Futbolísticamente nació en uno de los clubes con mayor presión en México, pero eso lo forjó desde joven a lidiar con los reflectores y las críticas para salir adelante. En la actualidad, Guillermo Ochoa es el guardián por excelencia del futbol mexicano, que ha librado batallas únicas para trascender en Europa.
Titular del América desde sus escasos 18 años, Ochoa ha evolucionado al grado de ser unas de las manos más seguras del país. Desde sus primeros años como profesional destacó por sus reflejos y su habilidad de llegar a balones que parecían imposibles de alcanzar.
La seguridad que brindó aquel joven Ochoa valió para que Adolfo Ríos saliera de la portería y continuara su camino con destino al retiro, además de que arqueros argentinos como Sebastián Saja terminaron por ser desechados ante la calidad de ese joven de cabello rizado y manos seguras, que se propuso no dejar de pelear por su puesto en el equipo que estuviera.
Criticado por muchos y envidiado por otros, el portero del Standard Lieja salió de México en busca del éxito en Europa y su andar no ha sido sencillo, luego de descensos y momentos en el banquillo con los cuales luchar en sus etapas en Francia y España. Ahora prueba suerte en Bélgica, donde ya ganó su primera Copa.