<
>

Homenaje simultáneo en Arena Condá de Brasil por Chapecoense

Getty Images

Por segunda noche consecutiva la Arena Condá se llenó de luces para despedir a los futbolistas que fallecieron la madrugada del 28 de noviembre en un accidente aéreo; se dirigían a Medellín.

Las tribunas del Estadio de Chapecó fueron ocupadas casi en su totalidad y con la caída del sol se encendieron miles de lámparas de forma simultánea, así se dijo adiós al equipo que estaba por disputar la Final de la Copa Sudamericana.

En el graderío aparecieron pancartas con mensajes variados, pero todas alrededor del 'Força Chape', frase que se repite para honrar a las víctimas del Verdao tanto ahí como en Colombia.

Condá brilló como pocas noches, se iluminó mientras las banderas ondeaban, con los cánticos al ritmo de los tambores; al centro de la cancha, los pocos jugadores que no viajaron hacia Colombia se abrazaron hasta romper en llanto vistiendo la camiseta que les hermana como nunca.

En Medellín también se sumaron a las condolencias por los brasileños; un homenaje póstumo reemplazó al partido que habría de jugarse sobre el mismo estadio: el Atanasio Girardot, pintado de blanco e inundado por lágrimas.

"El futbol no tiene fronteras, fuerza familias, hinchada y pueblo chapecoense", se podía leer en una de las cabeceras del inmueble, con el luto desbordante hasta las principales avenidas de la ciudad.