A Martín Di Nenno (Argentina, 24 años, número 3 del ránking mundial de pádel) lo espera una marea de personas que, valla de por medio, le suplican por una foto, un autógrafo, su firma en una remera. Les dice que sí a todos, pero les pide paciencia. Primero va a saludar a su novia, Camila, y a su sobrina, Francesca, una pequeña de 4 años. Después, charla un rato con ellas y el resto de su familia.
Ahora sí, encara para donde está la marea. Se saca una, dos, 50 fotos. Con bebés, con niños, con adultos. Firma una docena de camisetas. A todos con un "hola" y una sonrisa.
A las puertas de jugar la final del Buenos Aires Padel Master, en La Rural, su popularidad está en el punto máximo. Será la séptima definición consecutiva de World Padel Tour (WPT) que dispute, todas al lado del español 'Paquito' Navarro, uno de los jugadores más reconocidos del planeta.
Una media hora después se saca la última foto y arranca la charla exclusiva con ESPN.com.
-La gente te ama... ¿Esperabas algo así?
-La verdad es que me imaginaba un gran recibimiento, pero no así, esto superó mis expectativas.
El público me tomó mucho cariño, imagino que un poco por lo que me pasó hace unos años (se refiere al accidente automovilístico que lo dejó con las dos piernas fracturadas y en el que fallecieron el por entonces Nº1 de Argentina, Elías Estrella, y otro amigo). También por el presente que estamos pasando con Paquito. Recibo afecto en todos lados: en redes sociales, cuando me ven...
-Acá en Argentina siempre fuiste muy querido, pero da la sensación de que, de la última vez que jugaste un torneo acá hasta ahora, eso se multiplicó.
-Sí, yo también noto un cambio. La gente me brinda su apoyo y yo no tengo palabras para agradecer tanto cariño más que sacarme una simple foto con ellos, firmales una remera. Esa es la manera, aunque sea mínima, que encuentro de devolverles un poco de todo lo que me dan.
La temporada 2021 fue de muchas emociones para Di Nenno. Al gran presente junto a Navarro en el circuito profesional, la semana pasada se sumó otro capítulo intenso.
Fue parte de la Selección Argentina que terminó subcampeona en el Mundial de Qatar, y allí disputó uno de los puntos de la final ante España junto a Fernando Belasteguín, para muchos el mejor jugador de la historia.
En un partido de muchas idas y vueltas, Di Nenno-Belasteguín cayeron ante Navarro (compañero de Martín en el circuito profesional) y Juan Lebrón (actual Nº1 del mundo) por 6-2, 3-6 y 7-5.
-¿Cómo fue jugar al lado de Bela y defendiendo la celeste y blanca?
-Más allá de la derrota, el hecho de haber estado punto a punto con Paquito y Lebrón, que fueron pareja Nº1 del mundo en 2019, y a mi lado una leyenda como es Bela, que como siempre digo para mí es el mejor de la historia, fueron muchas emociones.
Disfruto mucho de cada cosa que vivo y estar al lado de él en la Selección fue un orgullo.
Lo emocional juega su papel, pero el pádel sigue y sigue. Apenas terminó el Mundial de Qatar, Di Nenno cruzó en avión medio planeta para volver a su país, a sus afectos. Y también para disputar después de tres años la fecha porteña del World Padel Tour (en 2020 no se realizó por la pandemia y en 2019 él no había logrado clasificar).
El 2021 es el año de la consagración de este joven que a los cuatro años ya tenía una paleta de pádel en la mano porque sus padres son los dueños del club El Solar en Ezeiza.
Estrella de las categorías juveniles junto al chaqueño Franco Stupaczuk (hoy Nº10 del ránking WPT), rápidamente se convirtieron en los líderes del circuito profesional autóctono en los primeros años de la década pasada. Se los conocía como 'Los Superpibes'.
Luego de recuperarse del accidente ya mencionado, se fue a jugar el World Padel Tour a Europa, el destino inexorable de todos los grandes profesionales.
Pero este año logró lo que nunca antes: empezar a estar de forma habitual en las instancias decisivas de los torneos WPT.
-¿Cómo se hace el click para dejar de lado algo tan fuerte como el Mundial y a los pocos dias concentrarse en el torneo que se juega en tu país?
-Nosotros tomamos cada torneo con mucha responsabilidad, intentamos estar siempre en instancias finales. La semana pasada tocó con la camiseta de Argentina, esta vez por nosotros y por nuestro equipo en el WPT.
El marco en Qatar era impresionante, pero acá en Buenos Aires también tiene su pizca especial y yo lo disfruto mucho porque estoy con mi familia y mis amigos.
-¿Te imaginabas este presente con Paquito?
-Desde la segunda mitad del año tuvimos una explosión que ni nosotros nos la esperábamos. Y eso que no habíamos arrancado bien la temporada.
Con Paquito aspiramos a seguir con la misma racha que traemos. Estamos cumpliendo con el objetivo que nos pusimos a principio de año: jugar instancias finales.