Enrique Sánchez Flores llegó esta temporada al banquillo del Watford de Ingleterra, el equipo ideal para trabajar como entrenador en la demandante Liga Premier.
Con experiencia en España, Portugal y Emiratos Árabes, el director técnico español es categórico al señalar que no hay nada como la Premier.
“Es otro mundo”, dijo Quique Sánchez Flores en entrevista con ESPN. “Si las cosas van bien, tiene que haber un ambiente de normalidad a tu alrededor, el ir a un partido debe ser más un ambiente de fiesta que de drama porque finalmente es un deporte, pero es un deporte que genera ilusión. Al final, es un deporte que debe estar organizado y eso aquí en Inglaterra funciona y respeto”.
Luego de 30 partidos disputados, Watford se ubica en la posición 14 con 10 triunfos en su regreso a la Liga Premier. Para el entrenador español de 51 años, este equipo representa el proyecto “ideal”.
“He encontrado buen contexto, creo que todo mundo vamos buscando dónde podemos encajar bien y ser felices y que todo te acompañe. Y es un poco lo que está pasando con Watford. Me explicaron bien la idea, me explicaron bien el proyecto. Es una liga fantástica, en la que tenía muchas ganas de entrenar y eso fue fundamental.
“Es el club ideal porque me da la serenidad, la tranquilidad y el espacio para hacer crecer a un equipo y consolidarlo. Creo que como un entrenador en una liga tan importante y el mejor espacio posible”, destacó Sánchez Flores.
Con una temporada poco usual en la Liga Premier, con los equipos grandes lejos de la cima, el ex director técnico del Getafe destacó la temporada del actual líder, Leicester City.
“Es el momento del Leicester, es un equipo súper organizado, con dos tres herramientas que utilizan muy bien y que han cumplido su objetivo hace dos meses, entonces son de los pocos en el mundo que están jugando libre, sin mas motivación que la de ir a cada partido con la ilusión de ganar y sin la presión de ningun tipo.
“Todos jugamos contra Leicester, todos sabemos cómo juega, todos sabemos lo que utiliza, pero ellos juegan con más intensidad, con menos presión que nadie, es perfecto”.
Quique Sánchez Flores sabe que la oportunidad de llegar al banquillo de la selección de España, que quedara libre tras la Eurocopa, no depende de él, pero hay algo especial que le ilusiona: entrenar a los grandes nombres de La Roja.
“Nadie discute que entrenar a la selección de tu país siempre es extraordinario, pero lo que va quedando con poco margen es para entrenar a determinados jugadores que o los entrenas juntos en la selección o no los entrenas y eso si que me llama. Poder entrenar a Iniesta o Ramos y mezclar a Ramos con Silva y a Silva con Piqué. Como entrenador me encantaría verme en esa situación porque es un grupo muy bonito, (son) excelentes de jugadores, pero no depender de mí”.