Cristiano Ronaldo posa en “modo de relajación” durante un día libre en medio de la última Fecha FIFA. Sobre unas escaleras que conducen a un jacuzzi en la cubierta de un bote de lujo en medio de las aguas de la Costa Azul francesa, la primera impresión al ver su publicación de Instagram es que ha convertido gestos así en una bella arte. Podría pensar que Ronaldo descansa bajo el sol del Mediterráneo. Sin embargo, la verdad es que está trabajando. “Vitamina D”, dice la leyenda que acompaña la foto del cinco veces ganador del Balón de Oro: excelente para mantener la fortaleza de los huesos, la salud cardiovascular y apoya al sistema inmunológico.
Los recuerdos de aquella vez que el mentor de Cristiano, Sir Alex Ferguson, le introdujo al uso de camas de bronceado para así ayudar a mantener altos los niveles de Vitamina D de los jugadores durante los fríos y grises inviernos de Manchester volvieron a surgir con la imagen del jugador bronceado de 33 años de edad en pantalones cortos de baño negros y dorados, reposando bajo el Sol.
El hecho que Cristiano presta atención a detalles así para aportar a su salud fue destacado por su buen amigo, el veterano central Bruno Alves, en la víspera del encuentro entre la Juventus y Parma antes del receso internacional. Ambos son partidarios del comer sanamente y de la buena vida, al punto en el cual llegamos a temer que pronto uno de ellos publicará un recetario o lanzará una marca de pelotas energéticas. Intercambian mensajes de texto constantemente sobre nutrición.
Parece que Cristiano ha convencido a Alves de probar un batido de cúrcuma, jengibre y limón, una bebida que aparenta ser mucho más que refrescante y calmante. “Es antiinflamatoria”, comentó Alves al diario deportivo italiano La Gazzetta dello Sport. “Los limones contienen ácidos, pero se comportan como alcalinos dentro del cuerpo”.
La bebida ayuda a calmar el agotamiento post-entrenamiento con sus antioxidantes naturales. Sin embargo, aún está por verse si podrá apaciguar al ego de Cristiano en su reacción a las críticas despertadas por su ausencia del sorteo de la Champions League y entrega de premios de la UEFA, junto a su pobre desempeño en el Ennio Tardini contra el Parma. El respetable periódico Il Corriere Della Sera lo apodó como “CR0” por lo hecho en Parma, mientras que el diario La Repubblica le dio al fichaje Juventino de €117 millones 5 de 10 puntos en su calificación de jugadores.
“Técnica y tácticamente fue una actuación vergonzante”, indicó Emanuele Gamba. Fue una evaluación contundente que dejó una marca en el lector tan grande como el ojo morado que sufrió Ronaldo al intentar infructuosamente anotar su primer gol con la Juventus.
El deseo que tiene CR7 de romper la malla con el impacto de uno de los 23 disparos que ha hecho hasta ahora (6 más que cualquier otro jugador de la Serie A), en definitiva, hizo caer al portugués y a su equipo víctimas del desespero. Los esfuerzos de los bianconeri en ayudarle a abrir su cuenta goleadora hicieron que el fútbol colectivo mostrado por ellos fuera menos cohesivo y fluido que de costumbre.
El técnico de la Juventus, Massimilliano Allegri, dio sus impresiones sobre el tema en un tuit posterior al partido. “Las alegrías individuales llegarán de forma bien merecida para todos: estamos construyendo nuestra identidad de equipo y en puntos completos trabajamos aún mejor”. Si se piensa al respecto, termina siendo una idea escalofriante. La Juventus ya está a la vanguardia de la pizarra, algo que no ocurre a menudo antes de la primera Fecha FIFA, y se produce a pesar de los intentos fallidos de Cristiano y Allegri dejando en el banco a Paulo Dybala, Douglas Costa, Cancelo y a Emre Can en la Reggio Emilia.
La carrera por el título parece convertirse en un monólogo. Un octavo Scudetto consecutivo es considerado como algo “fácil” en algunos círculos periodísticos, lo cual quizás explique por qué hay mayor interés en las aparentes dificultades de Cristiano en su adaptación a la liga italiana. Las predicciones que lo tenían marcando 40 goles esta temporada han sido reducidas.
“En una liga a la cual todos gustan menospreciar, definitivamente es más difícil marcar 40 (goles)”, dijo Allegri antes de restarle importancia a la situación con su típico sentido del humor. “El principal goleador usualmente suma entre 26 o 27 tantos. De todos modos, el capocannoniere nunca gana la liga, así que está bien”. El último en conseguir la hazaña fue Zlatan Ibrahimovic hace una década.
A final de cuentas, Cristiano está entendiendo que la Serie A es muy diferente a La Liga española.
“No la denominemos la mejor liga o la más difícil”, dijo Allegri. “Sin embargo, en Italia sabemos cómo defender y sabemos como proteger el área. Se le presta mucha atención a la táctica y el aspecto defensivo del juego. Los técnicos están muy bien preparados. Trabajan, miran partidos, no conceden nada, no te dan ninguna ventaja”. Sus ideas fueron compartidas por centrales del pasado y el presente de la Serie A, desde el excompañero de Cristiano en el Real Madrid Raúl Albiol, quien ahora es defensa de la Napoli, hasta Ciro Ferrara.
También está el caso de Stefan de Vrij. Cuando Il Corriere dello Sport le pidió al defensa del Inter de Milán que mencionara al mejor atacante contra el cual haya jugado, probablemente no se esperaba ver como titular de primera página “De Vrij desprecia a Ronaldo” tras haber dado una respuesta con una sola palabra: “(Kylian) Mbappé”.
No se puede imaginar al miembro de la selección holandesa mostrarse complacido por esta mala interpretación al ver el periódico del jueves en una mesa del complejo de entrenamientos del Inter.
Tampoco podemos imaginarnos a Cristiano recortando la página y pegándola a la pared de su vestuario en Turín. Lo más probable es que la motivación del luso provenga de su propia familia: Ronaldo hijo anotó cuatro goles en su debut, vistiendo la camiseta número 7, en el equipo de benjamines de la Juventus contra el Lucentu.
En vez de unirse a la selección portuguesa para el inicio de la UEFA Nations League (la tierra de CR7 no lo necesitó para superar a Italia 1-0), Cristiano permaneció en Turín al lado de Mario Mandzukic para trabajar en ejercicios, química del equipo y los detalles más sutiles de la metodología de Allegri.
La gente suele olvidar que Cristiano estuvo con el Madrid durante nueve años y subestiman la estabilidad y continuidad dentro del ambiente que le rodeó en el Bernabéu. El fichaje de Toni Kroos en 2014 fue la última ocasión en la cual el club merengue adquirió a alguien que fue directamente al primer equipo y lo mejoró. Además, el mismo XI titular se ha mantenido (con ligeros cambios) durante cuatro temporadas consecutivas.
Estos jugadores conocían bien el juego de cada uno por dentro y por fuera gracias a tantas jornadas juntos, de forma ininterrumpida, durante miles de hora. Para Ronaldo, todo es nuevo en la Juve. Los niveles de comprensión mutua se encuentran aún en etapa embrionaria.
Si bien se ha hablado mucho de las dobles y hasta triple marcas contra Cristiano (algo que le ha acechado durante toda su carrera), el tema inherente es más de velocidad y en particular, de un pensamiento más rápido en la cancha. Sus compañeros necesitan darse cuenta de las carreras que hace de forma más temprana y cederle el balón, donde él lo desee, más rápidamente. Allegri está convencido que se producirá una vez que Cristiano y sus compañeros se conozcan mejor y consigan la condición atlética que les permita mayor lucidez en la toma de decisiones.
“…Volverá a anotar goles después de la fecha FIFA”, asegura Allegri. ¿Quizás será a partir del encuentro del domingo entre los líderes de la Serie A y el Sassuolo, experto en matar gigantes y anotar a la libre?
Cristiano celebró su primer gol con el Real Madrid el año pasado en su cuarta aparición con el equipo, por ende, no se siente que esta ocurrencia sea demasiado extraña. Sin embargo, sus compañeros no quieren que la sequía actual termine afectando su psique. Los rivales Gonzalo Higuaín y Mauro Icardi pasan por situaciones similares. Además, como lo apuntó Sami Khedira en una entrevista concedida con motivo de su extensión contractual, Ronaldo no fue contratado para acumular goles en la Serie A. Llegó a Turín para ser la diferencia en los momentos clave de la Champions League y convertir “sueños en realidades” para la Juventus.