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De Paul: "Ser campeón del mundo me cambió la vida, soy mejor persona que antes del Mundial"

Está feliz. Disfruta, como nunca. Rodrigo De Paul se siente mejor, sin dudas, desde que ganó con la Selección Argentina el título en la Copa del Mundo de Qatar 2022. Y así lo contó en una entrevista en el programa "Llave a la Eternidad", en la TV Pública.

El mediocampista, símbolo, pieza clave del seleccionado albiceleste dirigido por Lionel Scaloni, contó detalles de charlas con el DT y con su ídolo, compañero, amigo y figura, Lionel Messi, durante la disputa del histórico Mundial.

Lo mejor de la entrevista exclusiva a De Paul

“Tengo un montón de filmaciones yendo a entrenar a la madrugada, a las 2 AM, diciendo ‘hoy es 4 de octubre, faltan 42 días para el Mundial y nos preparamos así’”.

"Scaloni vino a un Mallorca-Atlético. Ya sabíamos los rivales de Qatar. Le digo 'Bien el sorteo', por Arabia Saudita. Me dijo '¡No! Es lo peor que pudo pasar. Pensamos que es una selección fácil y cuando suena el silbato te baja todo'. Dicho y hecho".

“Antes del Mundial no la pasé bien. Decían que no iba a poder jugar en el Mundial, que tenía la cabeza en otro lado y la realidad es que los últimos dos meses no salí de mi casa. Estaba muy enfocado...

“Después del partido ante Arabia hablé con Leo y le decía: 'el Mundial nuestro puede durar cinco días si no ganamos. Hablábamos de que podía ser su último partido en Mundiales, y él me decía 'no es el último'. Y cuando terminó todo nos dijo 'este Mundial lo redisfruté'”.

“Intento hacer la misma vida de siempre, pero ser campeón del mundo me cambió la vida. Emocionalmente, el cariño de la gente, el reconocimiento, sentirte parte de una minoría que es campeón del Mundial. Soy mejor persona que antes del Mundial”.

"Iba a aguantar el dolor que tuve durante el Mundial, pero el problema era saber que me quedaba afuera. Empezó la entrada en calor, me sentía bien y después hacemos unos remates. Cuando pateé la primera vez, vi las estrellas. Me empecé a hacer el b... y no sé quién me vio".

"En el vestuario, antes de empezar el partido, escuché que Leo (Scaloni) le dijo a 'Pala' y 'Lea' Paredes: 'apenas empieza el partido, vayan a calentar los dos'. Yo quise jugar por lo que le daba a mis compañeros, sabía que los iba a contagiar dentro de la cancha. Yo tenía que estar cerca de de Jong, mi cabeza estaba en anularlo a él. Por suerte salió bien".

"En el Mundial, para sacar los pensamientos malos, me apoyé mucho en mi novia, Tini, que hacía que me despegara de todo lo que sentía".

"Siempre que íbamos ganando, tratábamos de mantener una línea bajada por el cuerpo técnico. Él nos decía: 'miren que también vamos a perder, ahí es cuando nadie se tiene que bajar'.

"En la definición por penales de la final, cuando Gonzalo (Montiel) hizo el gol en lo primero que pensé fue en Leo. En ir a abrazarlo a él. En ese mes me di cuenta lo difícil que habían sido para él todos los Mundiales anteriores. Es la cara de todo. Y él volvía a intentar, y otra vez, y otra vez. Se lo merecía”.

"Lo vivido en el Mundial lo soñé un montón y fue más de lo que esperaba. No voy a poder volver a vivir ese conjunto de emociones: miedo, alegría, ansiedad. Fue todo increíble, pero también pasamos momentos bastante duros".