Es difícil destilar todos los elementos que hicieron que la "Era de la Actitud" de la WWE fuera una experiencia tan transformadora y entretenida. Pero en su núcleo, siempre se trataba de una energía frenética, un deseo de tomar grandes riesgos sin miedo a fallar y, cuando todo lo demás fallaba, apoyándose en lo que hacían mejor.
La era de "TV-14" desapareció hace mucho tiempo, y con ella la mayor parte del lenguaje colorido y la objetivación irresponsable de las mujeres (que es lo mejor), pero al menos por una noche, Monday Night Raw tomó un poco de esa fórmula. La primera noche del "Superstar Shakeup" fueron tres horas llenas de acción que se sintieron divertidas, frescas y memorables, sentando las bases para algunas cosas potencialmente grandes por venir.
A diferencia de los sorteos anteriores o cambios de talento, al público no se le dio casi idea del formato de la "Sacudida de Superestrellas" de antemano. Pocos podían imaginar que al final de la noche una friolera de 11 superestrellas de SmackDown (junto con Elias Samson de NXT) llegarían a Raw; dos de los cinco campeones de la WWE (Dean Ambrose y Bray Wyatt), su campeón Intercontinental (The Miz), la dos veces campeona de SmackDown (Alexa Bliss) y los campeones en pareja inaugurales de SmackDown (Heath Slater y Rhyno), y eso es sólo para empezar.
Pero aun cuando estos cambios, y los que siguen el martes por la noche, darán forma al año siguiente de innumerables maneras, el momento que sin duda se recordará por encima de todos los demás desde el lunes por la noche no tuvo nada que ver con la sacudida. La paliza que Braun Strowman propinó a Roman Reigns tras bastidores, que duró más de cinco minutos e incluyó un par de ataques adicionales, una camilla lanzada de un muelle de carga y una ambulancia que se viró de lado fue una especie de locura de la "Era de la Actitud" que de alguna manera canalizó tanto esa época pasada y la vibra energética del resto de la noche.
Mientras que no sabremos cómo Raw se verá en última instancia post-sacudida hasta el final de la noche en SmackDown, las estrellas parecen alinearse para que ambos programas se sientan frescos en su estela. Con suerte, el lunes fue sólo el comienzo de algo más grande.
DEJANDO EL PASADO EN EL PASADO
Fue agradable ver, en general, que las superestrellas que se trasladaron de SmackDown a Raw representaron una buena parte de las diversas tramas y rivalidades de los últimos meses. Incluso en los casos en que había algo de historia y crossover, como en el caso de The Miz, Maryse y Dean Ambrose (o Bliss y Mickie James), la animosidad persistente fue abordada y casi inmediatamente dejada en el pasado.
Dar a Miz y Maryse la última palabra (por ahora) contra John Cena y Nikki Bella fue también un toque agradable, especialmente teniendo en cuenta lo unilateral que fueron las últimas semanas de ese encuentro. Ambrose simulando ignorancia y sacándolos de la parodia al otorgarle cumplidos dirigidos a Cena y Bella fue la manera perfecta para que Miz y Maryse (literalmente) echaran a un lado la burla en el pico de su ejecución y empezar una nueva página el lunes en la noche.
ATACANDO EL BALANCE
Está claro que hay algunos movimientos importantes por venir el martes por la noche, pero en este momento en particular, el enorme desequilibrio entre Raw y SmackDown es cómico. Uno sólo tiene que mirar el gráfico colocado en la pantalla el lunes por la noche para ver cómo se igualarán las cosas.
Tanto el campeonato Intercontinental de Ambrose como el campeonato de Estados Unidos de Kevin Owens no podrán permanecer en el mismo show, a menos que sea una improbable solución a corto plazo de una prolongada ausencia para el campeón universal Brock Lesnar. Después del evento principal del lunes, en el que Ambrose venció limpiamente a Owens en el centro del ring, la salida de Owens parece más segura (aunque tendrá una oportunidad más contra Chris Jericho, quien hizo una corta presentación aplicando un codebreaker en los momentos finales de Raw).
La división de parejas en Raw tiene una profundidad vergonzosa después del regreso de The Hardy Boyz y el debut de The Revival, y con la suma de Slater y Rhyno, parece probable que al menos uno de los grandes nombre de Raw debería moverse en la otra dirección. Ya sea The New Day, como se ha rumorado fuertemente, Sheamus y Cesaro, que todavía pueden terminar sus asuntos con los Hardys, o Enzo y Big Cass, que aparentemente han caído en el camino, SmackDown obtendrá una pieza valiosa para el rompecabezas.
Finalmente, hay una tormenta cocinándose en la división de mujeres. Con Bliss y James moviéndose, lo que queda de la división femenina de SmackDown es Naomi, Bella, Becky Lynch, Natalya y Carmella. Después de perder ante Nia Jax en una descuidada, pero perpetuamente violenta lucha, Charlotte Flair parece ser una candidata probable para reforzar sus filas. Jax misma podría encontrar un montón de representantes y nuevos enfrentamientos, y Sasha Banks podría igualmente encontrar el éxito (aunque parece que una batalla ante Bayley es inevitable). Sin embargo, con Dana Brooke despreciando los avances de Emma en una reunión el lunes por la noche, un cambio al martes para Emma podría permitir un par de convocatorias de NXT - Peyton Royce y Billie Kay - que tendrían fuerza en números y crearán un rato establo femenil que tendría fuerzas por sus números y un montón de oportunidades creativas.
CUENTOS DE LO SOBRENATURAL
El debut de Wyatt en Raw fue sin duda el más impactante de todos, considerando su actual trama y la próxima lucha de 'Casa de Horrores' contra Randy Orton por el campeonato de la WWE. En un mundo donde The Undertaker parece estar fuera para siempre, fue tremendo ver que algunos sutiles elementos sobrenaturales podrían ser puestos en juego cuando Wyatt se enfrente a Finn Balor sin proyectar insectos al azar en el ring.
Entre el personaje de "demonio" de Balor y las "habilidades" de Wyatt hay mucho para trabajar, y las imágenes por sí solas serán impresionantes durante el conflicto. Mientras que Wyatt parece dirigirse hacia otro conflicto que no puede ganar, basta con mirar a Balor rodeado de "luciérnagas" de Wyatt en la multitud el lunes por la noche para ver lo divertido que será el viaje.
FALLOS Y ACIERTOS
• Seth Rollins parecía dirigirse por consenso a SmackDown, pero su discurso y la interacción con Kurt Angle, prácticamente le aseguró un rol continuo en Raw. Ciertamente no va a ser el empleado del mes, y las escaramuzas con Samoa Joe y, finalmente, la Autoridad, una vez que regresen, son inevitables, pero su justificación al no querer tomar nuevamente la salida fácil sonó bastante real.
• The New Day tratando funcionar bien sin Kofi Kingston fue un éxito en la Semana 1, con Xavier Woods pedaleando lentamente el carrito de helados y Big E llevando el muñeco "Kingston" para llenar el vacío. The Revival y The New Day hicieron otra gran demostración, y las victorias consecutivas para The Revival sobre los campeones en parejas más duraderos es una tremenda presentación. Sus camisas personalizadas, rememorando a a Greg Valentine y el Braggadocio de Owen Hart para infligir lesiones, fue un toque encantador.
• Sami Zayn vs The Miz fue una lucha divertida, y el que Zayn lograra una victoria a pesar de todas las intervenciones de Maryse es una interesante situación. Vamos a ver cómo se ve una vez que el polvo de la sacudida se haya asentado.
• "The Drifter" hizo su primera aparición con un sutil paseo por la multitud durante la lucha de Flair-Jax fue genial, pero Samson caminando a la derecha de la mesa de comentaristas previo a la lucha cuatro contra cuatro fue demasiado obvio. Entregarle a Corey Graves uno de sus objetivos favoritos es sin duda una ventaja.
• El viraje de TJ Perkins al lado oscuro es un cambio bienvenido y derrotar al primer clasificado Austin Aries fue un gran momento para hacerlo. Es una inyección muy necesaria de personalidad, y podría ser interesante ver a Perkins convertirse en algo de un aliado de confianza para Neville.
• No estoy seguro qué ver con el intercambio de Byron Saxton y David Otunga entre los equipos de Raw y SmackDown. En papel, Saxton, JBL y Tom Phillips realmente no tienen química, y lo último que SmackDown necesita en este momento en particular es a JBL molestando eternamente a Saxton, que parece ser un costal de golpes de los comentaristas, no importa dónde esté.
MOVIDA DE LA NOCHE
The Revival no acertó el "Shatter Machine" tan limpiamente como probablemente le habría gustado, pero el visual de Woods volando desde la cuerda superior directamente a la rodilla de Dash Wilder fue impresionante.