MADRID -- La necesidad ayudó a Zinedine Zidane a diseñar un equipo basado en las fortalezas de sus jugadores y no en su jerarquía. Real Madrid una victoria por demás ansiada (y complicada) ante uno de los rivales más duros de la Liga, algo que ayudará a generar confianza en la figura del entrenador y que además sacó brillo a su máxima estrella, Cristiano Ronaldo, que ya fuera de manera fortuita o no, ha vuelto a encabezar la pelea en el apartado que más le gusta, el del goleador.
Un triplete, el segundo que marca esta campaña, para dar victoria por 0-3 a su equipo y agregar una marca más a su colección, la del máximo goleador merengue en los derbis madrileños con 18 tantos rompiendo, además, una sequía de seis partidos ante el Atlético de Madrid sin poder marcar. Con los tres de esta noche llegó a diez tantos en la campaña colocándose (por fin) como máximo goleador del equipo merengue. Y para quitarse un peso aún mayor de encima, se metió de lleno en la batalla por el Pichichi al igualar con ocho tantos a los líderes…
Resultó que Cristiano Ronaldo funciona mejor cuanto más sólo puede trabajar.
Las ausencias de Kroos, Casemiro y Morata, aunadas a los problemas físicos de Karim Benzema y Sergio Ramos, recién recuperados de sus respectivas lesiones, dejaron al técnico con pocas opciones tácticas para medirse al Atlético de Madrid, el primer rival directo en la lucha por el título al que se enfrentaba esta campaña y en un estadio, el Vicente Calderón, donde no había podido ganar en las últimas seis visitas.
Pese a que el Madrid marcha invicto y leva cuatro semanas como líder de la Liga, el pobre juego desplegado en los últimos dos meses, desde que perdiera a Casemiro por lesión, y el hecho de que el francés se pidiera intensidad a sus jugadores públicamente una semana tras otra, habían sumido al cuadro merengue en un mar de dudas.
Real Madrid daba la sensación de ser un equipo que navega con la corriente y que resuelve problemas sobre la marcha. Hasta hoy.
Zidane apostó por lo seguro. Escogió a los hombres que se encontraban en el mejor momento físico y los utilizó de un modo en que pudo explotar sus virtudes al máximo.
Isco se encargó de la creación "en su posición natural" detrás del hombre en punta mientras ocupó el centro de la cancha lo mejor que pudo con los croatas Modric y Kovacic, y las dos flechas de las bandas, Bale y Vázquez. Todos en el entendido de que debían alimentar de balones a Ronaldo, que sólo tenía que esperar el balón.
Fue el partido más efectivo del portugués en toda la temporada, independientemente de las circunstancias que permitieron que marcara en tres ocasiones - un tiro libre desviado en un defensa, un penal y un remate a una jugada en que sólo tuvo que empujar el balón pues Bale había hecho todo lo demás.
Si bien tuvo el balón mucho menos tiempo del acostumbrado (sólo registró 34 toques), fue más determinante tanto en el juego como en el marcador. El 100% de sus remates (5 en total) fueron a puerta y tuvo una efectividad del 60%.
Y sin embargo, el Cristiano Ronaldo centro-delantero como medida de emergencia o el Isco que hace que el juego merengue fluya podría quedarse sólo en eso, un recurso para cuando apremie la necesidad. Volverán Kroos y Casemiro. Benzema recuperará su forma física para completar la BBC. Y con ello, la normalidad.
"Definitivamente no (será lo habitual ver a Cristiano en punta). Hoy lo hicimos así y veremos. Se ha encontrado cómodo, pero luego veremos para otro partido", anunció el técnico.