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Buffon se despediría de la Champions sin remordimientos

El capitán de la Juventus, Gianluigi Buffon, quedó eliminado en los cuartos de final de la Champions League ante el Real Madrid, lo que podría suponer el último partido de su carrera en la única competición para clubes que falta en su palmarés.

Buffon, de 40 años, aseguró en la rueda de prensa del martes que todavía no había decidido qué hará al final de esta temporada, pero subrayó que si su experiencia en la UEFA Champions League debe acabarse, firmaría hacerlo en un estadio como el Santiago Bernabéu.

El capitán de la Juventus de Turín se siente orgulloso por lo que ha logrado en su trayectoria futbolística y destacó que su relación con el público del coliseo blanco ha sido siempre muy positiva, tanto cuando lo visitó con la Juventus como con la selección italiana.

Pese a que la Copa de Europa se le haya resistido en su larga carrera, Buffon se despedirá de esta competición sin remordimientos, consciente de que el compromiso y la dedicación en la persecución de este trofeo nunca ha faltado.

El capitán está viviendo un año de intensas emociones, en positivo y en negativo, y quiere tomarse un tiempo antes de anunciar si seguirá jugando un año más o si colgará definitivamente las botas al final de este año. La trayectoria europea de "Gigi", como es apodado en Italia, empezó de la mejor forma, ya que conquistó la Copa UEFA con el Parma en 1998/1999, cuando apenas tenía 21 años.

Sin embargo, su experiencia en la Champions fue mucho más complicada e intensa, marcada por grandes alegrías y también por profundas decepciones. Llegó a acariciar la "Orejona" tres veces, al jugar las finales de 2003, 2015 y 2017, pero en las tres ocasiones vio como su sueño de levantarla desvanecía, contra el Milan, el Barcelona y el Real Madrid, precisamente su verdugo de este miércoles en el Bernabéu.

El momento en el que más cerca estuvo de esa Copa fue en 2003 contra el Milan, cuando la Juventus terminó derrotado en la tanda de penales tras el 0-0 de los 120 minutos. Tuvo que esperar doce años para volver a escuchar la música de la Liga de Campeones en una final: fue en 2015, en el Olympiastadion de Berlín contra el Barcelona, un partido que se disputó en el mismo campo en el que, en 2006, conquistó el Mundial con la selección italiana.

Sin embargo, el Barcelona del técnico español Luis Enrique Martínez le negó la corona europea al doblegar la Juventus por 3-1. Lo mismo que le pasó el año pasado en el Millennium Stadium Cardiff, cuando su Juventus se rindió 4-1 contra el Real Madrid del técnico francés Zinedine Zidane.

Sin embargo, Buffon siempre ha negado que la Copa de Europa sea una obsesión para él y puntualizó que simplemente se trata de un sueño bonito, que no constituirá una mancha en su carrera si termina resistiéndole definitivamente. Y es que su carrera está igualmente marcada por el éxito, al detener en su palmarés ocho ligas italianas, cuatro Copas Italia y seis Supercopas nacionales, además de los ya mencionados triunfos en la Copa UEFA 1999 y en el Mundial de Alemania 2006.

Además, Buffon es uno de los jugadores más amados por sus aficionados y más respetados por sus rivales, que le reconocen unas calidades únicas a nivel de liderazgo, lealtad, habilidad futbolística y longevidad.

De ser efectivamente este su último partido en la Champions, se despedirá de la competición con un total de 125 duelos disputados, en los que mantuvo su portería a cero en el 49 por ciento de ellos. Más allá de lo que decida hacer en su futuro y de la eliminación sufrida este miércoles, Buffon conservará en su memoria el duelo del Bernabéu, otra vitrina de elite para un futbolista que ya tiene reservado su sitio entre las leyendas más grandes de la historia del fútbol.