CÓRDOBA -- El estado del campo de juego del estadio Mario Alberto Kempes preocupa a los organizadores del amistoso entre Argentina-México, que trabajan hasta último momento para dejar el césped en condiciones.
Y es que una serie de fuertes tormentas azotó la ciudad de Córdoba la semana previa al partido y, aunque trabajaron a destajo en los últimos días, no han logrado dejar óptimo el terreno.
En las horas previas al encuentro, mientras la banda de Ulises Bueno prueba el sonido para el show del entretiempo, los cancheros intentan incrustar los panes de césped y suman arena para que llegada la noche la cancha se encuentre lo mejor posible.
Argentina recibe a México a las 21 horas, en el primero de los dos amistosos planificados para este fin de semana. El próximo martes volverán a verse en Mendoza.