Atlético de Madrid retoma el paso con doblete de Torres

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MADRID (Paola Núñez, corresponsal) -- 140 días después de su último tanto en Liga, Fernando Torres firmó un doblete para que el Atlético de Madrid rescatara una victoria por 2-0 sobre el Leganés.

La actitud ganadora a la que apeló Simeone desde media semana se vio en las botas de Fernando Torres, el único rojiblanco que desde el inicio supo deshacerse del miedo a la incertidumbre que desde hace semanas nubla la vista al Atlético de Madrid.

Dominó, pero sin poner el alma, y por momentos, arriesgándose de más a un naufragio.

Torres sacó la casta desde la primera jugada, cuando puso en aviso a Iago Herrerín con un disparo cruzado que se fue desviado por muy poco. 15 minutos después, consiguió la oportunidad de oro al conseguir un tiro penal tras ser derribado en el área por Dimitrios Siovas. Y fue Torres quien la aprovechó de rebote, literalmente, pues Antoine Griezmann, encargado de realizar los cobros, falló de nuevo - ya van tres esta temporada - estrellando el balón en el poste. El '9' pescó el balón rebotado para completar la faena con un Herrerín ya batido.

La contribución de Fernando Torres a la cuenta goleadora rojiblanca en la Liga se había limitado a un doblete en la victoria por 5-0 sobre el Sporting de Gijón a mediados de septiembre. Con el tanto que supuso la ventaja por 1-0 empezaba a reivindicarse.

El Niño tenía hambre, pero fue difícil contagiar a sus compañeros y por muchas oportunidades que crearan, tardaron media hora más en volver a buscar a Herrerín.

Aunque dueño del balón, el Atlético se partía por la mitad; los pases eran insuficientes o demasiado largos mientras la defensa se mostraba dubitativa, particularmente Stefan Savic, que llegaba tarde a las jugadas y se mostraba errático en los movimientos. Leganés intentó sacar provecho de la situación en algún contraataque, pero todo se quedaba en una declaración de intenciones pues no encontraban rematador. La intensa lluvia no ayudaba a los rojiblancos, que acabaron la primera parte pidiendo la hora.

Como el miércoles pasado ante Barcelona, el Atlético tuvo que pasar por el vestidor para ordenar sus ideas. El Cholo se guardó a Saúl al inicio de la segunda mitad dando paso a Ángel Correa. Y como tantas veces ha sucedido en el Calderón, el cambio desde la caseta resultó clave.

Cinco minutos después, Fernando Torres marcó, ante el rival que lo vio debutar hace 16 años, su segundo tanto de la tarde después de que Ángel Correa le filtrara un balón precioso. Y como se le dan los goles cargados de simbolismo, contó como el 4,500 en la historia de la entidad rojiblanca.

La ventaja permitió que el Atlético se replegara para guardar su portería, pues pese al duro golpe el Leganés no se rendía. Durante un buen rato los pepineros tuvieron contra las cuerdas los locales, que requirieron una apurada salvada de Moyá y una intervención casi en la línea de Godín para mantener la puerta a cero.

Cholo decidió entonces asegurar el resultado y envió a Vrsaljko en lugar de un desaparecido Antoine Griezmann. Torres, más cómodo con Correa un paso detrás, lo volvió a intentar a diez minutos del final, pero sólo consiguió un tiro de esquina que resultó inocuo. Leganés, para entonces, había perdido el fuelle y no supo aprovechar que el Atlético ya había decidido reservar sus energías para la batalla del martes en el Camp Nou en la vuelta de la semifinal de la Copa del Rey.