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Alta tensión en Sevilla por el regreso de Sergio Ramos

Ramos es blanco de insultos cada vez que juega en el Sánchez Pizjuán. AP

MADRID -- La polémica en torno a los gestos de Sergio Ramos dedicados a un sector de la grada del Sánchez Pizjuán en el encuentro disputado el pasado jueves no ha hecho más que agravarse a 24 horas de que Real Madrid y Sevilla se enfrenten por segunda ocasión en menos de una semana en un partido clave en la lucha por el título de Liga.

Con los ánimos bastante caldeados, ambos clubes han pedido “respeto” y “tolerancia” para los jugadores (Ramos incluido) a los aficionados que acudirán al estadio este domingo en un intento de prevenir que el encuentro - que ya había sido declarado de alto riesgo y contará con un fuerte dispositivo policial – salga de control.

Y hasta ahí el “llamamiento” a la cordura simultáneo, que no conjunto, pues su visión en cuanto a las acciones de Sergio Ramos es muy diferente: Madrid exige a los aficionados que respeten a una “leyenda del futbol mundial”, según palabras del director de relaciones institucionales del club, Emilio Butragueño, mientras el club hispalense lo responsabiliza veladamente de la actitud hostil de grupo de aficionados radicales del Sánchez Pizjuán en este partido en particular.

“Ramos es antes de todo nuestro capitán. Es un ejemplo para todos, no sólo para nuestro vestuario. Es el jugador más emblemático de España”, recordó el entrenador en rueda de prensa tras el entrenamiento del Real Madrid, el último antes de visitar a Sevilla por segunda ocasión en menos de una semana.

“Lo que quiero ahora, porque eso está en el pasado. El Sevilla ha pedido lo mismo; máximo respeto a los jugadores y lo que la gente quiere ver, sólo futbol. El asunto está acabado y yo creo que Sevilla piensa igual”, agregó.

Pero no fue “respeto a los jugadores” lo único que pidió el club presidido por José Castro, que en un comunicado de prensa hecho público el pasado viernes pidió formalmente a la LFP que “denuncie ante el Comité de Competición de la RFEF y la Comisión Antiviolencia los gestos realizados por Sergio Ramos en la celebración del gol” al considerad que “pudieran ser constitutivos del Código Disciplinario”.

En el mismo comunicado, el Sevilla hizo un llamado a su afición pidiendo “respeto” a los jugadores y reiteraba su compromiso de erradicar la violencia de los estadios, si bien quedó relegado a un segundo plano luego de que tomara una postura poco común entre los clubes.

Cabe destacar que la afición del Sevilla ha sido constantemente denunciada por la Liga ante la Comisión Antiviolencia debido a los insultos en las gradas y que no hace ni una semana que dicha Comisión impuso una multa de 60,000 dólares y un veto de cinco años sin acceso a los estadios a un grupo de 14 aficionados sevillistas por agredir “de manera organizada” a un grupo de seguidores de la Juventus de Turín el pasado mes de noviembre.

De ahí que Zidane muestre poca –o nula– fe en que la intentona de las directivas surta efecto. Y, desde luego, no va a prescindir de uno de sus jugadores más importantes para un partido clave por razones extradeportivas.

“Sergio va a estar (ante Sevilla). Lo que diría a él y los demás es que siempre tienen que seguir jugando. Lamentablemente pasará a alguien. Si tienes, 50 o 100 mil personas en un campo a alguno no lo vas a cambiar. Ni haciendo campañas diciéndoles que hay cosas que están mal los cambias; al contrario, algunos están ahí para eso. Pero tienen que seguir jugando aunque molestan mucho estas cosas”, dijo el entrenador.

Por su parte, Real Madrid hizo público un comunicado en que expresó su apoyo “total y absoluto” al también capitán de la selección española de futbol , recordando que “ha teniendo un comportamiento ejemplar durante toda su carrera deportiva”, al tiempo que pidió “tolerancia cero contra los violentos” y dijo “sumarse al Sevilla” en su llamamiento “para que los aficionados que acudan al partido de mañana lo hagan para disfrutar deportivamente desde el respeto y la tolerancia”.

Para Zidane, es un tema bastante incómodo en el que preferiría no pronunciarse públicamente.

“El comunicado que hicieron en Sevilla es igual que el nuestro. Máximo espeto a todos los jugadores no sólo a Sergio. No sé. Quiero que nosotros sólo pensemos en futbol. Yo te voy a contar cosas del Sevilla y va a ser más decir tonterías que otra cosa. Lo que queremos nosotros y los jugadores es un partido de futbol y nada más”, dijo Zidane.