"La RAI no está dispuesta a desangrase para salvar a unos clubes de fútbol asediados por las deudas" asegura el director general del ente público, Agostino Saccá, en una entrevista que recoge hoy el rotativo milanés "Corriere della Sera".

Saccá cifra en 45 millones de euros la oferta máxima hecha a la Liga italiana de fútbol para poder ofrecer los resúmenes de cada jornada y los partidos de Copa en la temporada 2002-2003.

"Ya para encontrar este dinero -añade- hemos tenido que hacer piruetas". También asegura que hay preparada una campaña institucional para explicar a la opinión pública la situación si la RAI decide renunciar a transmitir el fútbol.

El responsable televisivo recuerda que hay otros acontecimientos deportivos, como la Fórmula-1, que son mucho más rentables, ya que alcanzan una cuota de pantalla de hasta el 60 por ciento, frente al 25 por ciento del fútbol (33 por ciento si juega la selección).

En medio de la polémica Saccá subraya que no acepta presiones políticas para ceder en su postura por parte del Ejecutivo que preside el conservador Silvio Berlusconi, y que "el propio primer ministro y el Ministerio de Cultura están informados de ello".

Del campeonato italiano de fútbol se emiten en abierto los resúmenes de la jornada semanal, los partidos de la Copa de Italia y los de la selección nacional, así como algunos de la Liga de Campeones europea.

El resto de los partidos se dan por los dos canales de pago existentes, Tele+ y Stream, con los que tienen acuerdos diez de los 18 equipos de la Serie A italiana.