Los legados que crearon Title IX
Siete familias discuten los linajes maternos multigeneracionales que han construido en los 50 años desde la aprobación del Título IX.
Legados deportivos creados por el Título IX
Siete familias discuten los linajes maternos multigeneracionales que han construido en los 50 años desde la aprobación del Título IX.
Antes de 1972, las niñas y mujeres que practicaban deportes tenían pocas expectativas de equidad de género. A la mayoría no se les permitía cruzar la línea de media cancha en el básquetbol. Cosían su propia ropa y corrían con zapatos improvisados. Lucharon contra sus administraciones por acceso a equipamiento, transporte y vestidores Ahora, 50 años después de la aprobación del Título IX, la ley federal de derecho civil que prohíbe la discriminación basada en el sexo en cualquier institución educativa que recibe fondos federales, las mujeres atletas tienen más oportunidades que nunca.
En junio, ESPN y The Walt Disney Company está lanzando su iniciativa del "Mes Fifty/50", un amplio plan de contenidos enfocado en la intersección de la mujer, el deporte, la cultura y la lucha por la igualdad.
ESPN habló con las atletas de todas las generaciones de siete familias sobre sus experiencias en la NCAA y más allá. Discutieron cómo las condiciones han cambiado a lo largo de sus vidas y qué tan grande es aún la brecha entre programas atléticos masculinos y femeninos.
[Me siento] afortunada de jugar hoy, de obtener las ventajas por las cuales todas antes que yo, como mi mamá e incluso antes que ella, lucharon tanto”.
Azzi Fudd“
Cómo todo comenzó
Katie Fudd encontró su voz y no tiene miedo a usarla
Cuando reclutaron a Katie Fudd en la década de 1990, ella no tenía mucha información. Había pocos juegos de mujeres en la televisión, los videos de jugadas destacadas no existían, y las jugadoras no podían comunicarse con los entrenadores a menudo. La única vez que ella podía llegar a conocer un programa era si lo visitaba oficialmente.
Ella eligió NC State, donde fue Novata del Año de la ACC, pero luchó por encajar en el equipo. Ella cree que fue porque era tan callada entonces y no sabía cómo defenderse. Se transfirió a Georgetown después de un año.
En Georgetown encajaba mejor, pero le sorprendieron las condiciones en las que jugaban las mujeres. "Viniendo de NC State donde, sinceramente, todo estuvo muy bien ... vas a Georgetown y fue [como si] literalmente nadie existiera excepto el equipo masculino", dijo.
No podíamos caminar por nuestro propio gimnasio cuando los hombres practicaban. ... Ellos no solo caminaban por nuestro gimnasio mientras practicábamos, cruzaban por nuestra cancha”.
KATIE FUDD
Ella dijo que una vez le dijeron que abandonara el gimnasio porque un atleta masculino también estaba ahí -- aunque ella había llegado primero.
En su cuarto año, Katie ya no estaba dispuesta a soportar este trato en silencio. En una clase llena de atletas masculinos y femeninos, dijo: "No me importa cuántos pares de zapatos reciban. No me importa si vuelan en avión privado y tomamos un autobús. ¿Podemos caminar en nuestro propio gimnasio sin que nos echen? ¿Tenemos que sentir que no importamos igual?"
"Hasta el día de hoy, todavía me irrita", dijo.
Cuando llegó el momento de que Azzi eligiera una universidad, Katie presto atención a cómo trataban a las mujeres atletas comparado con los hombres. Ella empuja a Azzi a decir lo que piensa y enfrentar los problemas de frente.
Yo era joven. ... No sabia cómo defenderme. Eso es algo que tratamos de enseñarle a nuestros hijos...”.
[Mi mamá] es partidaria de que abogue por mí misma. ... Son cosas que aprendió en la universidad y trató de inculcarme...”
Cómo le va
Azzi Fudd lleva el legado de su madre -- y su tiro en suspensión
Azzi dijo que creció en el gimnasio, ya que tanto su madre como su padre, Tim Fudd, son entrenadores, preparadores físicos y ex jugadores de básquet universitario. Aunque dicen que ella tenía la opción de elegir su deporte, "No estoy segura de cuánto lo creo," dijo Azzi riendo.
Le dio crédito a sus dos padres por formar su juego. Katie dijo que su mantra era hacer siempre un poco más que todos los demás. Después de una práctica, le decía a Azzi que tomara 25 tiros más o hiciera un poco más de manejo de balón. "Son las personas que están dispuestas a dedicar el tiempo extra todo el tiempo", dijo Katie.
Azzi y su madre tienen el mismo tiro en suspensión, que Katie le enseñó un verano. "Era tan aburrido, pero vale la pena ahora", dijo Azzi. Ella vio una foto de Katie haciendo un tiro en suspensión y luego una foto suya en la prepa. "Nuestros brazos, nuestra forma -- todo se ve exactamente igual".
Azzi no ha visto jugar mucho a Katie, pero durante un viaje de reclutamiento, UConn le mostró clips de su madre jugando contra las Huskies. Ella dijo que cree que le ganaría a Katie, quien fue a la WNBA por una temporada pero nunca jugó por lesión. Sería "un buen juego", dijo Azzi.
"Obviamente soy mejor. Ella es vieja", dijo Azzi. "Pero ella siempre me dice, 'Fui mala. Fui tanto más malvada que tú. Te destruiría en mi mejor momento'".
St. John's College High School, campeonas Conferencia WCAC 2019
Katie ayuda a Azzi con el aspecto mental del juego, como, por ejemplo, cómo sobrellevar una lesión. Cuando Azzi se rompió el ligamento cruzado anterior en 2019, Katie entendió pues le pasó lo mismo en ambas rodillas durante su carrera. "Le digo que me dio malos genes", bromea Azzi.
Pero saber que su madre había superado la lesión ayudó a Azzi a superarla. "Hubo muchas lágrimas, muchos días malos, pero saber que tenía [a mi mamá] de mi lado lo hizo mucho mejor", dijo.
Si bien las cosas han mejorado para las mujeres, Katie señaló que incluso este año, al equipo femenino de Georgetown, que juega en el campus, no se le permitía tener aficionados en los partidos en casa, mientras que el equipo masculino, que juega en el centro de Washington D.C., podía.
““Todavía no estamos allí. Es el turno de mi generación de dar su opinión y mejorar las cosas para la próxima generación”.
AZZI FUDD
Cómo todo comenzó
Cuando no había camino, Cheryl Treworgy trazó el suyo
Cheryl comenzó a correr a los 16 años. El entrenador de atletismo de la North Central (Indianapolis) High School la invitó a practicar, pero la junta escolar le diría que no podía correr con los chicos.
Al final la dejaron correr en la propiedad de la escuela, pero solo al otro lado de la escuela. Atrajo a los medios locales, que ella sintió trataron de normalizar su deporte al incluir sus medidas o posándola en la línea de salida con su uniforme de batonista.
Seis años antes de la aprobación del Título IX, la Universidad Estatal de Indiana le ofreció a Cheryl una beca. Ella lo atribuye a los esfuerzos de la Dra. Eleanor Forsythe St. John, que dirigía el departamento de educación física.
Cheryl fue la primera mujer en recibir una beca deportiva de Indiana State, en un momento en que no existían para las mujeres.
En 1971, Cheryl corrió el Maratón de Culver City, aunque el maratón femenino aún no se reconocía como evento. En la recta final, un hombre intentó sacarla de la pista. Pero ella impuso un récord mundial de 2:49:40 y fue la primera mujer en superar 2:50:00.
Los hombres no estaban acostumbrados a compartir”.
CHERYL TREWORGY
Cheryl siguió en los deportes más allá de su carrera como corredora. Enseñó educación física y fue directora atlética en Oklahoma State y directora atlética asistente y entrenadora de carreras en Michigan State.
Empezó a producir ropa deportiva para mujeres, porque no existía. Diseñó sujetadores deportivos y posee dos patentes de sujetadores.
Como muchas mujeres, Cheryl cambió su nombre al casarse. Ella pidió que todos sus apellidos -- Pedlow, Bridges, Flanagan y Treworgy -- sean incluidos. "Sin usar todos mis nombres, pierdo mi identidad y lugar en el mundo en las diferentes etapas de mi vida", dijo.
Todo se trataba de su apariencia, no de su destreza atlética o sus logros”.
Cosía mucha de mi ropa ... No había ropa que se ajustaba a un cuerpo atlético; o sea, no era el cuerpo de cintura pequeña, caderas más grandes.”.
Cómo le va
Shalane Flanagan, campeona en serie
Después de que Cheryl dio a luz a Shalane, la llevó a trabajar con ella. "Si lees que [Shalane] creció en la parte trasera de una tienda de artículos de correr, es cierto", dijo Cheryl.
Cheryl y Shalane, carrera del Día de la Madre en Colorado
A sus 50 años, Cheryl se convirtió en fotógrafa deportiva y cubría las carreras de su hija. "Mi carrera universitaria está bien documentada gracias a ella", dijo Shalane.
Cheryl en el Maratón de Boston 2015. Shalane quedó novena
"Fue una de las razones por las que comencé a fotografiar", dijo Cheryl. "Yo no tenía fotos mías compitiendo, y quería asegurarme de que mis hijos y los hijos de otros tuvieran esos momentos."
Lo que me pone muy celosa [hoy] son otras chicas con quienes correr”.
CHERYL TREWORGY
Shalane sería la primera campeona nacional de campo traviesa de UNC. Compitió en cuatro Juegos Olímpicos y ganó plata en los 10,000 metros en 2008. En 2017, fue la primera mujer estadounidense en ganar el Maratón de Nueva York en 40 años.
Shalane ganó el Maratón de Nueva York en 2017, la primera mujer estadounidense en hacerlo en 40 años.
Shalane, centro, ganó plata en los 10,000 metros en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.
Shalane batió a Kara Goucher y Amy Begley en las pruebas olímpicas para sellar su cupo en Beijing.
Shalane celebra con una amiga después de completar el Maratón de Nueva York 2021, el cual corrió en 2:33:32.
Shalane, der., abraza a su paisana Emily Infeld, quien ganó bronce en los 10,000 m del campeonato mundial 2015.
Shalane aún corre maratones, incluidos seis en seis semanas el año pasado -- y ahora entrena y cría a su hijo, Jack, que recién cumplió 2 años. Espera alentar a más mujeres a entrenar juntas, en parte porque su mamá nunca tuvo con quien correr.
Shalane y Jack
““Recuerdo que la resistencia de los hombres decía, "¿Hablas en serio? ¿Debemos dar becas a mujeres? Sus habilidades están atrasadas". Yo dije, "Solo espera". Y solo tomó una generación”.
CHERYL TREWORGY
Cómo todo comenzó
Maureen Brady es una superestrella en una familia de estrellas
Maureen creció en una familia de atletas, incluyendo su hermano Tom (sí, ese). Ella comenzó a jugar softbol cuando tenía 5 años y lanzó en Fresno State bajo la entrenadora veterana Margie Wright.
Maureen le da crédito a Wright por luchar por equidad para el equipo.
Recuerdo que mi entrenadora trabajó muy, muy duro por las mujeres y la igualdad de oportunidades en aquel entonces”.
MAUREEN BRADY
Entrenadora Margie Wright, Fresno State, 1986-2012
Maureen, All-American en 1994, encabezó la División I NCAA ese año con 36 victorias.
Cómo le va
Maya Brady está viviendo su meta de competir por UCLA
Maya practicó muchos deportes al crecer, pero sus favoritos eran el fútbol y softbol. Cuando tenía alrededor de 12 años, tuvo que elegir. "No sé qué me atrajo al softbol", dijo Maya, "pero tal vez como mi mamá jugó, me inspiré para ser como ella".
El "Tío Tommy" de Maya una vez la llamó "la atleta más dominante de la familia".
¿Estaría ella de acuerdo con eso? "1,000 por ciento", dijo Maya con una risa.
Su madre es un poco más circunspecta. "Ella es probablemente la más atlética en este punto", dijo Maureen. "Pero vienen muchos niños más jóvenes".
Maureen ayuda a Maya a comprender lo que podría estar pensando una lanzadora, aunque Maya no compartió secretos. "Me está exponiendo", dijo Maya de su madre. "Recibiré muchos pitcheos diferentes ahora".
Pienso como lanzadora ... no quieres que nadie le conecte a tus envíos y debes tomarlo como algo personal que crean que pueden”.
Cada vez que me enfrento a una lanzadora, pienso: 'Oh, ¿crees que puedes sacarme de out? Es gracioso’”.
Maya espera que el softbol siga creciendo y recibiendo más atención de las principales cadenas y medios.
““Cuando la gente ve softbol, se da cuenta, 'Guau, es un deporte que disfruto'. Pero no estamos representadas en los escenarios más grandes”.
MAYA BRADY
Cómo todo comenzó
Cuando UNC formó su programa de básquet femenino, Marsha Lake estuvo allí
De 6 pies 1 pulgada, Marsha estaba destinada a jugar básquet. Su primer año de universidad -- nueve meses antes de aprobarse Título IX -- UNC inició su programa de deportes femeninos con siete deportes, incluyendo básquet. Marsha formó el primer equipo y fue la primera All-American del programa.
Recuerda tener cuatro entrenadores en cuatro años -- "El maestro de educación física escogió el palito corto" -- y recibir 50 centavos para comidas en partidos fuera de casa. "Podías comprar una hamburguesa pero no una bebida", dijo.
Al aprobarse el Título IX, un comentarista deportivo le preguntó de las condiciones del equipo femenino. ¿Tenían balones de básquet? Sí, pero no suficientes para todas las chicas. ¿Tenían uniformes? Sí, pero no pants. ¿Cómo llegaban a los juegos? En la camioneta de la universidad.
Cuando se emitió la entrevista, Marsha dijo que el director atlético la regañó por lo que dijo. Pero el equipo femenino pronto consiguió más balones, pants y al fin le dejaron usar el camión de hombres.
Ojalá tuve algo que ver con eso, yo y mi bocota y esa mini estación de televisión en Carolina del Norte”.
MARSHA LAKE
Las mujeres no tenían un vestuario. El entrenador de hombres de UNC Dean Smith una vez las vio sentadas afuera del vestuario varonil en el medio tiempo y les preguntó por qué estaban allí, dijo Marsha. Después, Smith las dejó usar el vestuario de hombres en los medios tiempos.
En 1973, Marsha viajó a Moscú para los Juegos Mundiales Universitarios. Era la primera vez que las mujeres de EE. UU. compitieron en básquet y abrieron camino para el equipo olímpico femenino. Su pueblo envió telegramas deseándole suerte.
Una compañera de equipo de EE. UU. de Marsha, círculo izq., ya de joven mostró el impulso que le caracterizaría como entrenadora: Pat Summitt, círculo der.
Llegaron a casa con la medalla de plata tras perder ante el invicto país anfitrión, la Unión Soviética. "Fue lo más importante jamás dijo Marsha. "Nadie de Dunn, Carolina del Norte, había hecho algo así".
Mitch Kupchak, GM de los Hornets, Reggie McAfee, cuatro veces corredor All-American de UNC, y Marsha, Juegos Mundiales Universitarios 1973
Luego de graduarse, Marsha dejó de jugar y empezó a enseñar matemáticas en una universidad local. "No había un lugar para que yo jugara", dijo. El básquet femenino hizo su debut olímpico al año siguiente, en Montreal 1976. Marsha fue invitada a probar, pero decidió no hacerlo. "Voy a lamentar eso toda mi vida", dijo. Quedó embarazada de Shea poco después.
Cómo le va
Shea Ralph, un pilar de UConn, se ha aventurado por otro lado
Marsha imaginó que Shea sería alta y podría jugar de pívot, como ella, pero Marsha se aseguró de que Shea perfeccionara su manejo del balón desde joven. Así, podría jugar en cualquier posición.
Marsha organizó juegos contra niños y hombres en el gimnasio de la universidad. "Vaya si mejoras cuando tienes que pasar o driblar o disparar alrededor de los hombres", dijo Marsha.
Shea molesta a su madre sobre su juego, aunque dijo que Marsha es mejor jugadora. (Marsha dijo que Shea es mejor.) "Jugaron mucha defensa en zona. Y le digo, 'Mamá, no fuiste a ningún lado. Tú solo parada en el medio del carril con las manos en alto'", bromeó Shea.
Marsha y Shea, Premios Dial 1995
Cuando el talento de Shea se hizo evidente, Marsha llamó a una vieja amiga. Summitt las invitó a sus campamentos de verano en Tennessee. Shea estaba solo en secundaria, pero Summitt trabajó con ella. "No sé si alguna vez le dije el impacto que me causó, pero lo hizo", dijo Shea. "Aún lo hace".
Los campamentos de verano convencieron a Shea a dedicar su vida al básquet y la presentó a gente de ideas afines. "No me sentía tan aislada o sola", dijo.
Marsha asumió que Shea jugaría para Summitt en Tennessee, e incluso compró la chaqueta. Pero Shea no estaba segura de adónde ir -- hasta que habló con Geno Auriemma. "Mi primera conversación con él, ni estaba en el campus", dijo Shea. "Pensé, 'Voy a jugar para él'".
Shea consuela a compañera de equipo tras perder en semifinales del torneo NCAA
Ralph capitaneó a UConn al campeonato nacional en 2000 y ganó varios premios individuales, incluido el de MVP del Final Four.
La WNBA seleccionó a Shea, pero ella nunca jugó por una serie de lesiones de rodilla. Luchó al perder una pieza central de su identidad. "No podía ver básquetbol", dijo. "No quería nada que hacer con él". Después de un año, ella decidió tratar de entrenar y consiguió un trabajo en Pittsburgh. Luego se reunió con Auriemma en UConn como asistente por 13 temporadas hasta tomar el puesto más alto en Vanderbilt el año pasado.
Las luchas de Ralph formaron su filosofía como entrenadora. Ella anima a sus jugadoras a verse como personas, no solo atletas, y a desarrollar sus intereses más allá de la cancha.
Ella y su esposo, Tom Garrick, ex jugador de la NBA que ahora está en su cuerpo técnico, tienen una hija de 3 años, Maysen. Shea está orgullosa de que Maysen crece en un entorno donde las mujeres hacen deporte universitario y su madre está en un rol de liderazgo. Maysen es una jugadora en ciernes. "Dispara por abajo del hombro, pero en una práctica ella disparó todo el tiempo", dijo Shea. "Hizo 36 canastas".
[Quería] ser un gran modelo a seguir para mi hija y las demás mujeres que quieren hacer esto. Sé que puedo ser genial en todo. Solo necesitaba una oportunidad para mostrar eso”.
SHEA RALPH sobre seguir entrenando después de dar a luz a su hija
Entrenar es un área donde las mujeres no han progresado bajo Título IX. Las mujeres entrenadoras encabezan el 43% de los equipos femeninos de DI, y solo una mujer, la ex WNBA Tamara Moore, es entrenadora de un equipo de básquet de una universidad masculina.
La gente me ha dicho, 'Estás viviendo indirectamente a través de Shea'. Y dije: 'No, lo hice muy bien solita’”.
Todavía me deja cometer mis propios errores ... ahora que hago el trabajo y veo cuánta gente tira de los estudiantes atletas para tratar de llevarlos a ciertos lugares, la respeto aún más”.
Pero Shea tiene clara una cosa que hará diferente a Marsha. Cuando llegue el tiempo de reclutamiento, Maysen no tendrá otra opción. "Ella jugará para Vanderbilt", dijo Shea.
““Cuando pienso en lo duro que es para todas nosotras, pienso en lo que mi mamá hizo. Nunca se rindió, así que yo no puedo. ... Debo luchar por mis jugadoras, por mi hija, por su hija".
SHEA RALPH
Cómo todo comenzó
Gail Hillmon-Williams allanó el camino para una familia de campeonas
En 1977, Gail fue a Bethune Cookman, una HBCU en Florida, como recluta de básquet, pero volvió a casa tras unas semanas para estar cerca de NaSheema, que era bebé en ese momento. Se matriculó en Cleveland State y se unió al equipo.
La madre de Gail la ayudó a equilibrar escuela, básquet, trabajo y bebé. Al graduarse, Gail trabajaría como oficial de libertad condicional y se centró en construir una vida mejor para sus hijos.
Gail, sus hermanas y su madre
Cómo ha continuado
Para NaSheema Anderson, la defensa era el meollo del asunto
NaSheema se inspiró a jugar viendo al equipo femenino en la Universidad de Toledo, donde su tía era preparadora física.
Ella y sus compañeras de la prepa trabajaron duro para atraer público a sus juegos. Pactaron con el equipo de chicos para asistir a los juegos de cada uno. Vendían boletos y realizaban rifas en el almuerzo. Lucharon contra la administración sobre viajes y equipamiento.
Mi mamá trabajaba dos, a veces tres, empleos para asegurarse de que yo pudiera ir a donde debía ir para llegar al básquet a tiempo, y para tener el equipamiento y las cosas que necesitaba”.
NASHEEMA ANDERSON
Un día, a sus 14 años, sintió un par de penetrantes ojos azules viéndola en el gimnasio. Pat Summitt había venido a su preparatoria. Summitt ya estaba produciendo superestrellas, pero NaSheema no tenía idea de quién ella era. Pero cuatro años más tarde, su elección se redujo a Tennessee y Vanderbilt.
Tennessee era el programa más fuerte, pero Summitt quería usar el año redshirt para cambiar el juego de NaSheema. "Ella decía, 'Quiero que vengas, y quiero cambiarte a una 3 [escolta]'", NaSheema recordaba. "Pero yo era buena de espaldas a la canasta. Frente a la canasta, me sentía incómoda." Eligió Vanderbilt.
Él se aseguró de que todo fuese igual. Cuando se renovaron los vestuarios, los vestuarios eran 100% iguales, solo que en diferentes lados del edificio”.
NASHEEMA ANDERSON sobre el entrenador de Vanderbilt, Jim Foster
En su primer año, descubrió que estaba embarazada. Siguió jugando, y Vandy ganó el torneo SEC, venciendo a Tennessee en la final. Ella rechazó la invitación de USA Basketball para jugar ese verano.
Se fue a su hogar en Ohio, tuvo a su bebé en agosto y regresó a Vanderbilt para jugar dos semanas después. Gail cuidó a la bebé y manejó las 12 horas entre Cleveland y Nashville tan a menudo que "se le cayeron las ruedas" a su minivan verde, dijo NaSheema.
Retiro de la camiseta de preparatoria de NaSheema, 2019
Después de la universidad, NaSheema se quedó en Nashville para jugar en la American Basketball League. Recuerda practicar en gimnasios de la prepa y jugar en pequeños auditorios. No sabía lo malas que eran las instalaciones hasta que vio a su hermano, Jawad Williams, jugar en la NBA. Su primera Navidad como profesional, llevó a toda su familia y les compró regalos. Se sentía que al fin triunfó.
Luego vio un titular en el cintillo de noticias de ESPN: la liga había cerrado. A ella no le habían dicho.
Quedó embarazada de Naz y regresó a Cleveland. Su marido la animó a probar la WNBA, pero tenía dos niños pequeños y no creía que pudiera hacer ambas cosas. Mirando hacia atrás, ella dijo que desearía haberlo hecho de otra manera.
Al terminar la universidad, fue todo para mí. Fui a trabajar y comencé a construir para que mis hijos tuviesen un futuro en el deporte o con una buena educación”.
No creo que me sentí apoyada o tuve el coraje de decir, 'Oh, voy a cargar dos bebés a estos juegos de la WNBA'. Mientras que ahora, creo, hemos visto que se puede hacer”.
[Mi mamá] habla de lo agradecida [que está] de que yo pueda tener [mejores condiciones]. Claro, es molesto que ella no las haya tenido”.
Cómo le va
Naz Hillmon se ha ganado su asiento en la mesa de campeones
Naz empezó a jugar al básquetbol por una sencilla razón: quería ser como su mamá. "Todo lo que pudiera hacer para ser como ella", dijo. "Su color favorito era el morado. Yo decía, quiero mi color favorito. Morado".
No hay escasez de campeones en la familia de Naz. Además de Gail y NaSheema, su tía abuela jugó en Case Western, su tía jugó en Virginia y su tío jugó en UNC y en la NBA. Cuando Naz estaba creciendo, le dijeron que no podía sentarse a la mesa de campeones.
NaSheema y Naz ganaron el mismo premio de básquet de prepa, con 23 años de diferencia
Siempre comparan honores. "Eso encendió un fuego debajo de ella como nada más", dijo NaSheema.
NaSheema entrenó a Naz brevemente, pero se dieron cuenta de que que el entrenamiento no era adecuado para su relación. "Estábamos en un curso de colisión ", dijo NaSheema. Instituyeron una "regla de 24 horas", y NaSheema no puede hablar con Naz sobre básquet las 24 horas después de un juego.
Dijimos, 'Está bien, estás invitada a sentarte a la mesa ahora’”.
NASHEEMA ANDERSON cuando Naz ganó su campeonato estatal de preparatoria
A la hora del reclutamiento, NaSheema la preparó a Naz una carpeta con sus opciones -- listas, carreras, tasa de transferencia.
Ella había pasado por eso. Sabía cómo funcionaba y lo que debo y no debo buscar, pero ella me abrió las puertas para que yo tomara esa decisión”/
NAZ HILLMON sobre su mamá ayudándola a elegir una universidad
Naz finalmente eligió Michigan, que estaba bastante cerca de Cleveland como para que su familia pudiese venir a todos sus juegos en casa. NaSheema enviaba a toda la familia -- a veces 40 personas -- itinerarios, asignaciones de carros y revisaba que todos tuvieran sus boletos.
Las tres mujeres valoran la defensa, la dedicación y los fundamentos del juego. Se escucha a Gail gritando, "¡Rebote!" en los juegos de Naz. Naz tiene video nunca antes visto de su abuela jugando, pero Gail ve su propio juego en la garra de su nieta.
Puedo ver la diferencia entre cuánto amor y apoyo recibió Naz a diferencia de lo que mi mamá y yo recibimos. Es tan bueno ver que [Naz no] tiene que pelear esa pelea. Tienen otras batallas por librar”.
NASHEEMA ANDERSON sobre el progreso del Título IX
Gail recuerda que una niña pequeña se le acercó en un juego reciente de Michigan y le dijo: "Por [Naz], juego básquet por mi escuela". Más tarde, Gail le presentó a Naz. "Sin duda eso es algo que ella nunca olvidará", dijo Gail.
En la universidad, Naz ha sido líder sobre la justicia social. En abril, fue reclutada por el Atlanta Dream, la selección más alta de Michigan en un draft de la WNBA.
““¿Obtengo lo mismo que un hombre, o una mujer blanca? ¿Recibo las mismas oportunidades? Cuando no tengamos que pensar en eso, entonces realmente estaremos en un buen lugar”.
NAZ HILLMON
Cómo todo comenzó
Lo que Marilyn Bamberger Lyke quería era recorrer toda la cancha
Al crecer en las décadas de 1940 y 1950, la clase favorita de Marilyn en Canton, Ohio, era educación física, pero las clases estaban divididas por género y las diferencias eran drásticas.
Los chicos tenían equipos de primer año, JV y varsity en fútbol americano, básquet, béisbol, atletismo y más. Jugaban ante llenos totales. Las chicas no tenían equipos deportivos.
En sus últimos dos años de prepa, a las niñas se les permitía hacer pruebas para básquetbol. Se dividían en dos equipos de seis personas y se medían solo una vez. No podían cruzar la línea de la media cancha y solo podían botar dos veces antes de tener que pasar o tirar.
En universidad, las mujeres solo podían jugar intramuros excepto en hockey sobre césped y básquetbol. Le encantaba hockey sobre césped "pues al fin podía recorrer la cancha completa. No tenía que parar en el medio".
Marilyn obtuvo su maestría en educación física en Bowling Green a mediados de los años 60. Recuerda ser la única mujer en una clase de administración deportiva y un maestro le preguntó si la escuela debería pagar los uniformes del recién formado equipo de básquet femenino.
"Y lo primero que me vino a la mente fue, quiero tener un buen trabajo al graduarme esta primavera", dijo Marilyn. "¿Cómo saco A en esta clase y respondo a esta pregunta y lo hago feliz?"
Cómo ha continuado
Heather Lyke pasó de practicar deportes a dirigirlos
Heather disfrutó de muchos deportes al crecer, pero amaba el aspecto de equipo de softbol. Jugó en Michigan bajo la mítica Carol Hutchins, a quien atribuye la lucha por la equidad de la mujer.
La noche previa a los juegos, Heather y sus compañeras de equipo esperaban en sus dormitorios por si sonaba su teléfono pidiendo que cubrieran el campo con una lona para protegerlo de la lluvia. La mañana siguiente, les llamaban para decirles que la quiten. "Ay de ti si no estabas en tu cuarto", dijo.
El equipo de béisbol masculino tenía personal de mantenimiento de campo.
Heather iría a la facultad de derecho. Ella no planeaba ser directora atlética, pero mientras estudiaba leyes contactó a Peg Bradley-Doppes, entonces la directora atlética asociada sénior en Michigan a cargo de softbol. Le preguntó a Bradley-Doppes cómo podía llegar a ser como ella.
Trabajó en la NCAA y luego en Cincinnati, Ohio State y Eastern Michigan antes de volverse en una de seis directoras atléticas en el Power 5.
Como directora atlética a cargo de hacer cumplir el Título IX, Heather dijo que es "deliberada" al priorizar iniciativas de equidad. "Debes tenerlo en la mente", dijo.
Gracias, no soy esposa de entrenador. Soy la directora atlética”.
HEATHER LYKE al guardia de seguridad que le dijo que esposas de entrenadores no pueden entrar al campo de fútbol
Cómo le va
Sophie Catalano sabe lo lejos que han llegado las mujeres
Sophie acudirá a Clemson como jugadora de vóleibol este otoño. Ella desea volver a casa para jugar contra Pitt, donde su madre es la directora atlética y su entrenadora de secundaria, Angela Seman, ganó dos títulos ACC.
Heather está orgullosa de que a dos generaciones de la experiencia de básquet de seis contra seis de Marilyn, Sophie tendrá la misma experiencia estudiante-atleta que el equipo de fútbol americano.
Pienso, '¡Dios mío, cómo nos obstaculizaron!' Ahora es incomprensible”.
Los presidentes tiene que darle a las mujeres la oportunidad. Ellos deben ver a las mujeres triunfar. ... Mientras más mujeres tengan éxito, más oportunidades”.
Desde que mi abuela jugaba en los años 50, sin duda ha avanzado mucho. Hay muchas más oportunidades...”
““Los chicos de hoy no van a estar callados. ... Hace que las personas sean más responsables si se dan cuenta ... que les llamarán la atención”.
HEATHER LYKE
Cómo todo comenzó
Después de los Juegos Olímpicos, Missy Marlowe dominó la NCAA
Para Missy Marlowe, la universidad fue una forma de seguir su carrera. Después de competir en los JJ. OO. de 1988, ella sabía que quería ir a la Universidad de Utah, muy cerca de donde ella creció.
La brecha entre la gimnasia de élite y la universitaria era aún mayor a principios de los años 90, y no era común que olímpicos compitieran en universidad.
“El nivel de habilidad era más bajo y el tiempo de entrenar limitado a 20 horas a la semana; Missy dijo, 'Y yo estaba acostumbrada a 25 o 30”.
Missy guió a Utah a dos campeonatos nacionales. La 12 veces All-American ganó cinco títulos individuales de la NCAA, incluyendo cuatro en 1992. Fue la primera gimnasta universitaria en anotar un 10 perfecto en los cuatro aparatos.
En 1992, Missy fue la primera gimnasta en ganar la Copa Honda-Broderick, que reconoce la mejor atleta femenina de la NCAA. "Ese año grandes nombres ganaron sus respectivos deportes -- Dawn Staley en básquetbol, Lisa Fernandez en softbol, Mia Hamm en fútbol", Missy dijo. "Así que fue genial que finalmente se lo dieran a una gimnasta".
Missy, centro, guió a su equipo a títulos NCAA por equipos en 1990 y 1992.
En 1993, Missy recibió el premio de atleta Top VI de la NCAA, una de solo dos mujeres en ganar ese año.
Missy ganó 4 títulos individuales NCAA en los nacionales de 1992.
El entonces director atlético Chris Hill presentó a Missy con el premio a la Mejor Atleta Femenina WAC del Año 1992 en un juego de fútbol americano.
[Tuvimos] lo mejor de todo en Utah. ... El trabajo del Título IX ya lo prepararon por mí. Yo estaba en la mejor edad para aprovechar lo que otros hicieron.”.
MISSY MARLOWE
Cómo le va
Milan Clausi siguió a su madre a la gimnasia pero trazó su propio camino
Después de graduarse, Missy se casó con su novio de universidad, que jugaba fútbol americano en Utah, y abrió su propio gimnasio, que se convirtió en "guardería" para Milan. Entrenó a Milan varios años, pero aprendió a no interferir demasiado.
Yo decía, prueba eso, esto y aquello. Esas eran conversaciones para entrenadores. Sin duda debí pasar por un período de transición. Este ya no es mi lugar”.
MISSY MARLOWE
Por otro lado, Milan dijo que anhela las críticas de su madre después de competir. "De todas las personas con quienes he tenido el privilegio de trabajar, tiene uno de los mejores ojos del deporte", dijo Milan sobre su madre. "Después de competir, la llamo y le pido su opinión y lo que piensa sobre mis actuaciones".
Missy es entrenadora personal y tomó un segundo empleo para pagar los viajes a las competiciones de Milan.
Milan probó la ruta de élite varios años, pero optó por la universidad. Ella no quiso seguir a sus padres a Utah. "Hubiera habido mucha comparación", dijo.
Tampoco quería estar en un equipo ya dominante. "Quería ser capaz de contribuir a algo que aún iba en ascenso", dijo.
Con ayuda de Milan, Cal fue segundo en los campeonatos Pac-12 cada uno de los últimos dos años, y terminó la temporada 2021 ranqueada quinta en la nación, lo más alto jamás para el programa.
[Mi mamá] tenía mucha más flexibilidad que yo. Y ella tenía un elemento de gracia ...”
Milan tiene poder que nunca tuve y fuerza que nunca tuve. Puede hacer pases de volteretas fácilmente con los que realmente luché”.
Milan se mudará de vuelta a Salt Lake City luego de graduarse para apoyar a su hermana menor en su año final de vóleibol de preparatoria.
““Será un día realmente genial cuando un atleta esté en la cima de su juego independientemente de su género, y es el mejor que lo ha hecho y no importa”.
MILAN CLAUSI
Producción: ESPN Creative Studio: Jessi Dodge, Karen Frank, Jarret Gabel, Alecia Hamm, Kaitlin Marron, Beth Stojkov
Redacción: Elaine Teng
Fotografía: The Tyler Twins, Cortney White, Hana Asano, Diana King, Ed Linsmieir, Sarah Rice, Carolyn Fong
Producción de talento: Stacey Pressman, Lindsay Steckel y Katie Hennessey
Diseño: Jasmine Wiggins y Beth Stojkov. Investigación: Dana Lee. Pelo y maquillaje: Yajaira Daniel, Kimberly Briggs, Simon Rihana para Art Department LA, Anna Branson para AMAX Talent Agency, Paige Ryan, Antonio Amon, Phylicia Bongiorno Kalivoda, Janet Mariscal. Imágenes adicionales: Azzi Fudd,Brady Family, Cheryl Bridges, Heather Lyke, Hillmon Family, Marilyn Bamberger Lyke, Marsha Lake, Missy Marlowe, Shea Ralph, AP, ESPN Images, Getty, Icon Sports Media, Imagn, Pac-12 Network, Bentley Historical Library, Cal Athletics, Cleveland State Athletics, Fresno State Athletics, Georgetown University Athletics, Indiana State Athletics, Michigan Athletics, Michigan State Athletics, Otterbein University Archives, Pitt Athletics, Pitt Studios, UCLA Athletics, UNC Athletic Communications, University of Utah, Vanderbilt Athletics
