PITTSBURGH -- Los Cleveland Browns se unieron a los Detroit Lions del 2008 como los únicos equipos en la historia de la NFL en culminar con marca de 0-16 cuando no pudieron encontrar el modo de derrotar a unos Pittsburgh Steelers repletos de reservas en un tropiezo por 28-24 el domingo.

Cleveland tuvo una oportunidad en el cuarto periodo, pero el pase de cuarta oportunidad del quarterback DeShone Kizer a Corey Coleman cayó incompleto tras tocas las manos del receptor abierto.

Y por ocasión N° 16 en el 2017, los Browns salieron del campo en busca de respuestas que son tan elusivas ahora como en cualquier momento desde el regreso de la franquicia a la NFL hace casi dos décadas. Se espera que el head coach Hue Jackson regrese pese a una marca total de 1-31 y los Browns tienen dos de las primeras cuatro selecciones en el draft del 2018.

Kizer finalizó con 314 yardas por aire y dos touchdowns a Rashard Higgins, pero también lanzó una intercepción de cuarta oportunidad, su N° 22 de la campaña, la mayor cantidad en la NFL.

Los campeones de la AFC Norte, Steelers (13-3), sentaron a los titulares Ben Roethlisberger y Le'Veon Bell entre otros, pero poco importó. Landry Jones completó 23 de 27 pases para 239 yardas con un touchdown y una intercepción, y el receptor abierto novato JuJu Smith-Schuster atrapó nueve pases para 143 yardas y una anotación. Devolvió una patada de salida 96 yardas para touchdown.

Pittsburgh capturó a Kizer seis veces, elevando su total en la campaña a 56, una marca de franquicia.

A casi cuatro meses de una dura derrota por 21-18 ante Pittsburgh en la apertura de campaña --un partido que parecía implicar que los Browns estaban listos para dar un pase significativo en el segundo año de Jackson-- Cleveland saltó al Heinz Field buscando su primer triunfo en 372 días.

La espera seguirá por otros ocho meses luego de tres horas que simbolizaron la históricamente miserable campaña de Cleveland.

Aunque hubo destellos de competencia, incluyendo un par de robos de balón y largos pases de Kizer a Higgins y Josh Gordon, los Browns simplemente no pudieron limpiar sus errores. Dos veces en la primera mitad cometieron castigos en tercera oportunidad que extendieron series de Pittsburgh. Tres veces en el cuarto periodo tuvieron el balón con la posibilidad de ponerse arriba.

Las primeras dos terminaron con entregas de balón, dando a Cleveland 41 --el total más alto de la NFL-- para la temporada. La tercera acabó cuando Kizer de algún modo escapó a la presión en cuarta oportunidad en la yarda 27 de Pittsburgh sólo para ver el ovoide pegar en las manos de Coleman para caer al suelo, una última oportunidad desperdiciada en un año repleta de ellas.

Aunque se espera que Jackson, quien saltará en el Lake Erie en algún punto del futuro cercano para pagar su apuesta de que los Browns no se irían 1-15 como hicieron en el 2016, regrese en el 2018, otra temporada baja de búsquedas aguarda.