En la quinta jornada, a falta del Atalanta-Lazio (18.30 gmt), Filippo Inzaghi continúa en una impresionante racha goleadora ya que suyos fueron tres de los seis goles con los que el Milán se adjudicó "el set y el partido" ante el colista Torino (6-0).

Pero, sin duda, y al margen de las goleadas de tres de los cuatro "grandes", lo más llamativo ha sido ver como el modesto Como, que llegaba penúltimo con un solo punto y un solo tanto, le sacaba a domicilio los colores a la "Vecchia Signora", que cedió un empate (1-1). Y gracias, pues el tanto de la igualada local llegó al final.

Lo consiguió el Como con modestia, con un buen planteamiento defensivo, pero sin desdeñar irse al contragolpe. Además, se encontró con un Juventus muy espeso y sin lucidez en ataque, donde notó la ausencia de los "tocados" checo Pavel Nedved y Marco Di Vaio, en especial por su movilidad y apertura de espacios.

El "verdugo" juventino, por su fuera poco, fue su ex-jugador Fabio Pecchia, que situó al Como con ventaja (m.65). Un tanto protestado por el Juventus ya que en la trayectoria del disparo había un jugador visitante que, en verdad, tapaba al meta Gianluigi Buffon.

La "Vecchia Signora" redobló esfuerzos en busca de la igualada, pero el triunfo del Como se veía muy cercano ya que los ataques locales seguían sin orden. Pero, para fortuna juventina, el uruguayo Zalayeta, que había saltado al campo en lugar del chileno Marcelo Salas (m.58), sacó petróleo de un centro de Zenoni y estableció el empate (m.88).

El Juventus, como ocurriera en la anterior jornada ante el Parma, también en casa, salvaba un punto en los últimos instantes. Pero, asimismo, dejaba preocupantes muestras de cansancio y falta de ideas. Además, esta vez Alessandro Del Piero no estuvo en vena goleadora.

El que sigue aumentando su racha de aciertos ante la meta rival fue Filippo Inzaghi, que llevó al Milán a un concluyente 6-0 casero sobre un Torino a la deriva, colista, sin punto alguno, y que podría registrar cambio de entrenador en los próximos días.

La puerta de la goleada del Milán, que no contó con el "tocado" brasileño Rivaldo y que sigue sin tener al ucraniano Andreij Shevchenko, en el camino final de recuperación de su lesión, la abrió Andrea Pirlo, en lanzamiento de una pena máxima (m.21) señalada por derribo a Inzaghi.

Luego, Inzaghi, bajo los ojos en tribuna del presidente del gobierno y del club milanés, Silvio Berlusconi, empezó su festival, anotando en los minutos 32, 77 y 86. En medio, el brasileño Serginho (m.40) y un autogol de Fattori (m.83), redondearon las cosas.

El Inter de Milán del técnico argentino Héctor Cúper sigue imparable en liga y goleó a domicilio al Piacenza (1-4), pese a no contar con el meta Toldo, el defensa Materazzi, pero sobretodo el delantero Christian Vieri. Al menos, el tierras piacentinas, el equipo interista no fue "Vieri-dependiente".

Pese al resultado el Inter no lo tuvo tan fácil como indica el marcador, pues sufrió mucho en la primera mitad donde el Piacenza le trató de tú a tú e, incluso, estuvo más cerca del gol en un remate de Dario Hubner sacado excelentemente por el meta Fontana.

Pero casi a continuación el Inter tuvo la fortuna de su parte, en un remate de cabeza a media altura a cargo de Luigi Di Biagio (m.36), a la salida de un córner, que se coló de forma inverosímil entre tres defensores locales.

Luego, en la segunda mitad, con la apertura de líneas del Piacenza y una mayor tranquilidad, el Inter castigó sin piedad. Lo hizo pronto con un nuevo tanto de Di Biagio (m.51) y lo redondeó con goles del uruguayo Alvaro Recoba (m.69) y del argentino Hernán Crespo (m.85). El equipo local acortó con el ex-juventino Maresca (m.73).

El Inter reforzaba su liderato y suma su cuarta victoria en los cuatro encuentros jugados. El Parma tiró ante el Perugia (2-2) el triunfo en diez minutos. Los que van del 64 al 73, en los que el perugino Tedesco igualó los tantos parmesanos anotados por el rumano Mutu (m.19) y por Donati (m.53).