, está el siguiente dato: Alabama ofreció beca a Tagovailoa sólo después de perder a Fromm, quien originalmente había accedido a enrolarse con el Tide antes de cambiar su decisión y seguir a Kirby Smart --ex coordinador defensivo de 'Bama-- para dirigirse a Georgia.

Pero no todos los círculos se cierran y Smart no consiguió superar a su mentor, Saban, quien no solamente se mantiene con marca perfecta --ahora de 12-0-- ante sus ex asistentes, sino que ya suma seis títulos nacionales con el de esta temporada, contando uno primero conquistado con LSU en el 2003.

Los cinco títulos de Saban al frente del Tide son superados solamente por los seis que ganó el mítico Bear Bryant entre 1961 y 1979.

Pero esta noche no se trató de las leyendas consagradas en el carmesí, sino de la consagración de una nueva.