Ante el conjunto belga, Riquelme se desempeñó por primera vez en el Barcelona en el rol que brilló en Boca Juniors, de mediapunta, como armador del equipo o enganche entre los volantes y los delanteros.

Desde esta posición, Riquelme reconoció que tuvo "toda la libertad" para transitar el terreno de juego y, en consecuencia, redondeó una buena actuación y señaló el tanto de la victoria del "Barsa", el cual lo hizo "muy feliz".

Con el partido igualado sin goles, la ex estrella xeneize tomó la pelota fuera del área, amagó para dejar en el camino un rival y sacó un espectacular remate que se introdujo abajo, junto al palo izquierdo al arquero local, que nada pudo hacer.

"Lo mejor del gol fue que dio el triunfo al equipo", enfatizó "Romi" en declaraciones publicadas por diferentes medios periodísticos españoles, e insistió en su satisfacción por haber jugado de mediapunta.

Riquelme volvió a mantener un distanciamiento respecto a la idea que se haya podido hacer Louis Van Gaal de su actuación y de las posibilidades que tiene de ser definitivamente titular.

En tal sentido, puntualizó que los tres goles que convirtió en partidos oficiales del equipo catalán no implican haber logrado la titularidad: "No creo que con el partido ante el Brujas esté ganando un lugar en el equipo. Cuando juego, intento hacerlo lo mejor que sé".

Acerca de la victoria alcanzada por el Barcelona, y dado que la mayoría de los jugadores eran los mismos que perdieron contra el Novelda en la Copa del Rey, admitió que no se sacó ningún peso de encima, porque "cuando perdimos en Novelda, no jugamos un mal partido".