Kike Hernández, el multifacético pelotero de los Dodgers de Los Ángeles, era el rostro mismo de la derrota, este jueves, en el vestuario del equipo de Chávez Ravine, luego de que los angelinos fueran eliminados en la Serie Divisional, por los Mets de Nueva York, este jueves.
Y cuando ESPN le preguntó porqué se encontraba tan triste, replicó: “Porque me voy para mi casa, porque perdimos, porque nos eliminaron. No hay ningún pensamiento positivo ahora mismo”.
Luego tratamos de animarlo un poco, recordándole sobre su entrega, su esfuerzo en la defensa de los colores del equipo.
“No, siento que no hice lo que tenía que hacer, porque se me presentaron oportunidades de traer carreras y no lo hice y terminamos perdiendo por tan solo una carrera”.
Pero, de igual forma, tuviste cosas buenas durante la temporada.
“Todo lo que hice de bueno en el año, ahora mismo, no me importa, porque todo lo he borrado con un juego malo que he tenido hoy”, insitía Kike, con el rostro hundido entre sus manos, con los ojos enrojecidos, sin poder olvidar su error del primer acto, que costó una carrera al equipo azul.
YASMANI GRANDAL
Mientras tanto, el receptor Yasmani Grandal, en el otro extremo del vestuario del equipo, hablaba de su inminente cita con el quirófano.
“Me van a hacer sólamente una limpieza, no se trata de una operación mayor. Lo que quiero, es resolver esto de una buena vez por todas”, detalló el pelotero cubano, quien intervino en el juego, para recibir los lanzamientos de Zack Greinke, a pesar de venir padeciendo una lesión en su hombro izquierdo.
“Esta es una etapa de la temporada en que no puedes pensar en quedarte sentado en un juego, había que salir a jugarlo, y así lo hice”, dijo Grandal, entrevistado por ESPNDeportes.
¿Son tan buenos deGrom y Syndergaard?
“Yo pienso que hicieron un magnífico trabajo. Son jóvenes que tienen muy buen brazo. Hoy terminamos siendo derrotados por ellos, pero esperamos volverlos a enfrentar en el futuro”, puntualizó.
En cuanto a lo que ha sido su primera campaña con la organización angelina, Yasamani dijo sentirse muy bien, a pesar de la forma en que terminó.
“Estoy felíz de jugar para esta organización. Me gustó mucho y tengo que agradecer a todos los que hicieron posible mi llegada a los Dodgers. Por darme la oportunidad de estar en esta posición. Me quedo con grandes recuerdos de este mi primer año en el equipo y a partir de la próxima semana, me sentaré a evaluar todas las cosas que hice bien, y lo que hice mal”.
El receptor cubano también comentó que la serie fue muy pareja y que pudo inclinarse a favor de cualquiera de los dos equipos.
“En esta clase de series, cualquiera puede ganar o perder. He visto equipos muy buenos perder en series importantes y a otros ganar frente a equipos aparentemente superiores. Me viene a la cabeza la serie de los Marlins frente a los Yanquis, en el 2003”.
Asimismo, Yasmani Grandal considera que esta temporada que experimentó jugando para los Dodgers, lo ha ayudado a establecerse como un receptor confiable.
“Ofensivamente, siento que no hice cosas tan buenas, pero como receptor, considero que hice una buena labor y esa experiencia que obtuve este año, me convertirán en un mejor receptor para el futuro y por eso espero ansiosamente el regreso para el 2016”.
KENLEY JANSEN
Mientras tanto, el taponero curazaleño, Kenley Jansen, quien no quiso referirse a lo que pudiera ser el futuro del timonel Don Mattingly, prefirió decir que él confía en que muy pronto, los Dodgers regresarán a la disputa de una Clásico de Otoño, algo que se les ha negado por los últimos 27 años.
“Amo este equipo y lo veo llegando muy pronto a la Serie Mundial. Siempre que logras estar en la postemporada, te visualizas jugando la Serie Mundial. Tenemos que continuar jugando así, porque uno nunca sabe cuando nos puede llegar”, expresó el cerrador caribeño de los Dodgers.