MÉXICO -- El debate en México es constante sobre la cantidad de jugadores que se exportan al extranjero, principalmente a las ligas de Europa en busca del crecimiento del balompié azteca. Sin embargo, no genera la misma controversia el tema de los entrenadores y los pocos que salen del país en busca de otras oportunidades y de su crecimiento.
Francia, actual campeón del mundo, destaca además de sus jugadores, por la cantidad de entrenadores que tiene fuera de su país y que continuamente tienen éxito. Prueba de ello es que los vigentes estrategas monarcas de la Liga de Campeones de Europa y del Mundial, dos de los torneos más importantes en el planeta, son franceses, gracias a Zinedine Zidane y Didier Deschamps, respectivamente.
En España, Argentina o Alemania también es una constante que sus directores técnicos estén fuera de su país.
Casos como Josep Guardiola, estratega del Manchester City, Jurgen Klopp, timonel del Liverpool o Héctor Cúper y José Pekerman, quienes dirigieron a Egipto y Colombia en el pasado Mundial, son algunos ejemplos de ello.
En México, en cambio, esta práctica no es común. Actualmente, José Luis Sánchez Solá (Las Vegas Lights), Jacques Passy (Selección de St. Kitts and Nevis), Carlos de los Cobos (Selección de El Salvador), Benjamín Mora (Johor Darul Takzim de Malasia), Javier Martínez (Vipers de Uganda) y Javier Aguirre (Selección de Egipto) son algunos de los estrategas mexicanos que están fuera del país y algunos incursionan casi en el anonimato de no ser por sus logros deportivos y su crecimiento que tienen lejos de su tierra.
“Es uno de los principales males que tiene el futbol mexicano porque mucho se habla que los países crecen cuando tienen 50 o 100 jugadores en equipos de primer nivel o de equipos ‘B’ en Europa y yo argumentaría que tiene el mismo nivel de importancia tener una camada importante de entrenadores dirigiendo en todas partes del mundo. Un entrenador de un país lleva en sus hombros toda una escuela, que es la escuela de entrenadores de ese país y eso representa influir en equipos, en selecciones, generar una metodología y eso influye en los países. No concibes un país triunfador que no tenga una gama de entrenadores triunfadores”, analizó Passy, entrenador de St. Kitts and Nevis, quien lleva más de tres años en su cargo y se prepara para la nueva Liga de Naciones.
EN MÉXICO SE PAGA BIEN Y POCOS DESEOS DE SALIR, ENTRE PRINCIPALES RAZONES
Los entrenadores que han apostado por dirigir fuera de México, en algunos casos, se han visto forzados a salir en busca de otras oportunidades, condiciones e incluso confianza hacia su trabajo, por lo que no han escatimado entre buscar opciones fuera o quedarse en espera a algo en el país que los vio nacer.
“La Liga MX, el Ascenso MX en general son muy bien pagadas y muy cómodas para los entrenadores. En el buen sentido de la palabra son egocéntricas. El medio mexicano gira en gran medida en lo que pasa en el medio mexicano y todo mundo con sus baterías y deseos de dirigir en México”, expuso Passy.
“También cuenta mucho el tema de los agentes o quienes manejan los técnicos porque buscan otros escenarios y de no ser Europa, a los mexicanos no les interesa mucho venir a Centroamérica. Esa también es una de las razones principales”, compartió por su parte Carlos de los Cobos, actual estratega de El Salvador, quien por segunda vez está al frente de la selección cuscatleca.
Las nuevas experiencias implican, entre otras cosas, la adaptación a otros países. El entrenador, a diferencia del jugador, es quien debe trabajar sobre una filosofía de juego y comandar a una plantilla que tiene su propio estilo y costumbres dentro del mismo equipo.
“Aquí (en Malasia) la vida es diferente, las costumbres también, la manera de vivir es muy diferente a lo que vivimos en México. Te tienes que adaptar a las cuestiones religiosas, a la comida… Los jugadores no tienen una cultura futbolística muy impregnada en su mente o en su ADN y hemos hecho un trabajo muy bueno en el que llegamos a proponer nuevos métodos de trabajo, nuevo estilo de juego, nueva manera de ver el futbol y nos dio resultados”, contó Benjamín Mora, un director técnico que cruzó prácticamente todo el mundo para cumplir su sueño de ser entrenador de un primer equipo y sus resultados lo respaldan, pues fue campeón de Súperliga de Malasia el año pasado.
En resumen, insistió Passy, los factores van desde la Liga hasta la misma hambre de un entrenador por salir, aprender en otros entornos, capacitarse y conseguir resultados que abran las puertas en otras latitudes como lo han hecho los colombianos en tiempos recientes al grado que tuvieron representantes en el banquillo en las Selecciones de México y Panamá en la pasada Copa del Mundo.
“La falta del entrenador mexicano de buscar capacitación y esto de ninguna manera es culpa de la Federación, sino que es un tema individual, es de iniciativa personal. La Federación hace su trabajo en poner una licencia de buen nivel, pero hoy se necesita más dedicación, más búsqueda, más años y entender esto como tema permanente”, indicó.
POCA CAPACITACIÓN EN MÉXICO, OTRO PROBLEMA
En México, al año se titulan 200 entrenadores técnicos y reciben una licencia que es válida para dirigir en el país, pero que no es suficiente para otros lugares. Son todavía más escasos los que tienen una licencia UEFA como es el caso de Javier Aguirre o incluso Joan Ginebra, un joven estratega, quien estuvo en las fuerzas básicas de Pumas hasta la temporada pasada y fue multicmapeón con la categoría Sub-11.
“El club (en Malasia) me mandó a Madrid para ver entrenamientos del Atlético de Madrid con ‘Cholo’ Simeone, además de que también me mandaron al Real Madrid a ver cómo trabajaban los equipos base. Este año posiblemente nos manden a otro equipo élite. Hay capacitación constante y se preocupan de que uno mejore. Imagina un príncipe de Malasia que se preocupa para que un mexicano de 39 años sea mejor y brinde mejores cosas a su club. Es una situación que no entiendo de por qué en mi país nadie se preocupó por eso y no solo por mí, sino por todos los demás que están luchando”, lamentó Mora.
“Lo más básico es tener la licencia de entrenador y la Federación Mexicana de Futbol tiene la patente y responsabilidad de dar licencias, pero una licencia de entrenador no te hace ser top mundial y por más que tengas la licencia, el entrenador debe tener una disciplina de capacitación adicional y te capacitas yendo a congresos, si vas a visitar a otros entrenadores, si te vas a sitios de debate, leyendo mucho, relación con diferentes entrenadores en el mundo… Hay muchas maneras para capacitarse y pienso que en la industria mexicana del futbol no le damos tanta importancia al tema de preparación y capacitación”, expuso por su parte Passy.
Los entrenadores mexicanos que incursionan en el extranjero valoran su aprendizaje y experiencia. Fuera de México han encontrado sus oportunidades y han aprendido a aprovecharlas a su modo. Muchas veces sacrifican en temas económicos e incluso la comodidad de estar cerca de sus familias o amigos, pero su pasión los ha llevado a otras latitudes, mientras desean que cada vez sean más los compatriotas que se animen a tomar el reto.
“Los técnicos que son extranjeros y llegan a otro país son muy observados y en mi caso vuelvo a El Salvador, donde ya viví una experiencia que pienso que fue buena hace unos años y por eso me buscaron nuevamente. Como técnico extranjero necesito volver a convencer a la gente y demostrar que tengo capacidad. Representa una responsabilidad grande porque es el representativo de un país. Hay que demostrar que se puede hacer un trabajo aceptable.
“A pesar de que los contratos en Centroamérica no son los que uno puede tener en México u otros países, el trabajo es trabajo y es estar en algo que a uno le apasiona en lo que siempre he estado vinculado en mi vida. Dirigir a esta selección me ilusiona y me emociona”, destacó Carlos de los Cobos.