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La judoca Paula Pareto se despide desde Tokio: "Di todo lo mejor"

La judoca argentina Paula Pareto cayó ante la portuguesa Catalina Casta en la repesca de 48 kg en el torneo olímpico de los Juegos de Tokio, poniendo fin al sueño de revalidar el oro que logró en Río.

La campeona brasileña del Grand Slam Brasilia de 2019 se impuso por "waza-ari" en un reñido combate con la campeona olímpica argentina, que no logró clasificar para medalla en los Juegos de Tokio.

Comenzó con fuerza esta jornada en la casa de las artes marciales, el Nippon Budokan, donde demostró su buena forma y se impuso por “ippon” ante la sudafricana Geronay Whitebooi en la primera ronda, para más tarde derrotar en apenas dos minutos a la eslovena Marussa Stangar.

Sin embargo, perdió ante la número 3 de la clasificación mundial, la japonesa Funa Tonaki que se impuso por "ippon" a la campeona olímpica de Río y finalmente cayó derrotada contra la portuguesa.

A pesar de "dar todo lo mejor" hasta el final, no ha sido posible para la judoca argentina, campeona olímpica en Río 2016, subirse al podio de Tokio, unos Juegos que ponen fin a su carrera deportiva en la competición de 48 kg.

Antes de poder optar al bronce cayó derrotada ante la portuguesa Catarina Costa que la venció con un "waza-ari" en el Nippon Budokan, la casa de las artes marciales.

"Esta es la última competencia, empujé mi cuerpo hasta aquí, creo que di todo y fui fiel a mis principios de siempre" afirmó tras el último combate en un dojo olímpico.

La médica y judoca Paula Pareto se despide de la competición tras alcanzar el bronce en Pekín en 2008 y consagrarse como la primera argentina de oro en Río 2016, además de ser una de las mejores deportistas que ha dado América Latina.

La judoca argentina destacó en la ceremonia de apertura de los Juegos la noche anterior, portando la bandera Olímpica en representación de su región y como símbolo de la lucha anticovid en el mundo, "un honor" y "una última sorpresa deportiva", afirmó emocionada.

"Estoy triste porque a ningún deportista le gusta perder, pero también feliz porque he recibido muchos mensajes de apoyo más allá de los logros deportivos", afirmó apenada pero serena la argentina.

Sobre su rival opina que "fue mejor, era su momento y me ganó".

"Me sentí bien en la competición" dijo en relación a sus últimas lesiones sufridas en los últimos años.

Aunque en entrevista con Efe al llegar a Japón dijo que “La energía se siente”, este sábado en un Nippon Budokan vacío, la atleta no pudo alcanzar su último sueño olímpico.