Entrevista con Hernán Darío Gómez

Víctor Velázquez tuvo la suerte de entrevistar al "Personaje del Año" en Ecuador...

ENTREVISTA : HERNÁN DARÍO GÓMEZ

Víctor:
Todo tiene un inicio y en su vida el fútbol fue fundamental, háblenos, cuando nació el fútbol para Hernán Darío Gómez.

Hernán:

El fútbol nace como de mi padre, es una pasión. Desde peladito mis 2 hermanos y yo pues, siempre estuvimos metidos, involucrados en el fútbol, porque mi papá era directivo, jugaba fútbol, inclusive nos hizo una casa cerquita al Estadio Atanasio Girardot, donde nosotros teníamos la posibilidad de ir a ver entrenar los equipos y fue resultando una pasión Víctor, una pasión que, que desde me conozco y tengo uso de razón no la olvido nunca.

Víctor:

Y usted tocó un nombre que para los Antioqueños y para la gente de la Dirigencia Deportiva de Colombia le guardamos un gran recuerdo, Don Hernán Gómez Agudelo.

Hernán:

Muy poquitas veces me alabó cuando jugué fútbol, él disfrutó más hasta que se murió hace 2 años cuando yo era técnico, ahí disfrutó más, y ahí teníamos un diálogo distinto pero ya era mayor, pero mi papá si fue el hombre que nos encaminó a todos, no solo a mí, sino a mis hermanos al estilo de él, a ser gente sana, gente honesta, gente que quiere trabajar, gente que ayuda.

Víctor:

Después de desmembrarse del profesionalismo como jugador activo, aparece un nombre, Francisco Maturana, "El Odontólogo", quien tuvo la idea de juntar los dos cerebros más importantes de las últimas décadas en el fútbol de Colombia.

Hernán:

En el año '85 cuando yo me retiré, '85, '86, era técnico Juan Martín Mojica y Esteban Gesto y empezando la pretemporada del '85 me lesione el ligamento de la rodilla. Tobón me decía que me tenía que operar y yo, no, no, yo más bien me retiro, entonces el profesor Gesto y Don Juan Martín Mojica me dijeron no, no se retire, aquí hay unas divisiones inferiores, ahí está Pacho Maturana y nosotros creemos, pensamos que usted puede ser un hombre que nos ayude en Divisiones Inferiores, me sonó y ahí fue donde empecé a trabajar en el año '85, '86 con Pacho en las Divisiones Inferiores de Atlético Nacional.

Víctor:

Bueno, Pacho y Hernán, devuelven a Colombia un sueño, el sueño de regresar a los Mundiales. Pero antes de los Mundiales hay un capitulo de Atlético Nacional, La Copa Libertadores de América.

Hernán:

Si, eso yo creo que es de los recuerdos más lindos que tenemos nosotros Víctor. Porque nosotros cuando unos directivos con Sergio Naranjo y unos que lo acompañaron empezaron, contrataron a Pacho como Técnico del equipo profesional, existía Hugo Gallego, estábamos Nelson Gallego, estaba yo, después en el '87 vino Pacho y ahí fue donde empezamos a trabajar y nos pusimos a mirar nosotros que, nosotros somos un país alegre, entonces nosotros dijimos, nosotros lo que tenemos que hacer es divertir al país, divertir a la gente y empezamos a armar un grupo, una familia a enseñarle a vivir, enseñarle a trabajar como profesionales del fútbol y fuimos llenando ese estadio Víctor y se fue llenando de alegría, como lo que pasó más o menos en Ecuador y ese estadio se lleno de alegría. Y fue una energía tan bonita y tan buena que nos llenamos de confianza y seguridad y así fuimos elaborando esa Copa Libertadores, que es el recuerdo más grande que podemos tener porque es el primer triunfo grande de Pacho y mío como técnicos internacionales.

Víctor:

Llega '90, '94 y '98, dos de ellos como asistente Técnico y uno como Técnico en propiedad y el sueño de Colombia se hace realidad.

Hernán:

Fue fundamental ganar la Copa Libertadores Víctor, porque recibíamos mucho ataque, porque la base de la selección Colombia era de "paisas", afortunadamente ganamos La Copa y nos dio seguridad y empezamos esa eliminatoria, al Mundial de Italia fue más dura. La de Estados Unidos fue muy hermosa, esa fue, terminó brillante, acuérdese con el 5-1.

Víctor:

Podrá haber sido la de Italia muy dura, pero hasta lágrimas a los periodistas nos sacó aquel Mundial, porque recuerdo todavía estando en el estadio, en el partido frente Alemania…

Hernán:

No yo digo la eliminatoria.

Víctor:

Ah, la parte eliminatoria, sí, sí, sí, claro, indudablemente.

Hernán:

El mejor Mundial fue el de Italia, el mejor Mundial fue el de Italia porque empezamos con Arabia fue creo Víctor, no sé, ganamos 2-0 un partido.

Víctor:

Sí, con Arabia y el Segundo gol del "Pibe" Carlos Valderrama.

Hernán:

Exacto, después perdemos con Yugoslavia 1-0 y llegamos a un tercer partido con Alemania, donde terminando el partido, estábamos haciendo un partido brillante, inclusive mejor nosotros que los alemanes, que quedaron campeones en ese torneo y se hace ese 1-0 en contra, inmediatamente nosotros reaccionamos y se hace el 1 a 1, eso fue hermoso, eso fue como un título, en Colombia se lloró, se festejó…. Pero después tuvimos un error casi para enfrentar a Camerún al otro día donde el grupo se dividió un poquito, se habló de premios, que no había posibilidades de un premio que se había prometido, se desvió un poquito la situación y perdimos el partido.
Víctor:

Se nos fue la concentración, como se llama dentro del fútbol.

Hernán:

Si, si, estábamos en el estadio de Nápoles Víctor, en la mitad del estadio. Pacho inclusive estaba regañando a los muchachos porque estaba el equipo distraído pensando en otras cosas y no en la posibilidad de ganarle a Camerún.

Víctor:

Parte de la historia y todo eso le tuvo que haber dejado a Hernán algo muy positivo para lo que es su carrera actual.

Hernán:

Me fue, me da la impresión que me dejó más el Mundial de Estados Unidos, porque hacemos una eliminatoria brillante y hacemos un mundial horrible, pero antes entre el tiempo de eliminatoria y Mundial jugamos cualquier cantidad de partidos Víctor, le ganamos a todo el mundo. Aquí todo el mundo decía que era el campeón del mundo y el equipo no pudo con esa responsabilidad, ni el equipo, ni los técnicos, ni los directivos y fue una enseñanza que nos dio la vida de que las cosas son más tranquilas, que hay que tener historia; a mí ese Mundial me dejó más cosas que cualquier otra vaina.

Víctor:

Eso en cuanto a ese Mundial, a usted le toco el '94 y no se me puede escapar alguien que es parte de la historia que para usted significa muchísimo, para mi y para todos los colombianos y para la familia del fútbol, Andrés Escobar Saldarriaga.

Hernán:

Eso es amargura hablar, cada vez que uno tiene que hablar de Andrés es un dolor intenso porque antes que jugador de fútbol Andrés era mi amigo, amigo personal, o sea yo me acuerdo muchas cosas con Andrés porque en el año '91 yo dirigía Nacional y Andrés era jugador de Nacional en esa época y estábamos Víctor de trece, faltaban cuatro fechas para terminar el torneo y entrar al Octogonal y Andrés iba todos los días pa' mi casa a jugar con Daniel al fútbol, entonces yo tengo recuerdos grandes, iba a la finca mía, nos reuníamos, salíamos a comer…entonces para mi Andrés como futbolista, tengo muchas anécdotas pero como amigo personal tenía muchas cosas que me llegaban al alma, a mi…yo todavía no salgo del dolor y la tristeza de la muerte de Andrés.

Víctor:

Ya pasamos esa etapa y llega el año 1999 y…

Hernán:

Oye, no, Francia que fue un año muy duro.

Víctor:

Si, el '98 fue muy duro y de pronto…

Hernán:

No, no sobretodo porque no, más la eliminatoria Víctor porque me tocó coger el equipo, osea el equipo pa' Italia de nuevo, pa' Estados Unidos ascendiendo y pa' Francia descendiendo, más berraco clasificarlo descendiendo que eso fue lo que hicimos y la gente no valoro eso. En el año '96 me dieron a mí el titulo del técnico de América porque fuimos invictos todo el año y en el '97 el equipo empezó a descender y en el '98 fuimos a un Mundial a Francia donde dijeron que fracasamos porque perdimos 1-0 con Rumania, 2-0 con Inglaterra en Europa, yo terminé el Mundial de Francia y yo no, yo desilusionado por las injusticias, por lo desagradecido de la gente, porque cada vez que íbamos a un Mundial era a esconderse, Pacho, yo, todos los jugadores, el "Pibe", nos teníamos que esconder, o sea no se acordaban de nada, entonces yo estaba aburrido, no quería saber más nada Víctor, hasta que Leonel Montoya me llamó a la casa y me dijo que si quería ir a Ecuador, una buena propuesta también y ya tenía ganas como de salirme del país, ya tenía inconvenientes, bueno hablé con Leonel y hasta que un día no volví a hablar más con Leonel y me llamó el presidente Luis Chiriboga y conversé con él y en cinco minutos me dijo que si quería venir a Ecuador y yo le dije si presidente yo me quiero ir para allá, entonces yo voy a hablar con el directorio y después lo llamo para que se venga pa' acá, en 2, 3 días cogí me fui y no volví más.

Víctor:

Proceso eliminatorio, háblenos un poquitico de todo ello, porque Quito se convirtió en un fortín, prácticamente era imposible vencer la Selección de Ecuador, pero no fue allí solamente, Colombia pagó consecuencias como local, Bolivia las pagó, Brasil las pagó y si se me queda alguna más, Perú también lo hizo.

Hernán:

Cuando yo llegue a Ecuador Víctor, el primer momento que pisé el aeropuerto yo me quería volver.

Víctor:

Y eso por que...

Hernán:

Porque cuando llegué, un señor ecuatoriano me dijo; a que viene aquí, aquí no hay nada que hacer, esos negros no tienen ñeque. Yo me asustaba, yo decía, después llego a una concentración y veo que el ambiente no es bueno, o sea que hay grupos entre los mismos muchachos, después me doy cuenta que entre los directivos y los jugadores de fútbol hay unas diferencias grandísimas, no se querían para nada, después hacemos un partido y me doy cuenta que el estadio es para ir a insultar la selección, no hay un amor por la selección, entonces nos tocó empezar a trabajar mas en eso que cualquier otra cosa. Afortunadamente me encuentro con un hombre allá que se llama el capitán Luna, Benicio Luna, que si alguien hay que reconocer un grado alto en porcentaje por clasificación es a él. Y empezamos a mirar y darnos cuenta que quienes querían estar y hacer cambiar a los directivos de mentalidad y después empezar a hacer al estadio, la gente quisiera, porque yo decía éste estadio es un sanitario, aquí, toda…yo salía a dirigir el primer partido y me daban ganas…yo vivo afuera del banco y ahí en ese estadio me daban ganas de meterme Víctor, hasta que empezamos a que todo el mundo fuera creyendo, fuera respetando y a que los jugadores se sintieran líderes, nosotros hicimos 32 puntos Víctor, el equipo haría 25, los otros los hizo la afición, el estadio mismo, por la energía, porque íbamos perdiendo con Paraguay y nos sacaron adelante, entonces hicimos amor, solidaridad, tolerancia, pasión y eso fue fundamental para que el equipo se sintiera seguro y sacara ese resultado.

Víctor:

Solo una mancha apareció en el proceso Ecuatoriano hasta ahora y tuvo que ver con un atentado, un vil atentado a la vida suya. ¿Cuánto ha incidido, como pudo superar esa situación tan demasiado difícil Hernán y propender por un regreso en manos de Aguinaga, de Hurtado y del mismo capitán Luna y regresar de su Medellín querido a buscar nuevos desafíos?

Hernán:

Todo el mundo lo toma como una mancha, y la realidad es que se ve como una mancha porque es un atentado donde yo pude haber quedado muerto, pero yo no tuve tiempo Víctor de nada, de nada yo estaba en ese restaurante con Vinicio y llegaron éstas personas a hacernos reclamos muy groseramente y Vinicio es capitán del ejercito y es un hombre fuerte, poderoso y yo no soy miedoso, si me entiendes...

Víctor:

Como buen paisa

Hernán:

Si yo no soy miedoso, sino cuando vi la reacción del tipo yo también…cuando bueno pasó esto, las balas, no me di cuenta las balas, yo recibí un golpe acá, un golpe acá y el medico ya me había dicho que el único, que aquí tenía un hueco, fractura 7 aquí y el cartílago se dañó, que el único problema era éste, porque me estaba sangrando entonces me hizo un torniquete y todo eso y entonces ahí yo le dije no me vaya a dejar morir por eso, por desangrarme, no me vaya a dejar morir, me dijo no, no se preocupe y entonces me metieron a cirugía rápido, ahí ya me privaron, cuando yo me desperté Víctor, lo primero que oigo es, en la ventana es los coros de la gente gritando, Bolillo, Bolillo y la gente se volcó a favor y recibí aprecio y recibí admiración y cariño de todo el país. Unió más el país, o sea y me unió más a mí al país.

Víctor:

Pero con una intención clara y perdóneme que lo interrumpa, se quedaba Hernán en Colombia, en ese momento había tomado la determinación

Hernán:

No, no, yo me fui Víctor y yo vuelvo y le dije a los ecuatorianos, pero va a volver, si yo vuelvo porque esto a mi no me frena, esto a mi y esta manifestación de amor y de aprecio de toda la gente ecuatoriana da para volver porque yo me sentía feliz, Dios me había mandado esto, me dije, Dios me mandó este guarapasito y ésta vaina como para que reaccionáramos más los ecuatorianos y nos quisiéramos más, la noche en que me iba a venir, la noche anterior en que me iba a venir, había un abogado que empieza a decir cualquier barbaridad Víctor, que el que me disparó fue Elquin Sánchez, que nosotros empezamos el problema, no el tipo éste, yo dije, no, pero yo dije no.

Víctor:

Y Elquin no estaba por allí en aquel entonces

Hernán:

No, Elquin había salido al carro a hacer una vuelta, no le tocó, entonces ahí mismo yo dije, no yo no vuelvo, si éste, éste abogado es capaz de meterme algo en el maletín, algo en el apartamento, vos sabes como…alguna vaina de esas, nosotros con esa fama.

Víctor:

Lo que llaman cargar

Hernán:

Exacto, con esa fama que tenemos los colombianos y una señora antes había dicho el cocainómano técnico de la selección ecuatoriana de fútbol, yo dije, éste abogado cualquier cosa me hace, no si nadie para ese abogado yo no vuelvo y lo paro otra vez el país y los directivos y Vinicio y vinieron por mi Alex, Iván Hurtado y Vinicio en un avión particular, llegue allá y otra vez la manifestación Víctor, desde el aeropuerto hasta la concentración.

Víctor:

Y se salvó la clasificación, porque si usted no va, tenga la seguridad que había sido difícil que Ecuador clasificara, se habría venido todo abajo.

Hernán:

Ya había el grupo armado, ya había amor, ya había familias, habían un montón de cosas hechas que por ahí uno se sostiene, pero yo era un líder importante para los muchachos, un hombre que les daba seguridad, entonces yo creo que todos nos necesitábamos en ese momento.

Víctor:

Hay una anécdota que es muy curiosa y que…y fue el partido contra Brasil, usted es muy amigo de los papeles higiénicos, como fue esa anécdota a mitad del partido

Hernán:

Es que el equipo, el equipo ecuatoriano es muy bueno, si me entiendes y yo lo veía, y no era el equipo que yo conozco, me entiendes, con la misma agresividad, la misma alegría, la misma sociedad para recuperar, el orden táctico no lo sostenían y cuando uno está medio nerviosito se le va olvidando todo y se le va quedando sin pierna. Yo llegué con una piedra al camerino Víctor y les dije, bueno se sentaron, le llevé agua a Elquin, lo recuperé un poquito y le dije vea, vea, para mí, para mí, están cagados, tengan éste rollo de papel higiénico, se limpian y salen otra vez a la cancha.

Víctor:

Llega el sorteo, llegó el sorteo de, del Mundial, ya conocemos que Ecuador quedó en el grupo G, que tiene como rivales iniciales a Italia, Croacia, un México que no deja tampoco de dar temor y un Ecuador que tiene muchas ganas.

Hernán:

Cuando salió, nos tocó el grupo, la gente en Ecuador y en Colombia: Huy profe que grupo tan duro, tan difícil, usted como se siente, yo feliz, como así profe, feliz y porqué, ese es el Mundial, el Mundial del país es enfrentar a Italia, a Croacia…

Víctor:

A los mejores.

Hernán:

Claro y México es una potencia, México cada vez que va a un Mundial, no le falta si no escalar más posiciones, pero siempre hace un buen papel México. Entonces Ecuador como equipo nuevo a un Mundial que va a aprender, que tiene que hacer, al menos pa' cambiar camiseta con la gente hermano, es que el Mundial para Ecuador, para que no nos dure poquito empieza desde el momento en que clasificamos.

Víctor:

Los Mundiales son trascendentales, los Mundiales arrojan una gran experiencia, de esa experiencia vivida con Colombia, la aplicación que viene con un grupo humano que usted conoce al dedillo, como va a empezar a planificarla.

Hernán:

A nosotros nos descompuso con el perdón que me merecen todos los periodistas, nos descompuso, la prensa, porque la pirámide se volvió al revés, en el Mundial de Estados Unidos mandaban los jugadores, después los técnicos y después los directivos, estoy tratando que las cosas siguen como es la pirámide, cierto, la gente como tiene que ver, su presidente, sus técnicos, los jugadores, éste grupo de jugadores de Ecuador, es un grupo humilde, es un grupo sano, consciente de las cosas, que está aprendiendo y que se deja llevar por el buen camino, yo sueño con ser campeón del mundo, es mi sueño, yo digo, hay por Dios si le ganamos a Italia o si empatamos y pasamos a la otra ronda y a la otra ronda, uno sueña eso, pero la historia de la realidad puede ser otra, nosotros estamos soñando, pero, pisando donde es.

Víctor:

Profe, le han dicho a usted muchas veces loco, le han dicho, grosero, controvertido….

Hernán:

Mal hablado

Víctor:

Pero también auténtico, le han dicho sensible, gracioso, honesto y muy franco, quien es realmente, el hombre que mejor lo conoce, Hernán Darío Gómez

Hernán:

Soy una persona simple, trato de ser muy simple para vivir muy tranquilo.

Víctor:

Eso es una virtud, eso no es un defecto

Hernán:

Por eso gritarlo, aunque pa' tener la razón, no hay que gritar, no.

Víctor:

Vamos a entrar para la parte final, que significa su hijo Daniel en su vida profesor

Hernán:

Daniel es lo máximo, es mi dolor, es mi alegría, es mi satisfacción, es mi forma de vivir.

Víctor:

La señora Maria Teresa, su madre

Hernán:

Mi ejemplo, mi protección, la aureola.

Víctor:

Fútbol

Hernán:

Pasión y amor.

Víctor:

Ecuador

Hernán:

Uff Mi casa, admiración y respeto.

Víctor:

Colombia

Hernán:

Hmm…Lloro todo el día por Colombia.


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HERNÁN DARÍO GÓMEZ