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Carlos Queiroz advierte a España: "Nadie gana solo por su reputación"

SAN PETESBURGO -- El portugués Carlos Queiroz, seleccionador de Irán que logró ante Marruecos (0-1) su segundo triunfo en un Mundial dos décadas después del primero y es líder del Grupo B, lanzó tras el partido una advertencia para España, su próximo rival: ningún equipo gana solo por su reputación.

"España tiene un gran equipo y jugadores muy difíciles de controlar, pero hay que jugar el partido que sabemos hacer. España tiene los mejores jugadores, la mejor técnica, pero eso solo no gana el partido. Hay que jugar. Ningún equipo puede ganar un partido solo con su reputación", aseguró Queiroz a EFE tras el encuentro en el Saint Petersburg Stadium.

El técnico del 'Team Melli' iraní aspira a una sola cosa: que cuando acabe el partido contra 'la Roja' el próximo 20 de junio en Kazán, los jugadores españoles salgan del campo "con mucho respeto por los jugadores iraníes".

Un respeto que la selección persa espera haberse ganado después de erigirse como sorprendente líder del Grupo B con su victoria ante Marruecos con un gol en el descuento y en propia meta del delantero marroquí Aziz Bouhaddouz (del St Pauli alemán) cuando intentaba despejar un saque de esquina.

Explicó Queiroz tras el partido que su plan para el encuentro consistía en provocar "un colapso mental" en los jugadores marroquíes de ataque, sabedores de que conforme vieran que sus intentos ofensivos se iban convirtiendo en inútiles, comenzarían a desesperarse y serían más vulnerables al contragolpe iraní.

No en vano, el seleccionador luso recordó que tuvieron una de las opciones de gol más claras de la primera parte: una doble ocasión al contragolpe justo antes del descanso en la que el Sardar Azmoun (del Rubin Kazan ruso) y después Alireza Jahanbakhsh (del AZ Alkmaar holandés) encadenaron dos disparos, repelidos ambos por el portero marroquí Monir El Kajoui, del Numancia español.

"Cuando creamos pánico en la defensa marroquí, el partido cambió, y ahí los jugadores marroquíes supieron que podían perder", señaló el que fuera técnico del Real Madrid, sonriente en la comparecencia de prensa, aunque sin obviar que tuvieron "un poco de suerte" en el autogol del conjunto magrebí.

Preguntado por EFE sobre si ya tiene un plan preparado para "colapsar" a España de la misma forma que lo hizo con Marruecos, el técnico luso sonrió como un niño que tiene preparada una travesura.

"No sé cómo lo vamos a hacer, pero hay que intentarlo", señaló Carlos Queiroz, para quien no obstante estos tres puntos dan al conjunto de los 'guepardos' un problema: la "responsabilidad" de las expectativas que generan en su hinchada.

Si para ellos ganar a Marruecos era "como ganar la final del Mundial", lograr algo positivo contra España o Portugal tiene una categoría superior.

"El partido de España es para nosotros como el universo de las finales, porque es el universo contra nosotros", señaló Queiroz, elevando aún más la hipérbole.

"España es un equipo fantástico, y no solo tienen magníficos jugadores sino que traen futbolistas brasileños para jugar con ellos como Diego Costa", añadió el técnico sobre el delantero del Atlético de Madrid, nacido en Lagarto (Brasil) pero nacionalizado español y autor de dos de los tres goles en el empate contra Portugal (3-3).

Queiroz, asentado en la selección iraní desde el año 2011, a la que ya llevó al Mundial de Brasil 2014, reivindica el derecho de sus jugadores a disfrutar con el fútbol más allá de las circunstancias políticas que rodean al país que defienden, y a los boicots de marcas como la estadounidense Nike.

La victoria le sirvió para reclamar que se deje "la política a un lado" y dejar un recado doméstico a quienes en su país han entorpecido la preparación de la selección, ya que dedicó la victoria "a los verdaderos fans del equipo nacional" y no a quienes "pusieron en riesgo la preparación".

Por fortuna para ellos, sobre el césped la política se desvanece y Queiroz espera que la victoria funcione para ellos como un reconstituyente antes de los duelos contra las selecciones ibéricas, las favoritas del Grupo B, España y Portugal.

"Ganar es como el mejor medicamento que puedes tomar. No hay mejor remedio en el fútbol. Yo ya intenté con paracetamol, antibióticos... Pero este es mejor", bromeó Carlos Queiroz, el estratega que ya "colapsó" a Marruecos y buscará la manera de hacer lo mismo dentro de cuatro días contra España.