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En el Super Bowl LVII, habrá un duelo de cazamariscales de elite

ARIZONA -- El Gurú de las Diagonales ya está en Glendale, Arizona, sede del Super Bowl LVII, finiquitando pronósticos rumbo al Gran Juego.

A continuación, desde muy cerca del State Farm Stadium donde no tendrán lugar de errar los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles, el Gurú desglosa los talentos de quienes serán los principales responsables de hacerle la vida una pesadilla a los mariscales de campo Patrick Mahomes y Jalen Hurts este domingo: dos cazamariscales de elite.

LOS EAGLES CUENTAN CON UN CAZAMARISCAL DE LUJO: HAASON REDDICK

El camino de Haason Reddick ha sido todo menos lineal en la NFL.

Precisamente fue en la ciudad en la que hoy se encuentra que Reddick comenzó su camino tras ser elegido en la posición número 13 de la primera ronda del 2017 por los Arizona Cardinals.

Sin embargo, le costó la adaptación a la NFL, y apenas registró 7.5 capturas en sus primeras tres temporadas.

Como se podrán imaginar, sobraron las etiquetas de “sobrevalorado” otorgadas a Reddick.

“La verdad es que me costó en el inicio de mi carrera”, admitió Reddick. “Pero cuando llegué a Carolina me empecé a sentir más cómodo, y sabía que sólo mejoraría desde ese momento”.

Los Cardinals no hicieron uso de la opción de quinto año, y los Carolina Panthers firmaron a Reddick por un año. Y pese a que totalizó 11 capturas para Carolina, decidieron que no sería parte de sus planes futuros.

Y casi como para cerrar el círculo, los Eagles decidieron darle un contrato de tres temporadas y 45 millones de dólares. Repentinamente, todo había regresado donde había comenzado para Reddick, que ahora estaba a unas pocas cuadras de donde jugó en la Universidad en Temple.

Más allá de los aires familiares, creo que ni Reddick pensó que tendría la campaña que tuvo.

Arrasó con la marca más alta de su carrera, y registró 16 capturas. Como equipo, Philadelphia tiene 78 capturas, y está a cuatro del récord histórico de la Era del Super Bowl, si incluimos los playoffs.

Es por eso que Reddick prefiere darle crédito a sus compañeros.

“Simplemente soy un afortunado de estar rodeado de tanto talento”, dijo Reddick. “Los rivales no nos pueden doblar a todos”.

Quizás sea producto de esa humildad, que Reddick sigue siendo subestimado como cazamariscal.

Pero en estos playoffs, quedó una vez más confirmado que su influencia es determinante; fue Reddick el que golpeó el brazo del mariscal Brock Purdy, forzó el balón suelto, y a la postre inadvertidamente provocó la lesión del mariscal de los San Francisco 49ers.

A partir de ese momento, se allanó el camino de los Eagles, que hoy están nuevamente en un Super Bowl, cinco años después de haber ganado su primer anillo como franquicia.

“Esto es muy gratificante”, declaró Reddick en referencia a su presencia en el Super Bowl. “Este año me mostró que todo el trabajo que hice en mi vida tenía sentido. Me mostró que estoy haciendo lo que siempre tenía que hacer. Si alguien sigue dudando de mí, sólo me servirá como gasolina”.

OTRO CAZAMARISCAL DE ELITE EN LA VEREDA DE ENFRENTE: CHRIS JONES

Los Kansas City Chiefs también tienen a un terror para los mariscales rivales, y a un jugador que puede alterar el curso de un partido en un abrir y cerrar de ojos.

Chris Jones es, sin importar las posiciones, uno de los mejores jugadores de la NFL.

Si hablamos específicamente de tackles defensivos, Aaron Donald parecía estar en un planeta aparte. En ese planeta, sin embargo, ahora también vive Jones, quien fue uno de los tres finalistas para ganar el premio al Jugador Defensivo del Año, el cual le fue otorgado a Nick Bosa de los San Francisco 49ers el jueves.

No es para menos, considerando que Jones es el alma de la defensiva de los Chiefs. Terminó la temporada con 15.5 capturas y 42 presiones sobre el mariscal rival, ambas marcas las mejores entre todos los tackles defensivos de la NFL.

Sin embargo, Chris Jones forma en distintos lugares en la línea defensiva, y ha mostrado toda su versatilidad.

“Voy a hablar con la liga para que no me encasillen en una posición”, expresó Jones, sabiendo que los alas defensivas cobran más que los tackles defensivos. “No importa dónde estoy formado, siempre pienso que puedo ganarle al hombre que tengo enfrente”.

La línea ofensiva de los Eagles, posiblemente la mejor de la NFL, representará un reto formidable, pero en la previa al Super Bowl LVII, el respeto es mutuo.

“Chris Jones es el mejor tackle defensivo de la NFL”, enfatizó el centro de los Eagles, Jason Kelce. “Es rápido, es fuerte y es largo. No tiene fisuras en su juego”.

Estoy de acuerdo en que no tiene muchos huecos en su juego. De hecho, Jones es subestimado a la hora de detener el ataque terrestre, y tuvo una campaña formidable pese a ser doblado en el 70 por ciento de las jugadas este año.

Jones tiene 65 capturas en 107 partidos, una cifra magnífica para un tackle defensivo. Sin embargo, hasta él enfrentó críticas en el inicio de esta postemporada, dado que hasta un par de semanas atrás, no tenía ninguna captura en playoffs en su carrera.

Acto seguido, dominó ante los Cincinnati Bengals, registró dos capturas, tuvo cinco golpes sobre el mariscal y tres tacleadas para pérdida para poner a dormir las ridículas críticas.

“Siempre va a haber gente criticándote”, explicó Jones. “Hay que alejarse del ruido y recordar que nuestra defensiva fue crucial para que lleguemos a este Super Bowl”.

Jones estaba algo engripado aquí en Arizona, pero dice que va a estar bien para el domingo.

Y cuando él está bien, es difícil detenerlo.

Con Reddick y Jones en cancha, ninguno de los dos mariscales dormirá muy tranquilo este sábado.