Layún, solo necesito dos minutos

PUEBLA (Graciela Reséndiz - ESPN.com) -- Con gol de Miguel Layún al minuto 2, el América venció a domicilio al Puebla, que hoy no dejó de luchar, pero tampoco de sufrir. Un triunfo le habría dado al equipo de La Franja la salvación automática; ahora, alargará su agonía hasta las ocho de la noche, cuando conozca la suerte del Atlante en Torreón.

Para su mala fortuna, desde el minuto 61 jugó incompleto. Uriel Álvarez salió expulsado por barrerse inconscientemente sobre Paúl Aguilar.

La figura: Miguel Layún. Ya es costumbre. Con su pundonor ha sacado de problemas al América más de una vez. Aparece siempre donde hay peligro. Es un jugador oportuno que suele no perdonar. A él se deben los 3 puntos conseguidos por los capitalinos, que no hizo más.

El villano: la defensa poblana. Fue complaciente por su lado derecho, donde Layún se fue perfilando sin que nadie se lo impidiera y sacó el remate que abrió le marcador. El portero Jorge Villalpando se recostó hacia donde pasó la pelota y prácticamente se lo comió.

Puebla: ni tiempo tuvo para demostrarse a su afición que estaba para darle pelea a un grande del futbol mexicano. De súbito recibió un gol de Layún al minuto 2, por lo que el planteamiento preparado por técnico Rubén Omar Romano hubo de comenzar de cero. Cn el marcador en contra no tardó mucho tiempo en reajustar líneas, pues la idea era atacar al América, aunque ya en desventaja tampoco iba a descuidarse atrás. Por lo mismo no atacó mucho; iba al frente, pero primero pensando en que no le hicieran otro gol. Pero su engranaje ofensivo no funcionó. Hacía más falta de lo debido la ausencia de Michael Orozco, fuera de acción por una lesión muscular. Con su limitado ataque no pudo acortar distancias en la primera parte, y en el arranque de la segunda aunque regresó al campo con mucha determinación, en los primeros 10 minutos tampoco lo consiguió, no obstante tener más tiempo el balón. El examen estaba duro. Y el sol que pegaba a plomo tampoco ayudaba mucho. Había precipitación en el disparo decisivo, más allá de que no había caminos libres hacia la portería defendida por Moisés Muñoz. Ni por donde anotarle a las Águilas, que contragolpeaban en la primera oportunidad que tenían. Y pasado el minuto 60 el mundo se le vino encima al equipo de la franca. Uriel Alvarez recibió la roja directa por una barrida exagerada sobre Paúl Aguilar. Otra vez a replantear el juego, con un hombre menos, pero ni este detalle le bajó el ánimo. El Puebla luchó a más no poder. Fue el conjunto que hizo el gasto, pero sus posibilidades ofensivas no fueron muchas y perder fue su único destino.

América: entró al campo con la suerte de su lado, ésa que en otras ocasiones le ha dado la espalda. Del vestidor se trajo un gol que firmó Miguel Layún en jugada individual. Las tribunas amarillas rebozaban de alegría. Las Águilas sin tiempo para mostrarse superiores ya estaban 0-1 arriba. Luego, ya asentado, con todo a su favor, se fue al frente pero sin agobiarse tanto ni tampoco al rival, al que en todo momento trató de darle la iniciativa. Tuvo más arribos aunque ninguno de verdadero peligro, pues a sus intentos les faltó dar el último paso. Quizá ahí faltó la inventiva del suspendido Rubens Sambueza. Lo cierto es que las Águilas no se emplearon a fondo y se fueron al descanso con la victoria parcial. No hicieron cambios para los segundos 45 minutos, vaya que hacía falta, pues el puebla se le vino encima, aunque sin mucho orden, por lo que de alguna manera le facilitaba la labor defensiva. Las Águilas crearon poco a la ofensiva; su virtud fue saber mantener el resultado a su favor durante casi todo el partido. Los cambios que hizo se encaminaron a ello.

Lo que dejó el partido: América llega a 24 puntos y sigue como uno de los candidatos a calificar. El Puebla se queda con 12 unidades ya alarga su agonía. Hoy por la tarde jugará el Atlante en Torreón y de perder estaría los poblanos se salvarían y los Potros le dirían adiós a la Primera División.

Incidencias: el precio del boletaje subió al doble. A 560 pesos un lugar en platea. Las taquillas no vendieron todo lo que ofrecieron.

Para twittear: el Cuauhtémoc, una sucursal del Azteca. ¡Tribunas bañadas de amarillo!

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