Fin del sueño para el Dream Team

FECHA
08/11
2011
por Sebastián Martínez Christensen

LeSean McCoyScott Cunningham/Getty ImagesNi el buen nivel de LeSean McCoy le alcanzó a los Eagles para derrotar a los Bears en MNF

MIAMI -- Parece que finalmente se le está acabando el sueño de hacer cosas grandes al autoproclamado "Dream Team".

Los Philadelphia Eagles hicieron el ruido más fuerte en la temporada baja con las adquisiciones de Nnamdi Asomugha, Cullen Jenkins y Dominique Rodgers-Cromartie, entre otros.

Aunque en este caso, fue mucho ruido y pocas nueces.

Hasta ilusionaron a sus fanáticos con un futuro mejor tras darle una extensión de más de 100 millones de dólares a Michael Vick.

Pero hasta que este mariscal no demuestre que puede mantenerse saludable y ser consistente, no se puede mirar más adelante que el próximo juego.

No existen los campeones de papel en la NFL, y a pesar de que en cuánto a talento se refiere, los Eagles no tienen nada que envidiarle a ningún equipo, la realidad indica que hoy todos los equipos los complican.

Eso fue exactamente lo que sucedió este lunes por la noche ante los Chicago Bears, un rival directo en la pelea por el comodín.

La defensiva volvió a brillar por su ausencia, dado que no lograron a presionar a Jay Cutler ante una línea ofensiva en teoría muy mala, y siguen sin poder detener el ataque terrestre.

El resultado fue una nueva derrota y un récord actual de 3-5.

Lo frustrante para los fanáticos de los Eagles es que Philadelphia pareció dar indicios de recuperación la semana anterior tras vapulear a Dallas.

Sin embargo, a juzgar por lo sucedido el lunes, fue apenas una cortina humo.

En este caso no alcanza con tener a uno de los mejores corredores de la NFL en leSean McCoy.

Porque los Eagles no son un equipo, y porque el ascenso a coordinador defensivo parece estar quedándole grande a Juan Castillo.

Sus jugadores no tacklean --si necesitan más evidencias, basta con ver el tackle fallido sin ni siquiera intentar de Rodgers-Cromartie el lunes--, y cuando no se ejecutan los fundamentos, no hay victorias en una liga tan pareja.

Hay quienes todavía creen en los Eagles, pero yo dejé de ser uno de ellos esta semana.

La NFC es una conferencia muy competitiva este año, y harán falta al menos 10 triunfos para hacerse con uno de los dos comodines.

Piensen en equipos como los Detroit Lions, los Chicago Bears (ventaja de desempate), los Atlanta Falcons, los Tampa Bay Buccaneers y los Dallas Cowboys.

Todos tienen mejor récord que los Eagles en este momento, y muy probablemente al menos la mitad de estos conjuntos llegarán a 10 triunfos.

Para que Philadelphia llegue a la meta de una decena de triunfos, deben ganar siete de sus últimos ocho partidos.

Misión casi imposible para un buen equipo --al menos si no te llamas Green Bay Packers--, y más aún para un conjunto cuyas piezas son simplemente una suma de individualidades como ocurre en Philadelphia.

Los Eagles comenzaron esta temporada como el supuesto equipo de ensueño, pero terminaron siendo una gran pesadilla.

Sin lugar a dudas, la gran decepción de la temporada.