UNCASVILLE, Connecticut -- Shane McMahon acaba de aterrizar su última ráfaga de golpes, enviando un indefenso AJ Styles a una vacía mesa de locutores, cuando el comisionado regresó al ring y subió a la cuerda superior. No quedó un alma sentada en la arena dell Mohegan Sun. McMahon tomó unas cuantas respiraciones profundas y metódicas, y luego, en otro increíble momento de alto vuelo, saltó al aire y aterrizó un codo en Styles con suficiente fuerza para dejar la mesa (y aparentemente Styles ) en pedacitos.
Pero créanlo o no, ese truco de temerario, que cerró la edición del martes de SmackDown Live, pudo no ser el punto culminante de la noche.
Menos de dos semanas antes de WrestleMania, el espectáculo no sólo ató unos cuantos cabos sueltos, sino que pasó de buena a gran acción en el ring con poco de humor raro.
La noche comenzó con el campeonato en parejas en línea. Hasta la semana pasada, American Alpha había sido inexistente, pero su acto de desaparición puede ser perdonado después de una lucha apasionante contra los igualmente dinámicos Usos.
De principio a fin, los cuatro competidores pusieron una actuación acrobática, con interminables suplexes, superkicks y giros. La acción, como debía hacerlo, provocó fuertes fritos de alegría entre la multitud, incluyendo a Rob Gronkowski, que estaba sentado en ringside.
El final, un golpe bajo sin escrúpulos cortesía de la cuerda del medio a Jason Jordan, seguido por un superkick, dio a los Usos la victoria -- y los títulos.
Impresionante como fue, la decisión de mover los cinturones de nuevo a manos de los Usos -- ahora tres veces campeones en pareja -- con WrestleMania a la vuelta de la esquina es un momento que hace rascarse la cabeza que sin duda pudo haber quedado para el gran escenario, incluso si era una atracción pre-show.
Quizás habrá una revancha en Orlando, pero incluso si American Alpha reclamara los títulos, no tendría la misma sensación de vibra. Al igual que la decisión de elevar tan pronto a Bayley a la cima, la entrega de tal talento, pero greenhorn, el equipo de oro sin ningún tiempo real para construir una trama adecuada podría tener una caída negativa en el largo plazo.
American Alpha fue el campeón que más tiempo reinó en la WWE, con 84 días. Ahora ese título pertenece a Dean Ambrose, el campeón Intercontinental.
DE VUELTA A SHANE
A pesar de las acciones teátricas de McMahon, la narrativa entre él y Styles evolucionó lentamente el martes. Vimos flashbacks de Styles lanzando a McMahon a través de la ventana de un auto la semana pasada para iniciar el show, luego Styles eventualmente fue al camino al ring y, hablando a la audiencia, se deleitó en su decisión despiadada de lastimar al jefe. Pero Styles también se sintió insultado de que él, la "cara que dirige el lugar", fue relegado a una lucha contra Shane.
Es justo decir que era un sentimiento comprensible. Después de todo, Styles ha sido consistentemente el mejor luchador desde que llegó a la WWE hace más de un año, y bien sea técnico o rudo, él recibe más reacción de la multitud que casi cualquier persona en la lista.
En el segmento final, McMahon, luciendo un morado bastante pronunciado como resultado de la emboscada de la semana pasada, se dirigió al ring en medio de la explosión habitual de emoción de los aficionados. Pero el entusiasmo se volvió modestamente plano cuando empezó a hablar. Por primera vez durante toda la noche, los gritos de "What" y "CM Punk" comenzaron a reverberar a través de la arena. Llevó a algunos momentos incómodos hasta que Styles apareció una vez más. Con un tono condescendiente, se disculpó con su jefe, pero tan pronto como Styles entró en el ring, McMahon desató un torbellino de golpes, que condujeron a ese extraordinario codazo desde la parte superior de la cuerda.
Esta serie de eventos nos recordó lo que históricamente ha sido cierto de McMahon. No tiene las herramientas para darnos una cascada de emociociones de principio a fin, pero todo lo que se necesita es un momento épico como el martes - o como la lucha de WrestleMania del año pasado contra The Undertaker -- y tendremos una lucha digna de confeti.
LA COMEDIA DE MIZ ES ORO
Con tanto material para burlarse de John Cena y Nikki Bella, a Miz y Marise le tomó no uno, sino dos, segmentos pre-grabados para ridiculizar las estrellas de "Total Divas".
Las parodias acumularon risas a granel de la multitud, y realmente fueron un par de momentos verdaderamente cómicos.
La única mala noticia aquí: No hay manera que su lucha en WrestleMania podría emparejar a las parodias ridículamente risibles del martes.
SE REESTABLECE EL ORDEN PARA WYATT Y AMRBOSE
La lucha más esperada de la noche, el enucentro Randy Orton-Baron Corbin no era realmente acerca de cualquier mala sangre entre estos dos, sino más bien la construcción de sus respectivos ángulos a WrestleMania.
A pocos minutos de su lucha, una carretilla elevadora surgió desde los abstidores, una indicación evidente de que Dean Ambrose regresaba de su brutal ataque por Corbin hace dos semanas.
Cuando el reflector finalmente apuntó, un Ambrose, que había sido enviado al cielo en el montacargas, lanzó esta broma: "Oye, Corbin, ¿estás ocupado?" La distracción condujo a un RKO por Orton y la victoria.
Y así, el último cabo suelto de WrestleMania fue atado entre Corbin y Ambrose, que fue al ring para disfrutar de su venganza exitosa.
Mientras tanto, tras bastidores, un grupo de hombres con máscaras de ovejas rodearon y luego aguantaron a Orton, sólo para que Wyatt apareciera y se declarara intacto después de la saga maniaca de su casa hace unas semanas. Wyatt prometió que el intento de Orton de exponer su único defecto era ahora su mayor fortaleza.
Lo que es interesante aquí es que Wyatt, la víctima en esta lucha, lo siguen presentando como el villano. Parecía que después de los elogios que recibió al ganar su primer campeonato de la WWE en el Elimination Chamber ya tenía todos los ingredientes para convertirse en el principal favorito de los fans en SmackDown, que fuera de Ambrose, necesitan un verdadero técnico a tiempo completo.
FALLOS Y ACIERTOS
• El desarrollo de la trama del campeonato femenino de SmackDown para WrestleMania no recibió muchos favores después de que estallara una pelea caótica de cinco personas que nos dejó encogiéndonos de hombros. Esperemos que el talento puro y el atletismo de la lista de mujeres compensen la falta de historia cuando lleguen a Orlando.
• Dame más Fandango, por favor. Tal vez no como un luchador, pero ciertamente como un chiflado. Su entrega de boletas a Cena por varias infracciones, que incluía ser un pésimo novio y luchador -- aún sim importar la audacia de usar jorts en este tiempo y momento - fue tan divertido como ridículo.
• Es cierto, Luke Harper ha resurgido de los desaparecidos. Por supuesto, fue en un retorcida, villanesco promo en la gran pantalla promocionando una lucha la próxima semana contra Wyatt. Como lo ha hecho durante algún tiempo, la secuencia de eventos en esta telenovela multidimensional con Harper, Orton y Wyatt continúa sintiéndose como libreto de última hora sin una narración clara. Harper estuvo involucrado en un encuentro en parejas fuera de cámaras con su compañero Ambrose llevándose la victoria sobre Wyatt y Corbin.
• Día difícil para dos de los principales narradores, pasados y presentes, en la WWE. Mauro Ranallo perdió su segunda semana consecutiva de SmackDown, afirmando que no se sentía bien. Más temprano en el día, Jim Ross anunció que su esposa fue atropellada por un automóvil mientras conducía su Vespa y sufrió múltiples fracturas de cráneo. Él twitteó, "Necesitamos un milagro." Nuestros pensamientos están con ambas voces ejemplares.