Miller, que necesita las muletas para caminar, se torció el tobillo derecho en el tercer cuarto del partido amistoso que Estados Unidos disputó el pasado domingo contra Alemania y que ganó por 91-73.

"Lo único que puedo decir es que estoy lesionado y con dolor, pero voy a tratar de jugar", comentó Miller, que el pasado sábado cumplió 37 años.

Su compañero de equipo con los Pacers y con el de Estados Unidos, el ala-pívot Jermaine O'Neal, dijo que Miller es el tipo de jugador que cuando está lesionado nunca tira la toalla sino que lucha al máximo para estar en el campo.

"Después de hablar con él mientras viajábamos en el avión, lo primero que me comentó fue que no quería perderse por nada del mundo la competición y estaba listo para recuperarse lo antes posible", comentó O'Neal.

Mientras en el entrenador, George Karl, se mostró satisfecho con el trabajo que habían hecho durante su preparación en San Francisco y los resultados conseguidos en los dos partidos amistosos disputados contra China, triunfo por 84-54, y Alemania, ambos rivales en la primera ronda del Mundial dentro del Grupo C.

"Lo único que nos perjudicó fue la poca familiaridad que tuvimos en el campo porque los jugadores todavía no se conocen muy bien, pero aprendimos la lección del tipo de rival que nos vamos a encontrar cuando nos enfrentamos a Alemania", valoró Karl.

"Necesitábamos que alguien demostrase que para ganar la medalla de oro hay que luchar en cada partido al máximo", indicó.

Karl admitió que dentro de la competición habrá cinco equipos que pueden competir muy duro y hacerle las cosas difíciles a Estados Unidos, pero estaban preparados para el reto.

"Nunca dijimos que por ser jugadores de la NBA ya teníamos garantizada la medalla de oro, pero tampoco nadie nos va a quitar el valor de ser un equipo con excelentes jugadores y talento que podemos ganar a cualquier rival", subrayó Karl.