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Las finales de Diego Simeone

BUENOS AIRES -- “Cada minuto de una final es la vida, muchos pagarían para jugar una”, dijo hace poco Diego Pablo Simeone, el entrenador que buscará alcanzar la gloria con el Atlético de Madrid.

Sin dudas, el Cholo adhiere plenamente a esa premisa que dice que “las finales no se juegan bien, se ganan”. Y de ganar finales sabe mucho el hombre surgido de Vélez Sársfield, que comenzó su carrera como entrenador dirigiendo a Racing Club de Avellaneda.

Hincha de la Academia , se hizo cargo del equipo en febrero de 2006, cuando todavía era jugador. Pero el mal presente del equipo y la renuncia de Fernando Quiroz le abrieron una chance que esperaba: decidió adelantar su retiro, previsto para mitad de ese año, y enseguida se calzó el buzo.

Pese a que no hizo una mala campaña, la dirigencia decidió no renovarle el vínculo. La gran chance como DT llegaría ese mismo año, en Estudiantes. Boca, el gran candidato, llegaba líder y con cuatro puntos de ventaja sobre seis en juego.

Parecía imposible que el Pincha lo alcanzará, pero Estudiantes ya empezaba a mostrar esa característica que tienen los equipos de Simeone, la de no rendirse nunca: ganó los dos partidos que le quedaban, aprovechó el bajó del conjunto de Ricardo La Volpe y alcanzó a los Xeneizes en el primer puesto.

La final, en cancha de Vélez, fue triunfo por 2 a 1 para los de La Plata. Así , apenas en su primer año como DT, logró la primera conquista. Repitió dos años más tarde con River, tras consagrarse en el Torneo Clausura 2008, aunque en esta caso de manera más relajada: no fue necesario un desempate.

Luego de otros desafíos, y tras el segundo paso sin pena ni gloria por Racing fue cuando llegó la gran chance: Atlético de Madrid. Con los Colchoneros, podría decirse, se recibió de gran entrenador.

En poco tiempo mostró sus credenciales al consagrarse campeón de la UEFA Europa League (el 9 de mayo de 2012 venció en la final al Athletic Bilbao de Marcelo Bielsa por 3-0), de la Supercopa de Europa (el 31 de agosto del mismo año, tras derrotar al Chelsea por 4-1) y de la Copa del Rey (el 17 de mayo de 2013, al ganarle nada menos que 2-1 al Real Madrid).

Idolo como futbolista y más aún como DT, el Cholo fue por más. En 2014 se quedó con la Liga española luego de 14 años, pero se dio el gusto de ganar otra final: la Supercopa de España, donde nuevamente venció a los Merengues.

La gran decepción fue la caída en la final de la Champions League de 2014, cuando estuvo a minutos de vencer al Real Madrid: pero el gol de Sergio Ramos sobre la hora llevó el partido al alargue, y finalmente el conjunto Carlo Ancelotti terminó celebrando.

No es el único argentino dentro del plantel que sabe lo que es ganar una final. Angel Correa se dio el gusto grande de celebrar con San Lorenzo, en 2014, la primera Copa Libertadores de la historia del club; un año más tarde, fue la gran figura del Sudamericano Sub 20, que consagró a la Argentina. Matías Kranevitter, por su parte, formó parte del River multicampeón de Marcelo Gallardo, ganando la Copa Sudamericana, la Copa Libertadores, la Suruga y la Recopa.

El Cholo cuenta con ellos para seguir haciendo historia.