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          Los gigantes caen a la tierra y la caldera arde rumbo al Mundial 2018

          • Martín Bater | ESPN Digital
          6 de sep, 2017, 12:09 ET

          El fútbol es un deporte dominado por “gigantes” en diversos continentes, países que cuentan con una tradición tan rica y/o un plantel tan talentoso que imaginarlos viendo un Mundial por TV es casi sacrilegio.

          Brasil es el único que ha clasificado a todos los mundiales, pero potencias de Sudamérica como Argentina (presente en cada Copa del Mundo desde 1974), de Europa como Holanda (finalista del Mundial 2010 y tercera en el 2014), y de la CONCACAF como Estados Unidos (siete mundiales seguidos y contando) nos han acostumbrado a ser protagonistas de la cita a la que todos quieren acudir cada cuatro años.

          Sin embargo, esa costumbre amenaza con verse interrumpida después de una doble jornada que dejó a argentinos y estadounidenses en zona de repechaje y a Holanda provisoriamente eliminado cuando quedan apenas dos fechas por jugar dentro de menos de un mes.

          ¿Qué les parece si repasamos las cinco preguntas más vitales que nos dejaron lo ya acontecido y las pistas que estas ofrecen sobre lo que está por suceder?

          1) ¿Qué le pasa a Argentina?

          Esa es la pregunta que Jorge Sampaoli, Lionel Messi y 40 millones de argentinos no saben responder hace rato. Es la impotencia en pos de la intrascendencia, la triste realidad de una selección repleta de estrellas que brillan y son aduladas cuando están con sus clubes en Europa pero se apagan y son duramente criticadas cuando se ponen la camiseta de su país.

          Si rendir al nivel de las expectativas fuese una materia escolar, toda la clase se la llevó a marzo. Argentina se está por ir al descenso.

          No se puede empatar contra el sotanero de tu zona de local en un partido que tenías que ganar si o si para no tener la soga al cuello, mucho menos cuando tu rival está repleto de juveniles experimentados enfrentándose al mejor jugador del mundo (Messi), a dos de los goleadores más reconocidos de Europa (Dybala e Icardi) y a jugadores como Otamendi y Banega con años de experiencia como parte de la élite que aun así se empecinan en cometer errores de principiantes.

          El viernes pasado mencionábamos que en el seno albiceleste el nivel de pánico era un 5 del 0 al 10. Bueno, ahora esa calificación es de 11 estando en zona de repechaje y con un viaje a la altura de Quito para disputar la última fecha en el horizonte.

          Podría decirte que a Perú, dueño del cuarto y último cupo directo con los mismos puntos que Argentina, se le gana en el Monumental, la Bombonera o La Quiaca, pero no . Los pupilos de Sampaoli se supone que son “ofensivos” pero solo metieron un gol en los últimos 180 minutos gracias al autogol de un rival. Lo peor de todo es que Messi y Cia. no le transmiten más que apatía a un público al que mantienen a distancia.

          Jueves 5 de octubre. Argentina-Perú. Es una final tan o más importante todavía que las tres perdidas en los últimos tres años. No queda tiempo para traumas y excusas, a partir de ahora es victoria o debacle.

          2) ¿Es Estados Unidos un tigre de papel?

          Qué lindo debe ser estar en Brasil y ver a tu archirrival sufrir con pasaje al Mundial en mano, y lo mismo se podría decir sobre México como testigo de la asfixia de un EE.UU. con la soga al cuello.

          El conjunto de las barras y las estrellas empató casi de milagro en Honduras gracias al oportunismo de un suplente como Bobby Wood y por ahora enfrentaría a Siria en una hipotética repesca, pero su apatía futbolística es tan o más grave que la de Argentina. Panamá los supera en puntos, y la única razón por la que Honduras no lo hace es por la diferencia de gol.

          Pulisic está solo y no tiene socios, lo que luego culmina en una embestida desesperada hacia el arco más basada en la desesperación que en una idea futbolística firme.

          ¿Se acuerdan de como el Barcelona nunca renunció a la pelota a ras de piso y empató contra el Chelsea en la Champions gracias al golazo de Iniesta? Estados Unidos es todo lo contrario, puro barullo y con una línea de cuatro que hace agua.

          Los norteamericanos reciben a Panamá el 5 de octubre y visitan a Trinidad y Tobago para culminar su travesía el 10. En teoría deberían ganar ambos choques y clasificar directo a Rusia 2018.

          Sino, México se enfrenta a Honduras esa misma noche en San Pedro Sula. A ver si no devuelve un favor que debe desde hace cuatro años…

          3) ¿Acaso el legado de Holanda está hecho trizas?

          El 0-4 contra Francia fue paupérrimo, les dieron un baile, y el 3-1 ante Bulgaria fue el grito desesperado de alguien que se aferra a la soga con el abismo debajo suyo. Ese triunfo fue justo, pero pudo haber llegado demasiado tarde.

          La Naranja Oxidada está fuera del Mundial hoy por hoy, tercera del Grupo A tres puntos por detrás de una Suecia que iría al repechaje y a cuatro de Francia con seis por jugar.

          Los suecos los visitan en la última fecha en una cita potencialmente a matar o morir, pero antes de eso Holanda debe ganarle a Bielorrusia en casa ajena. Su legajo como visitante en las eliminatorias actuales es de una victoria, un empate y tres derrotas, así que se les está prohibido contar porotos antes de tiempo.

          Apunte importante: Holanda cuenta con una diferencia de gol de +5. La de Suecia es de +11 y en su próximo cotejo recibe al débil Luxemburgo. Francia visita a Bulgaria y luego es local ante Bielorrusia. O sea, mejor que los holandeses ganen y goleen ante Bielorrusia si piensan llegar a la fecha definitiva con esperanzas razonables de avanzar.

          4) ¿Qué conclusiones nos dejó la clasificación de México?

          El Tri se puso una máscara y salió a bailar airoso por la CONCACAF como si nada hubiese pasado en el verano durante la Copa Confederaciones y la Copa Oro. Pasaron sobresaltos contra Panamá pero obtuvieron los tres puntos para sacar pasaje directo a Rusia y luego ahuyentaron fantasmas en Costa Rica, pero su holgado liderato en el Hexagonal enmascara problemas más profundos de cara a la cita más importante dentro de nueve meses.

          Por ejemplo, ¿qué sucederá con los hermanos Dos Santos? Su Los Ángeles Galaxy va antepenúltimo en la Conferencia Oeste de la MLS, cuya temporada regular culmina en octubre y no arranca de vuelta hasta marzo. Me imagino que se irán a préstamo a un club de Europa, ya que cinco meses de inactividad a esta altura del partido es inaceptable.

          Además, las deficiencias defensivas siguen ahí (especialmente cuando se trata de intentar defender un contraataque del rival) y Guillermo Ochoa las disimuló con grandes actuaciones en el arco, y eso tampoco se arreglará contra Trinidad y Tobago u Honduras en octubre. Harán falta amistosos contra rivales de alto calibre en noviembre, marzo o cuando sea.

          La misión está cumplida, México es uno de apenas ocho privilegiados que ya puede especular con que grupo le tocará en el Mundial. Ahora es cuestión de saber qué hacer para potenciar ese privilegio.

          5) ¿Qué repechaje te gustaría ver más en Europa?

          Suecia, Portugal, Irlanda del Norte, Dinamarca, Eslovaquia, Italia y Gales son los ocho mejores segundos que se cruzarían en cuatro mano a mano hasta el momento.

          Italia tuvo su oportunidad y la desperdició siendo goleado en España. Portugal perdió en la primera fecha ante Suiza y ahora se verá obligada a derrotar a esos mismos suizos en tierras lusas.

          Portugal-Italia sería el platillo más suculento, no cabe duda, pero en este grupo no hay cucos invencibles. Cualquiera le puede ganar a cualquiera, y ese es el precio de no haber ganado su grupo.