MADRID -- Una semana después, la polémica en torno al penal con que el Real Madrid consiguió la clasificación a las semifinales de la Champions League sigue enturbiando el ambiente en la capital española.
Después de que Zinedine Zidane se dijera “indignado” ante las acusaciones de haber “robado” a la Juventus, gran parte del plantel – y miembros de la directiva como Emilio Butragueño – han secundado al técnico mostrando su enfado públicamente.
Y al igual que el entrenador, los jugadores han apuntado al “antimadridismo” como el factor que ha magnificado la polémica. Desde Isco, que a través de las redes sociales ha recriminado las críticas a un sector de la prensa española, hasta Lucas Vázquez, que tras el encuentro ante Málaga del domingo pasado, afirmó que “hay otros años en que (estas acciones) no crean tanto revuelo” y lo atribuye a que “fastidia bastante ver al Madrid ocho años seguidos en semifinales”.
Ante la creciente polémica, Zidane ha querido suavizar sus palabras en un intento por dar carpetazo al asunto. Hoy dice que hay más simpatizantes del Real Madrid que los que no lo son.
“Yo pienso que por el tema del ‘antimadridista’ siempre ha existido. Yo creo que es al revés; hay más madridistas cada día. Es el mejor club. Mejor hablar de positivo”, dijo el técnico, quien sin embargo, mantuvo su postura ante las acusaciones “injustas” a su equipo.
“No estoy para hablar todos los días para defendernos o callarnos. Yo no estoy para criticar. Cada uno puede opinar, hay debates y la vida es así; cuando es injusto, cuando es una cosa que es algo que nos falta al respeto ahí sí tengo que decir las cosas con naturalidad y ya”, sostuvo el francés.
Y es que la polémica se ha salido de proporción. Las agresiones al árbitro Michel Oliver y su esposa han subido de tono en las redes sociales al tal punto que la UEFA ha tenido que posicionarse anunciando a través de comunicado que “tomará medidas contra aquellas personas que se han comportado de manera inapropiada tanto dentro como fuera de las redes sociales”.
Zidane ha opinado que “con las redes sociales, es diferente. Hace 10 o 15 años no pasaba y hoy es diferente”.
“Es la realidad en la que vivimos. Es lo que hay y tenemos que convivir con eso. Lo que me interesa es que hay más madridistas en el mundo y es lo importante para el club”, insistió.
Zidane sabe que el Real Madrid necesita poner fin a la polémica antes de acudir a Munich, y frenar la psicosis en la prensa española a que la presión pueda influir en la actuación del silbante en la ronda de semifinales de Champions League.
Zidane ha mostrado, de nuevo, fe en que “el árbitro hará su trabajo y nosotros el nuestro”.
“Nosotros vamos a hacer nuestro trabajo y el árbitro el suyo. Hablar de esto es... No voy a comentar”, insistió.