Real Madrid rescata empate frente al Atlético Bilbao gracias a Isco

El centrocampista del Atlético de Bilbao, Iker Muniain, marcó el primer gol del encuentro.
El centrocampista del Atlético de Bilbao, Iker Muniain, marcó el primer gol del encuentro.
EFE

MADRID (Paola Núñez, ESPN Digital) - Isco salvó al Real Madrid de una derrota. El malagueño entró en la segunda parte para rescatar un punto en el empate por 1-1 frente al Athletic de Bilbao en el encuentro disputado este sábado en San Mamés.

En cuanto el conjunto merengue se metió a un terreno tradicionalmente difícil, y ante un rival decidido a exigirle un poco, se acabó esa imagen de aplanadora que había empezado a proyectar en la Liga.

Real Madrid sobrevivió casi de milagro ante el Bilbao. Fue un equipo en permanente estado de tensión; incómodo, arrinconado a veces, y que sólo encontró la manera de salir del atasco cuando Julen Lopetegui envió a la cancha a Isco para disputar la última media hora del encuentro.

Athletic, sabiéndose amo y señor en San Mamés, se adueñó del partido desde el primer instante poniendo al hasta hoy colíder contra las cuerdas. Empezó por sacarlo de sus casillas, hasta provocar que hasta Toni Kroos cometiera errores impropios para un jugador de su categoría.

Fue en una de esas jugadas en que el Real Madrid perdió el balón de manera absurda sin enterarse por dónde le caían los tiros en que un inmenso Iker Munian hizo efectivo el dominio inicial de su equipo pasada la media hora de partido.

Madrid no supo cómo ni por dónde Susaeta se sacó un soberbio pase ante la llegada de Iñaki Williams; la zaga, desbordada y jugando dos tiempos atrás, no pudo evitar que éste pusiera un pase perfecto para que Muniain pusiera el 1-0.

A medida que aumentaba la presión del Athletic -  también desde las gradas - lo hacía el nerviosismo merengue. Y lo peor: Karim Benzema y Gareth Bale parecían no encontrarse en la cancha mientras Marco Asensio estaba a años luz del hombre que lideró a España hace apenas unos días.

Pudo irse al descanso perdiendo 2-0 después de que Thibaut Courtois se comiera un disparo de Raúl García si el árbitro no hubiese anulado el gol por fuera de lugar. A este punto, en el Madrid ya temblaba hasta el alemán - que casi se dispara en el pie al ceder un balón a Cortois innecesariamente peligroso obligando al belga a reventar el balón.

Sólo Luka Modric parecía dar algo de luz, pero en la única oportunidad clara de la primera parte, Unai Simon se lució con un paradón.

No fue hasta la segunda parte, cuando Julen Lopetegui envió a la cancha a Casemiro para fortalecer la media en lugar de Ceballos y a Isco para ocupar el puesto del croata, que Real Madrid encontró la manera de volver a la vida. Se benefició - también - de la desgracia ajena, cuando Muniain, por mucho el hombre más determinante de los vascos, abandonó el terreno de juego por lesión. Solo así el Real Madrid se sintió liberado para irse al ataque y cinco minutos después, Isco ponía el 1-1 con un cabezazo a un centro de Bale desde la banda.

Respiró el equipo merengue, mientras en el bando local se abrió la caja de Pandora. Como si en ese instante hubiesen intercambiado papeles, el Real Madrid se hizo con el control y se lanzó a bombardear a Simon. El Athletic recurrió a la dureza y si el partido no acabó en golpes fue porque el árbitro puso orden a base de tarjetazos por doquier - mostró hasta cinco amarillas en menos de diez minutos.

Los últimos minutos fueron dominados por el pelotazo. La incomodidad, e inconformidad, del conjunto merengue no dio para más y casi vuelven a Madrid agradeciendo que han sido dos puntos 'perdidos' y no tres.