BARCELONA -- Lastrado por el empate que cedió en Glasgow frente al Celtic, el Manchester City visita este miércoles el Camp Nou con el temor de una derrota que le apartase casi definitivamente del primer puesto de grupo pensando en los Octavos de Final. El regreso de Guardiola, la cuestión sentimental, quedará en un segundo plano de la escena ante la expectativa que despierta un partido entre dos de los grandes favoritos y que llegará marcado por la forma en que tanto el entrenador catalán como Luis Enrique piensen plantearlo.
“Siempre analizamos al rival. Con el City ya advertimos de la dificultad por todo, por jugadores individuales como por colectivo, por los cambios que se apreian en la mano de su entrenador” avisó en rueda de prensa Luis Enrique.
“Somos dos equipos con ideas parecidas. La comodidad no está en esperar al contrario sino jugar de nuestra manera, en ataque” convino Piqué arriesgándose a pronosticar qué clase de partido puede esperarse.
Con la MSN en el plano por un lado y la recuperación absoluta de De Bruyne por la otra, Barcelona y Manchester City pondrán en la escena a sus dos onces de gala, contemplándose solo la duda entre Mascherano y Umtiti como compañero de Piqué en el centro de la defensa azulgrana, donde Sergi Roberto y Jordi Alba recuperarán su posición indiscutible.
“Al final no es un partido entre entrenadores. Serán los jugadores los que decidan el partido” advirtió el entrenador del Barcelona, quien apuntó que el City “ha cambiado a bastantes jugadores. Pero lo que está claro es que Pep tiene una incidencia bestial en su equipo. Y eso lo hemos visto desde la pretemporada”.
Una victoria azulgrana dispararía al equipo de Luis Enrique a cinco puntos de los Sky Blues con nueve por jugarse y la tranquilidad de encarar el choque en el Etihad con un colchón suficiente como para repartir esfuerzos con la Liga. Y es a partir de ello que se contempla un Barcelona dispuesto a mostrar su mejor versión.
Esa es una situación que tampoco escapó a Luis Enrique, afirmando por ello que el choque “es importante” pero destacando que “no es decisivo porque también tenemos que ir nosotros a su campo y a Glasgow”. Entre jugadores decisivos, definitivos y trascendentales, la recuperación de Messi se aventura vital alrededor del Barcelona.
“Leo es el mejor jugador del mundo y de la historia… Pero no es solo él. Nos aporta muchísimo pero el equipo debe rendir porque es imposible ganar solo” sostuvo en ese aspecto Piqué, a lo que se sumó el entrenador azulgrana considerando la figura del futbolista argentino. Ganar a través de la posesión, con las diferencias de cada uno, por filosofía y por jugadores, se entiende indiscutible.
“Nos gusta jugar al ataque” refirió Luis Enrique, consistente en la idea básica de dos equipos con un fondo común aunque con forma algo distinta. Posesiones largas, presión, “imaginación y alegría” en palabras del entrenador asturiano, pueden marcar la suerte del encuentro, por más que el entrenador azulgrana pusiera en el plano la importancia personal de las estrellas.
A fin de cuentas, tal y como aclaró Luis Enrique, “el partido lo ganarán los futbolistas, no los entrenadores”.