Los Dodgers de Los Ángeles, quedaron eliminados de la postemporada 2015, al caer en el quinto y definitivo duelo de la Serie Divisional, frente a los Mets de Nueva York, que terminaron por imponerse con pizarra de 3-2, este jueves, en las Lomas de Chávez Ravine.
De esta forma, mientras Don Mattingly y su tripulación inician unas penosas vacaciones, los diridos por Terry Collins ya tienen una cita para iniciar la lucha por el título de la Liga Nacional, a partir del próximo sábado, frente a los Cachorros de Chicago.
54,602 espectadores, que apoyaron a los suyos en todo momento, terminaron enmudeciendo, al ver a su equipo caer, en la misma fecha, un 15 de octubre, pero de 1988, en que Kirk Gibson daba aquella dramática victoria a los Dodgeres, con su vuelaceras, en el primer juego de la Serie Mundial, frente a los Atléticos de Oakland.
Como se esperaba, la contienda fue un duelo entre dos grandes lanzadores.
Por los Dodgers, Zack Greinke tuvo una labor de 6 episodios y dos tercios, en los que le dispararon 6 hits, buenos para 3 carreras, mientras ponchaba a 9 y entregaba un pase de cortesía.
En tanto, por los neoyorquinos, el diestro Jacob deGrom lanzó durante 6 episodios, permitió 2 anotaciones, con 6 imparables. Caminó a 3 y ponchó a 7.
Durante el juego, también apareció, en el séptimo acto, el otro abridor pincipal de los Mets, Noah Syndergard.
Daniel Murphy fue la figura destacada de los Mets, en cuanto a su producción ofensiva, con tres imparables en cuatro turnos, incluyeno un bambinazo que marcó la diferencia, además de encargarse de anotar la segunda carrera de su equipo.
En el sexto acto, el segunda base del equipo que orienta Terry Collins, Daniel Murphy, con la cuenta máxima, mandó la bola a perderse con los aficionados sentados detrás de la esquina del jardín derecho, para poner a los Mets adelante, con pizarra de 3-2, con su tercer vuelacecas en la serie.
METS PEGAN PRIMERO
Los Metropolitanos habían abofeteado primero y fue en el acto inicial.
Kike Hernández se resbaló al fildear el batazo de David Murphy, quien mandó la bola a restregarse contra la cerca, entre los jardines izquierdo y central.
Joc Pederson había ido por ella, pero el batazo lo superó, y cuando Kike atrapó la bola, en el rebote, al intentar girar para mandarla al cuadro, se resbaló, y eso abrió la puerta para la primera anotación, consumada por Curtis Granderson.
A Hernández le cargaron un error en la jugada.
Todo había iniciado con un batazo al cuadro de Granderson, al que el propio Greinke intentó cortar, lanzándose como un lince, al terreno de juego, pero sin poder capturar la bola.
Intervino entonces el segunda base, Howie Kendrick, pero su apresurada asistencia a Adrián González fue tardía y el corredor llegó a salvo a la primera almohadilla.
LA REACCION
Pero en el cierre del mismo primer acto, los dueños de casa le dieron la vuelta al marcador, anotando dos veces, en los bombachos de Corey Seager y de "Titán" González, que llegaron a la registradora impulsados por sendos sencillos de Justin Turner, por la línea de cal del jardín derehco, lo mismo que un elevado corto de Andre Ethier, que aterrizó atrás del campo corto.
DESPISTE
La segunda anotación de los neoyorquinos, fue producto de un despiste total, de párvulo, por parte de Greinke. Murphy inició todo con un sencillo por la derecha. Luego, ya con un out, Greinke caminó a Lucas Duda.
Murphy, obviamente, avanzó a la intermedia. Pero mientras Zack recibía la bola de su receptor y regresaba al montículo para seguir con su labor, perdió de vista al corredor de segunda, pues Murphy se siguió de frente, tan tranquilo, y en forma descarada, se apoderó de la antesala, desde donde anotó con un elevado de sacrificio de Travis d’Arnaud, por el sector derecho.
MARCA DE TURNER
En el tercer episodio, el antesalista de los Dodgers, Justin Turner, disparó su quinto batazo de dos esquinas en la serie, por la línea que delimita la parcela izquierda, para imponer una nueva marca de dobles para la franquicia azul, en series de postemporada.
Orel Hershiser fue el encargado de lanzar la primera bola, mientras que su receptor, era Mike Hatcher, otro integrante de aquel equipo campeón de la Serie Mundial de 1998.
‘El Buldog’ fue el lanzador ganador en el duelo decisivo de aquella Serie de Campeonato que los Dodgers le ganaron a los neoyorquinos, para avanzar al Clásico de Otoño.