El arquero estadounidense Kasey Keller atajó dos de los penales.

Ni en el partido ni en el alargue pudo Estados Unidos vulnerar a una entusiasta Canadá, cuya táctica fue defenderse, en el estadio Rose Bowl de esta ciudad en las afueras de Los Angeles.

El estadounidense Brian McBride y el canadiense Kevin McKenna, que encabezan la tabla de artilleros con cuatro y tres goles, respectivamente, se hicieron notar muy poco. Al menos no estuvieron en el gol, que es su fuerte.

McKenna incluso marró un penal en la tanda decisiva, cuando McBride metió el suyo.

La jugada más dramática del partido y quizás de todo el campeonato se produjo a los 55 minutos cuando el arco de Canadá se salvó cuatro veces seguidas, en la misma jugada.

Primero la pelota pegó en el palo tras tiro de Josh Wolff, el rebote lo tomó Brian McBride y tapó el arquero Lars Hirschefeld. En la sucesión de rebotes nuevamente salvó el golero hasta que le pelota le fue a McBride y su tiro fue desviado sobre la linea por un defensor.

Estados Unidos mantuvo su presión, pero sus intentos chocaron una y otra vez con Hirschefeld, convertido por entonces en figura.

En el alargue, Brian West le quemó las manos a Hirschefeldn en otra de sus magistrales tapadas.

FICHA

FORMACIONES:
EEUU: Kasey Keller, Frankie Hedjuk, Eddie Lewis (DaMarcus Beasley-64), Jeff Agoos, Chris Armas, Cobi Jones (Brian West-110), Carlos Bocanegra, Pablo Maestroni, Josh Wolff (Clint Mathis-75) , Landon Donovan y Brian McBride.