Barcelona gana, pero pierde a Messi

BARCELONA (Jordi Blanco, corresponsal) -- Dos goles de Luis Suárez, un penalti fallado por Neymar... Y Messi en la clínica. El Barcelona aparcó cualquier urgencia ganando al Las Palmas un partido plano, aburrido, casi ocioso y sin alegrías desde que Leo se retiró, lesionado, a los 9 minutos. Un sábado muy diferente a lo que se esperaba.

El Barça no tuvo demasiado que pelear para conquistar los tres puntos en el retorno del Las Palmas al Camp Nou después de once años, pero todo en el estadio quedó en un segundo plano desde que Messi se llevó la mano a la rodilla por primera vez a los tres minutos al chocar ante Bigas y cuando a los ocho pidió el cambio.

Sólo se sufrió en la parte final, cuando un error garrafal de Mascherano provocó una contra mortal del equipo canario que sentenció Viera, con la colaboración de Piqué al desviar su disparo. No tuvo, sin embargo, mucho tiempo el Las Palmas para aspirar a un empate que tampoco habría sido lógico.

Antes, Suárez desatascó el encuentro gracias a sendas acciones de secundarios que tomaron el papel de protagonistas. Entre Munir y Sergi Roberto fabricaron el 1-0 y el mismo Munir le dio la asistencia del 2-0 que dejó pasar Busquets. Ausente Messi, el uruguayo tomó el liderato en el campo, guiando a sus compañeros y provocando después un penalti, claro, por mano de Alcaraz que Neymar, para no perder la costumbre, falló.

El Barcelona tiene un problema evidente con los penalties. "Menos mal que no tenemos ninguna tanda", se escuchó bromear en el graderío del estadio, donde la hinchada estuvo siempre más ocupada en conocer detalles de la lesión de Messi que en seguir la realidad del partido.

Todo quedó en segundo plano, comenzando por el 'castigo' que se adivinó a Alves en el lateral derecho, donde Sergi Roberto cuajó otra vez una actuación más que buena, hasta el gol número 16 encajado por Ter Stegen o la amonestación a Suárez en el tiempo añadido por una entrada fuera de lugar.

El Barça ganó... Pero perdiendo a Messi se marchó la hinchada con una preocupación que hacía mucho tiempo no se contemplaba en el Camp Nou.