Entre los más dolidos por este desplante se encuentra el capitán interista, el argentino Javier Zanetti, uno de los veteranos en el club y que ha compartido los cinco años con el brasileño, según recoge hoy la prensa deportiva italiana.

"Se marchó sin decirnos nada, por lo menos podría haberse despedido", asegura Zanetti, quien se confiesa contrariado por la actitud por su ex compañero, aunque admite con cierta amargura que "cada uno es libre de actuar como quiere".

La plantilla del Inter se lamenta de que tras las rocambolescas negociaciones para su traspaso al Real Madrid, Ronaldo tomara ayer mismo un avión privado para volar a la capital española, sin pasar a despedirse por el centro deportivo de la Pinetina, donde se entrenaban sus compañeros de escuadra.

Sin embargo la mayoría de ellos ha asegurado que "comprenden" la decisión de su compañero, como el uruguayo Alvaro Recoba, aunque este señala que "si se hacen ciertas cosas, es mejor hacerlas de otra manera".

También "Bobo" Vieri se muestra comprensivo con el brasileño, al afirmar que intentó convencerle para que se quedara, pero que Ronaldo tenía la firme intención de "cambiar de aires" y que en su lugar ha llegada el argentino Hernán Crespo "que es también un gran campeón".

Para el presidente del Inter, Massimo Moratti, el "caso Ronaldo" pertenece ya a la historia del club, al tiempo que ha insistido en el que el Inter "es ahora más fuerte y más rico", en declaraciones que recoge hoy "La Gazzetta dello Sport".

Moratti exonera al técnico argentino Héctor Cúper de cualquier responsabilidad en la marcha de Ronaldo y señala que "no es justo hacerle cargar con esa cruz". El dirigente insiste en que con los fichajes de Crespo y Cannavaro el club cuenta con refuerzos suficientes para sustituir al "Fenómeno", un jugador que en su opinión "no ha dado mucho" al Inter durante los años que formó parte de su plantilla.