Los Cavaliers nada más conocer por boca del vicecomisionado de la NBA, Russ Granik, que habían sido los ganadores del sorteo, a través del dueño del equipo, Gordon Gund, dijeron que su selección ya estaba hecha y sería James.

El jugador de 18 años, que horas antes del sorteo, también hizo historia al firmar un contrato por siete años y 90 millones de dólares con la firma comercial Nike, que le pagará un cheque inicial de 10 millones de dólares.

El contrato es el más alto en la historia del baloncesto y el segundo en el deporte profesional de Estados Unidos después de los 100 millones que recibió Tiger Woods por cinco años.

"Estoy emocionado y feliz por los seguidores de los Cavaliers que se merecían tener la suerte de vivir este gran día porque vamos a conseguir al mejor jugador colegial y además un nativo de nuestro estado", destacó Gund.

Mientras, James con varias cintas y símbolos de la Nike en su cuerpo, se presentó a la rueda de prensa para decir que estaba muy feliz de poderse quedar en Cleveland, donde espera vivir su gran reto como jugador de la NBA.

"No voy a garantizar un campeonato", declaró James. "Pero si garantizo que seremos cada día mejor equipo y superior al de la pasada temporada".

James tendrá a su lado el talento de jóvenes valores como Ricky Davis, Dajuan Wagner, Darius Miles, Carlos Boozer, Smush Parker, De Sagana Diop y el lituano Zydrunas Ilgauskas.

El próximo paso de los Cavaliers es conseguir al entrenador que pueda dirigir al que ya ha sido proyectado como el próximo Jordan de la NBA, al menos por el potencial que ha demostrado hasta ahora.

El nombre de Jeff Van Gundy es el que más suena para ocupar el puesto, pero no hay nada definido porque el ex técnico de los Knicks de New York, también quiere saber que es lo que sucede en Houston con la posible marcha del veterano Rudy Tomjanovich.

Pero la llegada de James a los Cavaliers no sólo tendrá un efecto positivo en el aspecto deportivo sino que también en el comercial y de negocios es la gran inversión después de la perdida de millones que ha tenido la franquicia en las últimas temporadas con una asistencia mínima para ver los partidos.

La fiebre por ver a los Cavaliers con el jugador que será su próxima estrella también ha cautivado a los seguidores de otros deportes, como los de los Indios de Cleveland, del béisbol profesional de las Grandes Ligas, que explotaron en una gran ovación cuando estaban en el campo y se enteraron del resultado del sorteo de la lotería.

James, un nativo de Akron, localidad ubicada a 75 kilómetros de Cleveland, ha devuelto la esperanza a toda una ciudad y un estado, que quiere volver a ser protagonista dentro del mundo del deporte profesional estadounidense.

Mientras los directivos de los Cavaliers ya están listos para comenzar a recibir las llamadas de teléfono de los aficionados que quieren desde el primer momento asegurarse la posibilidad de ver a James en acción y desean comprar los abonos para la nueva temporada.

Aunque la noche estelar para James y los Cavaliers será la del próximo 26 de junio cuando oficialmente salga elegido en el sorteo universitario, los efectos comerciales y publicitarios de la figura de moda dentro del baloncesto de la NBA ya han puesto en marcha sus motores.

Nike, que le ganó a Reebok el duelo por los derechos de James, está convencida que el jugador juvenil, que todavía no ha demostrado nada en una competición de importancia como puede ser la universitaria a la que no llegó, espera vender millones de zapatillas deportivas como lo hizo con Michael Jordan.

Expertos en el mercado de la venta de zapatillas deportivas dijo que con la retirada de Jordan, no hay un jugador dentro de la NBA que haya entrado de lleno para ser un vendedor destaco, aunque nombres como Shaquille O'Neal, Kobe Bryant y Allen Iverson son los que tienen más aceptación.

El fichaje de LeBron por la Nike no deja ninguna duda de que la estrategia de la compañía es convertirlo en el próximo Jordan en cuanto a la venta de sus productos y especialmente de las zapatillas deportivas.

La gran incógnita para todos será ver como James desarrolla el potencial que tiene como jugador colegial cuando llegue al nivel de la competición de la NBA y eso es algo que profesionales como el escolta Vince Carte, de los Raptors de Toronto, considera no va a ser nada fácil.

"Todo el mundo está especulando sobre lo que puede hacer cuando llegue a la NBA y la presión será enorme", declaró Carter. "No hay duda que va a ser un gran jugador, lo piensa todo el mundo, pero lo que todavía no se ha visto es como va a desarrollar su potencial".