El entrenador del Celta, el argentino Antonio Mohamed, comentó después de que este domingo empatara a tres en el campo del Betis que se va "con el sabor amargo" de no haberse llevado la victoria.
Mohamed, en la sala de prensa del estadio Benito Villamarín, lamentó la falta "de puntería" de su equipo para no haber sumado los tres puntos, pero añadió que "en líneas generales fue un buen partido con dos equipos de iguala a igual".
"Nosotros salimos a hacer nuestro partido, a presionar arriba. Sabíamos que nos podían crear opciones de gol pero en el segundo tiempo nos salió como queríamos, aunque lamentablemente no ganamos pero sabíamos que un partido abierto nos podía convenir", argumentó.
El técnico argentino, sobre su expulsión, explicó que se quejó porque "escondían el balón (los recogepelotas) con el 2-0 y después, con el 2-2, aparecieron todos y eso no es juego limpio", pero precisó que en ningún momento faltó "el respeto a nadie".
"No me parece serio que la mejor Liga del mundo permita que se escondan los balones. Me quejé por eso, no es juego limpio esconder los balones cuando ganas 2-0. Cuando hicimos el 2-2 le dije 'ahora sí escondan los balones de verdad'. Y el árbitro decidió expulsarme", explicó el estratega.