Nápoli cayó ante un Lecce que luchó por salvarse

ROMA (ESPNdeportes.com) - En un partido de la trigésimo sexta jornada del campeonato italiano, Lecce sumó un triunfo importantísimo ante Nápoli por 2 a 1, que llegó gracias a los goles de Daniele Corvia y Javier Chevantón, a pesar del empate momentáneo de Giuseppe Mascara.

De esta manera, el Burro se quedó tercero con 68 puntos y aún no alcanzó la matemática clasificación directa a la Champions League, mientras que los rojoamarillos, en la espera del match de Sampdoria, se treparon al umbral de la permanencia, que ocupan con 38 unidades.

Fue un partido bastante trabado y muy raro y, en efecto, desde el principio se vio que todos los jugadores estaban muy nerviosos, lo que penalizó claramente la calidad del juego. Por parte de los locales esa carga anímica era natural, pero no se entendió porque los celestes estuviesen en ese estado psicológico.

Así, el primer tiempo se fue con apenas un par de ocasiones por parte y una buena cantidad de faltas cometidas por ambos lados. En esa etapa, el referí y el primer asistente fallaron en dos situaciones, cobrándole un off-side inexistente a Maggio y no otorgándole a los locales un penal por una falta de mano de Cannavaro.

Todo se puso aún más duro y complicado cuando, al comienzo del primer tiempo, el referí concedió un lateral para los locales (parecía al revés), quienes sacaron rápidamente y se ganaron un penal con Olivera. Corvia transformó desde los once pasos y puso en ventaja a su equipo.

Poco más tarde el delantero de Lecce, que había sido amonestado por protestas en ocasión del penal no cobrado en el primer tiempo, cometió una inútil e ingenua falta sobre Levezzi, mereciéndose la segunda amarilla y dejando a sus compañeros con hombre de menos.

Mazzarri aprovechó el regalo y metió enseguida dos cambios perfectos, con Zúñiga por Dossena y Mascara por Yebda: justamente ellos dos, pocos minutos luego de sus ingresos, crearon el gol del empate, con un gran centro desde la izquierda del colombiano y el frentazo ganador del italiano.

Nápoli parecía poder dar vuelta el marcador, pero Cavani en pocos minutos lo arruinó todo: primero el uruguayo falló una chance buenísima, cuando alcanzó un balón que había quedado perdido picando alto casi sobre la línea del área chica, pero de cabeza definió increíblemente alto, desaprovechando la ocasión.

Luego, tras haber pifiado una volea que podía valer el gol del triunfo, en el intento de recuperar el balón terminó por bajarlo de manera dura a Olivera. El referí, que lo había amonestado al Matador por las protestas en ocasión de ese famoso lateral invertido del que hablamos arriba, lo echó a Cavani mostrándole la segunda amarilla.

De Canio, como Mazzarri antes, vio en este episodio la chance para ganar el desafío: así, lo metió a Chevantón por Munari, para aumentar el poder ofensivo de su cuadro. Movida correcta, porque a pocos minutos del final, el uruguayo recibió el esférico sobe el límite de la medialuna y, con excelente coordinación, le pegó con un fierro y envió el balón a astillar el travesaño y a meterse un metro atrás de la línea.

Lo curioso fue que el balón rebotó afuera, De Sanctis lo capturó y fue a sacar el pelotazo, puesto que ni el referí ni el juez de línea cobraron el gol. Sin embargo, algunos segundos más tarde, sin recibir evidentes indicaciones, el arbitro decidió (con justicia, porque la pelota entró) cobrar el gol.

Lecce, también en esta ocasión, arriesgó muchísimo, porque Mascara tuvo otra grande chance para igualar nuevamente, pero esta vez su disparo salió de poco a lado. Al final, el conjunto rojoamarillo sumó un triunfo de oro, que le permite soñar nuevamente con la permanencia en Serie A.

La figura de ESPNdeportes.com: Javier Chevantón (8)