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Andre The Giant presenta las diferentes facetas del luchador

La vida de Andre The Giant es resumida en un documental a transmitirse por la cadena HBO Russell Turiak/Getty Images

LOS ANGELES -- Muchos conocieron la carrera de Andre The Giant como uno de los más reconocidos hombres grandes en la lucha libre, en lo que aparentaba ser una vida de admiración y de victorias a granel.

Poco se conoció sobre su personalidad fuera del ring, así como de las vicisitudes que le trajo la vida al ser un hombre de sobre 7 pies de estatura y más de 500 libras de peso. Y el documental Andre presenta precisamente el otro lado de la moneda: su personalidad, sus sufrimientos y el triste final de su carrera y su vida.

El luchador, cuyo verdadero nombre es Andre Roussimoff, nació en los suburbios de Paris, contrario a su presentación que señalaba era oriundo de los Alpes franceses. El largometraje, producido por el periodista Bill Simmons, divide la vida de Andre en sus inicios, sus años de gloria y su caída y triste final.

"Este fue uno de mis sueños, de la época que hacíamos 30 for 30", explicó Simmons, quien laboró muchos años en ESPN. "Siempre creí que este sería uno de los documentales más vistos en deportes. Es una oportunidad de presentar su historia".

Como en muchas de las historias de legendarios luchadores, Roussimouff no empezó en la lucha libre. De hecho, practicaba el rugby y su conexión con el cuadrilátero vino porque entrenaba en el mismo gimnasio que luchadores del área y un día otro luchador se enfermó. Ahí nació Giant Ferré, una divergencia del personaje folclórico francés Grand Ferré.

Para la época en que comenzó Roussimouff en lucha libre, a fines de su adolescencia, no había desarrollado totalmente su corpulencia, producto de gigantismo. No fue hasta varios años después que se dirigió a América, debutando en Canadá como el gigante Jean Ferre, pero luego de varios meses, su presencia dejó de ser novel, lo que lo llevó a viajar por diferentes territorios en Estados Unidos.

En la década de los 70 y parte de los 80, el documental presenta cómo André The Giant comenzó a llenar arenas en los diferentes territorios, en donde pasaba unas semanas y se movía adelante. En aquella época, los promotores hacían programas televisados para las diferentes regiones y nunca a nivel nacional. Cuando la WWE llegó a ese nivel y firmó a tiempo completo a Roussimouff, ese fue el comienzo del final de los territorios.

"Tocamos todos los aspectos de su vida", añadió Simmons. "Creo que eso será lo mejor del punto de los historiadores, del hecho de los territorios. Él fue una de las razones por la que explotaron los territorios".

La producción lleva el flujo del documental al aspecto humano, en donde presentan los problemas del luchador en los acciones, aeropuertos, hoteles y restaurantes. André se veía forzado por su corpulencia a utilizar dos asientos, algo que incomodaba, tenía que aguantar las burlas en los aeropuertos y sufrir la ausencia de camas que le permitiesen descansar su enorme cuerpo.

El documental toca además sus excesos en cuanto a comida y bebida, destacando que tomaba diariamente varias botellas de vino. Además, presenta su prominencia en los vestidores, citando ejemplos de luchadores como los difuntos Randy Savage y John Studd, a quienes despreciaba y con quienes no aguantaba la fuerza de sus golpes.

Sus viajes lo llevaron a mantenerse algo alejado de establecer una familia. En la producción se destaca que llegó el momento en que prefería encerrarse en el campo en Ellerbe, Carolina del Norte, en donde era una figura conocida y nadie se impresionaba por su físico. Su hija, Robin Christensen, heredó la propiedad aun cuando apenas tuvo tiempo de interactuar con ella.

"Estoy pendiente de escuchar una fabulosa historia y que puedan ver la persona qué era y no su imagen, explicó Christensen previo al estreno del documental. "Creo que lo humaniza más. Va más allá del personaje de Andre The Giant. Extraño que nunca pudimos desarrollar una relación larga".

El largometraje además documenta sus últimos años, en donde luego de hacer el papel de técnico durante casi toda su carrera, hizo un viraje al bando rudo para hacer el pase de antorcha a la figura más relevante de la década de los 80 y parte de los 90: Hulk Hogan.

Aunque muchos de los luchadores actuales no lo conocieron o apenas pudieron verlo en persona, no dejó de ser un ejemplo para hombres grandes como Mark Henry y Paul Wight, quien lucha bajo el personaje de The Big Show.

"Es un gran ejemplo para los hombres grandes. Ahora son muchas volteretas y brincos, pero lo constante ha sido el hombre grande", afirmó Henry, recién retirado y exaltado al Salón de la Fama de la WWE. "Roman (Reigns) ahora es el más grande, The BIg Show fue el ejemplo para mí. El y Andre te hacían sentir wow, puedo ser eso".

Wight solo tuvo elogios para el Andre, quien se retiró en 1992 y falleció un año después cuando asistió al funeral de su padre.

"La cosa de Andre para mí era su manera de cautivar la gente. En los aeropuertos, los restaurantes, él tenía la presencia y el comando de todo", apuntó Wight.

El también luchador Rey Mysterio definió quizás de mejor manera la importancia de la producción, que estrena el 10 de abril en la cadena HBO.

"Es increíble, el poder tener un documental de tu vida, de tus logros, lo que has hecho por el deporte, llevarlo al cine", dijo Mysterio. "Creo que la afición de hoy en día se dará cuenta de lo difícil que era en aquellos tiempos llegar a una empresa y mantenerse vigente especialmente con el peso que cargaba él".

El documental incluye además entrevistas a Vince McMahon, propietario de la WWE, Hulk Hogan y el retirado locutor Gene Okerlund, entre otros.
La cosa de Andre para mí era su manera de cautivar la gente. En los aeropuertos, los restaurantes, él tenía la presencia y el comando